- jungkook-ssi. ..
Llamo el de cabellos rubios sin apartar su mirada de los vegetales.
- deja de parlotear park...
Dijo jungkook en un tono cansado sin reparar en jimin.
Ignorando su pedido jimin siguió con lo que intentaba decir.
- ¿recuerdas aquella vez en donde un maldito infeliz y ebrio nos atacó?. ..
Preguntó con un molesto nudo en la garganta, uno que notablemente debilitó su voz.
-...
Jungkook no respondió, pero jimin sabía que le estaba escuchando, asi que prosiguió.
- tomare eso como un si, ..
Pronunció inspirando la mayor cantidad de aire a sus pulmones antes de continuar.
me odié ¿sabes?, el que el maldito te rompiera esa botella de licor en la cabeza. Y luego el verte sangrar. ..
La voz se le quebró. Y jungkook sintió un pinchazo en su corazón.
Claro que lo recordaba, recordaba cada maldito segundo vivido a su lado, tanto los momentos buenos, como los malos, y eso era jodidamente. .. lamentable.
- no fue tu culpa park.
Dijo jungkook sin girarse a verlo, ejerciendo una mayor fuera en el mango de la cuchara que yacía en su mano derecha, no quería verlo llorar. Así que siguió revolviendo la salsa para la pasta que yacía en el fuego.
- lo fue. .. si tu no hubieras tratado de defenderme no te hubiese pasado nada, ni ésa vez, ni cuando te facturaron las costillas. .. ni las tantas veces que nos humillaron, nada te habría pasado si no me hubieras conocido.
Refuto jimin derramando un par de lagrimas silenciosas.
- ¿te arrepientes de habernos conocido?.
Inquirió jungkook, no sabia si en verdad quería escuchar la respuesta.
- éso es lo peor. ..
Empezó el de cabellos rubios y jungkook detuvo sus acciones momentáneamente.
que no lo hago. Me he arrepentido de muchas cosas en éste largo tiempo, como de haberte arrastrado a mi mierda, pero jamás de haberte conocido, si tuviera opción, tal vez si hubiera preferido que no nos conociesemos, en cierta manera es contradictorio, lo sé, pero hubiera elegido eso sólo para que tu no sufrieras, yo-. ..
- es suficiente, park. ..
Paró jungkook, no queriendo escuchar más, aún no se sentía preparado.
Esa había sido la última conversación que tuvieron aquella noche en la cocina de la casa, después de eso la noche fue un poco. .. extrañamente... decaída.
Por supuesto sólo para jimin y jungkook, que se la pasaron mayormente sentados una al otro extremo del otro, jungkook esperaba que éste siguiera igual de encimoso que los últimos meses, pero en cambio sólo se dedicaba a mirarle de vez en cuando desde su lugar con los ojos visiblemente tristes. claro, hasta que su amiguito de cabellos grisáceos apareció llevándoselo de su vista un par de minutos, veinte para ser exactos. No es que jungkook estuviera contando los minutos.
Después de ese tiempo volvieron a aparecer, está vez con un jimin de mucho mejor humor, lo cual en cierta manera le extraño al de cabellos azabache, empezaba a notar que cada vez que jimin estaba con taehyung no paraba de sonreír, justo como lo estába haciendo a un metro y medio de distancia de él, ¿era necesario estar tan cerca el uno del otro para simplemente hablar?, jungkook por alguna razón sintió un pequeño pinchazo cuando a su memoria llegó el mismo chico rubio vestido de traje blanco, bailando con uno de traje verde, y aúnque en ése momento aquel chico tenía todo su rostro cubierto por una máscara su cabellera si estaba a la vista, la misma cabellera color grisácea.
Parecían una pareja en vez de amigos, los amigos no bailan tan pegados, ¿o sí?, jungkook pensó que no, él y yoongi jamás bailarian de ese modo juntos.
A jimin se le iluminó el rostro por algo que dijo tae en su oído y pasó a estar sorprendido y abrir ligeramente sus labios en lo que parecía ser un pequeño círculo a sonreír enormemente, haciendo a sus ojos desaparecer en una línea recta, ¿hace cuando que no veía esa sonrisa?, mucho, demasiado tiempo, y saber que no había sido él el causante de ella le molesto, pues se dio cuenta de que jimin podía sonreír de esa manera para alguien más que no fuera exclusivamente él, como una vez le había prometido.
Maldita vida. ..
- hey, si sigues viéndolo tan intensamente lo vas ha desgastar amigo.
Había pronunciado una voz antes de sentír el mullido sillón hundirse ligeramente a un lado de él.
Jungkook dirigió su mirada hacia él, encontrándose con hoseok sonriendole amistosamente.
¿quieres una copa?, siento que te hace falta.
Ofreció extendiendole un pequeño vaso de cristal que contenía un líquido amarillento y cubitos de hielo que tintinearon cuando jungkook lo tomo en una de sus manos.
- gracias.
Agradeció el de cabellos azabache.
- ¿pasó algo alla en la cocina?, no es que sea entrometido pero vi a mini salir de ella con los ojos un poco rojos.
Preguntó hoseok dando un pequeño sorbo a su improvisada copa.
- debió ser por picar cebolla. ..
Respondió jungkook desinteresadamente.
- si claro. .. si la cebolla se llama jeon jungkook, debió ser eso.
Dijo sarcásticamente pero sin borrar su amable sonrisa captando la atención de jungkook que le miró fijamente.
- . .. ¿como..
Intento preguntar el de cabellos azabache con una pizca de sorpresa.
- si lo que preguntas es como sé, amigo, en está casa todos somos una familia, entonces lo raro sería que no supiéramos que pasa entré ustedes dos, por supuesto no estoy diciendo que sepamos toda la historia, pero tenemos una idea de ello.