El cielo se empieza a nublar tal y como dije, hay personas cuya sola presencia ilumina todo el lugar, los rayos empiezan a anunciar una tormenta, efectivamente la lluvia llena toda la calle, y mi negro cabello se empieza a mojar casi en cataratas, y mis botas se empiezan a inundar, por un momento las gotas dejan de inundar mi cabeza, alzo mi vista y observo a Benjá que me cubría la cabeza con su carpeta de dibujo, una mueca de desprecio se apodero de mi rostro, pero rápidamente desapareció al ver a una chica rubia cenizo, algo bajita, pero esbelta con unos grandes lentes de sol. Sí no fuera tan baja, pensaría que era Isbel, mi adorada hermana, se quitó los lentes un momento, dejándome presenciar su horrible maquillaje, sus ojos estaban rodeados de negro y gris, como si fuera un mapache, pero a diferencia de, el animal, se veía hermoso en su esquelético y fino rostro, era tan horrible su maquillaje que al tiempo era hermoso, se colocó lentamente los lentes de sol, y como si nada se fue.
Aparte bruscamente el cuaderno de dibujos de Benjá, puesto que lo que menos quería era que se dañaran, y más por mi culpa.
— Calma esas garras tigresa — Benjá se apartó de mi lado, con un susto fingido, yo solo seguía con la mirada en la chica, Benjá lo noto y sus expresivos ojos marrones se posaron en la chica -—¡Adiós Janette! — Grito sonriendo, y despidiéndose, la chica solo volteo y sonrió coquetamente.
— Espera... Tú, tu... ¿La conoces? – El solo esbozo una juguetona sonrisa de lado a lado.
— Claro, es una muy buena amiga, también está en buenas artes, solo que el maquillaje es lo suyo.
— Eso explica muchas cosas.
Ambos nos quedamos mirando esperando que uno rompiera a carcajadas, lo mire desafiante tratando de aguantar la risa que me estaba consumiendo, pero él y sus musarañas lo impidieron.
— Eso no es justo – Riñe.
— Todo se vale.
— Antes de que lo olvidé, ¿como esta tú mamá? ¿Ya conoció a su doncella de sedosa cabellera? — la causa del divorcio de los padres de Benjamín era que su madre era lésbica, corrección, es lésbica, sólo se caso con Robinns por obligación.
— ¡Si! — respondió animado — mi madre se casó hace 3 años con mí mamá, su nombre es Serány, es preciosa y cocina de maravilla ¿y que me cuentas tú?
— ¿Yo?
— ¿Como están Marisa y Michael? — trague saliva y mire la pisó, ¡Sabía que se me olvidaba algo!
— Bien, súper bien, de hecho deben estar revolcándose en sus tumbas.
— Espera... ¿Estan...muertos? — sólo asenti.
— ¡Pero que mas da! — mentiras ¡Te amó papá!
La lluvia empezó a ser más, y más fuerte, Benjá se quitó su chaqueta y me la puso a mí, ¿Acaso a los hombres no se les ocurre algo más? De mi bolso saque una bufanda a rayas blanca con negro, y se la coloque en su cuello, apenas se la coloque el hizo un gesto como si se estuviera ahogando, que en un minuto cambia por una sonrisa, ambos empezamos a correr hacia el estacionamiento, me quite la chaqueta tomando mi casco negro, me acerque a Benjá con la intensión de tomar mi bufanda, pero él ya me la había puesto, otro chico diría la típica frase: "Yo te llevo en mi auto" pero el día en que él diga eso, será el fin del mundo, o es necesario, pase mi mano por el asiento arrastrando en ella las gotas, me subí en la motocicleta y encendí el motor, que ya empezaba a llenarse de agua.
Emprendí mi camino a casa, y a decir verdad eso no me emocionaba mucho, pues Lía era más que machista, siempre con lo de: "Las chicas tienen que ser sumisas y delicadas", creo que nadie le conto que casi me parto una pierna, subiendo las escaleras.
Estaba cruzando una curva cuando notó que otra motocicleta viene en la misma dirección. Frenó en secó y él chico de al frente imita mí gesto.
— ¡Mí error! — grita él excusándose.
— ¡Dedcuida, yo estaba distraída!
— Bueno, bye, bye, chica.
— ¡Mí nombre no es chica! — le gritó cómica — ¡Así que adiós extrañó de moto embarrada! Al menos ya se que no te olvidaré y tendré mas cuidado.
— ¡Lo sé, lo sé! ¡Soy P.R.E.C.I.O.S.O! — grita en respuesta.
El continúa su caminó y yo el mío, al cabo de unos minutos llegue a mí destinó, suspire sacandome el cascó. Elain e Isaac estaban en el jardín, ambos con los implementó necesarios como para plantar una pequeña huerta.
— Veo que ya se animaron a marcar su territorio — Elain levanta la cabeza sobresaltada, en cambio Isaac solo sonríe mientras agita vigorosamente la manó en señal de saludo.