Capítulo IX

Afortunadamente para el príncipe ese horrible y tedioso día finalmente estaba terminando y ya no tendría que preocuparse más por lo que había sucedido la mañana anterior. Los rayos del sol se iban desvaneciendo en un cielo anaranjado que pronto se bañaba en tinieblas, arriba las nubes eran oscuras y débiles en el oscuro cielo nocturno, está imagen perfecta era como uno de esos sucesos que no se repetían fácilmente, pero en su corazón se sentía como un reposo y una señal de que todo estaba por cambiar. Despertando de su pensamiento se encontró frente a Hoseok quien le esperaba para regresar al palacio luego de haber terminado con la lección de hoy.

—Su trabajo ha terminado, ye puede regresar… ¿quiere que pase a buscar al soldado esta noche?–Cuestionó Hoseok con cierta curiosidad

—Por supuesto, en cuanto se haga la hora tráelo al palacio

Hoseok asintió y ambos se dispusieron a partir, no sin antes echarle un vistazo a Taehyung quien estaba junto a sus compañeros charlando.

Taehyung también estaba atraído por la escena que el cielo les estaba otorgando en ese momento, su cuerpo estaba exhausto por los entrenamientos pesados de todos los días, sin embargo cuando miraba a ese cielo sentía paz y recordaba el porqué de su esfuerzo, entonces recuperaba toda fuerza y se disponía a seguir.

Junto a sus compañeros hacía fila en espera de que la ducha se desocupara para poder tomar un baño. Cuando los oficiales y superiores se habían marchado todos habían comenzado a murmurar respecto a la partida del rey y lo que esto implicaba.

— ¿Escucharon que el rey partió a la guerra está mañana? – Mencionó uno de los jóvenes

—Sí, sí, escuche que las cosas se están complicando en Daegu y alrededores por lo que el rey tuvo que ir a hacerle frente a la situación –

—Dicen que el rey es un experto en el combate cuerpo a cuerpo y por eso prefirió ir a combatir –

 —No seas ridículo, el rey se fue porque no hay más soldados disponibles… Es muy probable que tengamos que ir a combatir pronto –

—Eso no puede ser, el entrenamiento dura seis meses y apenas llevamos dos

—Por algo han intensificado nuestros entrenamientos ¿No lo crees?

Taehyung escuchaba atento la conversación sin decir palabra, estaba analizando la situación y las posturas de sus compañeros llegando a la conclusión de que era verdad, pronto ellos también tendrían que partir, por el otro lado veía que pesé al duro entrenamiento la mayoría de ellos no estaban listos para ir a una guerra además de ser bastante cobardes, incluso él llegaba a preguntarse si estaba listo para ir a una guerra real. Era verdad que la mayoría se había acostumbrado a los días de servicio donde al menos tenían comida y techo sin preocuparse por nada, pero ahora que estaban por ir a un combate real muchos temían y preferían ignorar la situación. Le costaba aceptarlo pero era así, sus compañeros incluyendo a los de habitación no eran la excepción. En cuanto al rey era muy probable que este muriera en combate, pese a lo bueno que este fuera estaba en desventaja y aunque Taehyung no estaba al tanto de la situación sabía sobre política y guerra, incluso solo con sentido común sabía que allá afuera la mitad de los ciudadanos estaba feliz pensando que su rey iba a salvarlos, mientras que la otra mitad sabía que la situación se estaba complicando y se les estaba saliendo de las manos por lo que aunque no quisiera desearle ese mal, el rey iba a morir y ellos partirían pronto.

Luego de tomar una ducha se dispuso a esperar en el lugar de siempre a que Hoseok llegara, se había sentado en el suelo observando el cielo nocturno que curiosamente esa noche estaba bastante despejado y estrellado. Su mente estaba divagando entre sus pensamientos cuando llegó Jungkook tomando un lugar junto a él.

— ¿En qué tanto piensas?– Cuestionó este sin mirarlo

—En muchas cosas… Ya sabes lo que dijeron hace un rato– Respondió Taehyung buscando su mirada

— ¿La partida del rey?– Volvió a cuestionar apartando la vista del cielo para mirar a Taehyung

—Si, además el que pronto partiremos también

— ¿tienes miedo a combatir?                       

Taehyung asintió suavemente

 — ¿Tú, no?

Jungkook estaba por responder cuando Hoseok hizo su aparición mirando seriamente a Taehyung.

—Su majestad el príncipe desea verlo– Murmuro una vez estuvo frente a ellos

Taehyung asintió suavemente con la cabeza y se puso de pie dispuesto a marcharse mientras Jungkook se quedó allí observando cómo se alejaban.

Hoseok tenso la mandíbula con ganas de reclamarle a Taehyung por tal descuido, sin embargo se contuvo para evitar cualquier escándalo y ofuscado dejo salir un “Cuidado, la próxima” al aire. Taehyung sabía perfectamente a que se refería y sin decir palabra volvió a asentir.

Una vez llegaron al lugar el joven príncipe les esperaba allí y como la primera vez Hoseok se había apartado mientras el heredero daba una espada a Taehyung y le preparaba para combatir. En esta ocasión en particular tenía ganas de desquitarse por todo lo malo que había vivido en ese día por lo que no dudo en ser el primero en atacar con su característica velocidad, por el contrario, como consecuencia de las palabras dichas por el mismo la noche anterior Taehyung se había tomado las cosas enserio y se había dispuesto a pelear contra él como lo haría con cualquier rival “dispuesto a matarlo”. Siendo así capaz de esquivar sus ataques y contraatacando con fuerza y confianza, siendo tanto el impacto que el mismo heredero se hallaba desorientado frente a los movimientos de Taehyung siendo pues lento con sus movimientos de respuesta pero lo suficiente veloces como para no dejarse arrinconar. Fue así como el combate se tornó serio y desde una esquina Hoseok se había hecho presente en caso de que tuviera que intervenir.

Las espadas de madera resonaban en un profundo eco con cada golpe sonando uno más fuerte que el anterior, cada uno dando lo mejor de sí para superar al otro, Yoongi había perdido velocidad frente a Taehyung sin embargo este carecía de la fuerza que él si tenía haciendo del combate digno de admirar.