Vuelve a mí

Capítulo 42

Esperaba volver a recibir alguna noticia.

Esperaba al menos conocer a quién me dejó la nota,pero nada.

Ya amaneció y yo sigo en ésta habitación,sin saber cuál será el siguiente paso que dará el maniático ese. 

Para ser sinceros,ahora ya no tengo miedo,ya no como antes.

¿Será por todo lo.que ya llegué a pasar?

No sé. 

Pero debo admitir que escuchar esas confesiones hizo que me derumbara y desanimara desobremanera. Tener conocimiento de esos sucesos hizo que...por una parte,me sintiera mucho más orgullosa del gran hombre que tuve como padre. Mi corazón se comprime al imaginar la decepción en sus ojos al ser engañado por una persona tan vil como lo es el señor Weller,quién decía ser su mejor amigo. 

Por otra parte...siento lástima por éste,es decir....no puedo perdonarlo por haber sido el culpable de la muerte de la persona más importante de mi vida. Pero...las cosas ocurrieron así,gracias a esos sucesos que marcaron mi infancia y vida,ahora volví a encontrar a alguien que me ama a pesar de todo.

¿Qué hubiera pasado si mi padre seguía vivo?

¿Qué sería de Nicholas ?

De los amigos que conocí,los que ahora tengo.  No puedo quejarme de mi vida actual,también comprendo ahora que no puedo estar siempre estancada en el pasado. El recuerdo de mi padre es lo más valioso que tengo y seguirá siendo así,sin importar cuántos cambios ocurrar en mi vida. 

Por todo ésto  pienso que....sentir lástima por éste señor es acertado. Una persona que siempre vivió de la codicia y el poder,no puede entender cuán valioso es tener a alguien que te ame y valore sin importar lo que tengas o no. 

Además de perder mi tiempo tratando de encontrar algo positivo por el cuál seguir adelante...no he hecho nada más. 

Las horas aquí trascurren de manera distinta,las manesillas del reloj pareciera que se burlan de mí haciendo que las horas se alarguen a tal punto de volverme loca. Tanto así que en la noche se me hace imposible conciliar el sueño,mis ojos están cansados de llorar y ver el mismo lugar. 

Hasta creo estar alusinando,ya que,durante la noche creo ver una silueta entrar por la puerta y sentarse junto a mi cama por un largo rato.  Por momentos pienso que se trata del señor Weller...pero no,es una figura pequeña,similar a la de una mujer.

¿Quién será?

Sin duda,me estoy volviendo loca.

Unos pequeños golpes se escuchan en la puerta,pero ésta no se abre. De pronto una nota se hace visible...corro casi cayendome a agarrarlo,pero sólo tiene escrito un "Come". 

La puerta se abre sólo lo suficiente como para meter la charola. Espero ansiosa ver el rostro de quién me ha estado dejando las notas pero....sólo me encuentro con la sonrisa amable de una chica,quien parece trabajar aquí. 

Trato de devolverle la sonrisa,dejando de lado la decepción. Arrastro la charola hacia mí,inmediatamente ella cierra la puerta y la escucho alejarse a paso veloz.

Me voy hasta la cama y empiezo a comer...o eso trato,ya que,el nudo en mi estómago  hace imposible el trabajo de digerir.

Luego de unos mimutos de haber terminado,la puerta se abre abruptamente. 

_Vaya...vaya..  (Inquiere el señor Weller) veo que la rata te estuvo alimentando bien.

Se acerca a mí con una sonrisa,como ocultando algo...o maquinando algún malévolo plan.  Como esos villanos en las películas,quienes actúan así antes de explotar algo o cometer algún crimen.

Toma la charola y se la pasa a su perro guardián,me refiero a ese hombre que de sólo verlo te da mala espina,su rostro serio le da un aspecto mucho más rudo de lo que aparenta. El mismo quién estuvo con él aquella vez en lo de Amanda.

Ambos se dirigen a la salida,no sin antes voltarse hacia mí,con  un tono divertido y manteniendo siempre la sonrisa decirme.

     "Prepárate,cenaras afuera hoy

Me quedo con un muy mal presentimiento. 

Es decir...es obvio que su plan no es llevarme a un restaurante,corriendo el riesgo de escaparme o pedir ayuda.

Tampoco creo que lo haga porque se siente arrepentido y quiere discutir tranquilamente.

Todo ésto es muy raro y definitivamente no terminará bien,al menos no para mí. 

Espero....

Espero....

El momento de salir se acerca cada vez más. Me trajeron un vestido amarillo...zapatos del mismo color,igual que las joyas. 

Al principio traté de mantener la calma pero a éstas alturas...ya no sé.  Estuve  mucho tiempo trabajando en la floreria y era un requisito esencial conocer el significado de cada flor y sus colores. 

En éste caso el amarillo....el amarillo era uno de los colores que poco o nada se llegaba a vender.  Tal vez muchos lo ignoren...pero las rosas amarillas simbolizan la traición,el engaño. Si bien es muy hermosa...obsequiarle un ramo de rosas amarillas a alguien,no siempre es para demostrarle tu amistad o cariño,como muchos piensan.

Todo estaba perfectamente acomodado y yo estaba que me comía los dedos de tan nerviosa que estaba. Sé que algo está tramando...estoy segura. Camino por toda la habitación,desesperada...mi corazón cada vez late con mas frenesí,anticipando el momento.

Escucho unos pasos..cada vez más cerca,pero....son zapatos de mujer,es decir,con tacones. Me acerco a la puerta tratando de escuchar mejor.

_¡SUELTAME! Se escucha la voz agitada de una mujer.

_¡HARÁS LO QUE TE ORDENE MALDITA! Esa es la voz del señor Weller. 

_No dejaré que cometas una locura...

_Oh querida...ya está decidido.

_¡¡Que me sueltes!! Grita nuevamente. 

De pronto todo queda en silencio...ya no logro eschar nada hasta unos segundos después. 

_Mira maldita...tú estás viva sólo porque tu hija está ahí adentro y me es útil aún,¡¡ASÍ QUE CÁLLATE!!

¿Su hija?

¿Hay alguien más aquí?

¿Pero quién?

_Esa mocosa no es nada mío...por mí matala.

Llevo las manos a la boca...incredula,como puede....

Cómo puede existir gente así,incluso es más miserable que el señor Weller...pobre de la hija.



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En el texto hay: amor y venganza, celos drama amor

Editado: 22.07.2021

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