Capítulo 2 -

¿Quieren saber que pasó después de esas miradas? Nada, no sucedió nada. Matías me miro luego a los ojos y me preguntó de nuevo si quería ir al baile con él, le dije que sí, obviamente iré con él, nadie más me ha invitado de hecho. Regresamos a casa, donde mi madre nos esperaba con pizza y el típico pastel de cumpleaños, estoy agradecida pero… ¡No tienen sentido estas tradiciones!

-Pide un deseo –Dice mi madre tratando de no llorar. Mi deseo… diría la paz mundial pero muy cliché para este tipo de historias, así que solo pediré que mis días cambien, es todo. Cierro los ojos y apago las velas, a mi mamá se le salen las lagrimas porque su… -Mi hija ya es mayor de edad, ¡qué emoción! –Grita mi madre.

Matías aplaude sonriente –Felicidades, oficialmente eres una adulta en cuerpo de niña. –Ríe y me abraza. Tiene razón parezco de 16 años, mido 1,58 soy una enana. Una enana muy sexy, es decir, estoy más guapa que todas las actrices de Hollywood unidas. Mentira. –Una niña muy preciosa –Afirma el galán sonriente. Oh, my God.

-Gracias, de verdad, es lo mejor – Digo tomando un pedazo de pastel, debo admitir que se ve increíble. –Esta delicioso –Añadí sonriendo. Y bueno como en todos los cumpleaños número 18 o cualquier número, un familiar se embriaga y esa es mi madre presente. Matías y yo dejamos a mi mamá y su novio divertirse mientras que nosotros subíamos al techo de mi casa a ver las estrellas que siempre se ven más intensas el día de cumpleaños, o eso decía mi papá. Están bellísimas esta noche, estoy pensando en estudiar Astro física en vez de literatura pero, sinceramente, no me gusta la matemáticas y sé perfectamente que eso tiene hasta para regalar, mejor me quedo con lo sencillo digo yo que es sencillo.

Las estrellas, al igual que la luna, yo las represento como compuestos vitales para el ser humano, no porque nos da luz sino porque nos hace ver que no estamos solos, no somos los únicos del universo. Pueden existir personas igual a nosotros que también miran sus cielos y se hacen esta pregunta, ¿Somos los únicos?, ¿Esto es todo lo que tenemos?, ¿Hay otras vidas detrás de todas estas estrellas? Solo vemos lo superficial y no vemos el alma tan extensa del universo.

-Estas muy callada pequeña –Interrumpen mis pensamientos. Lo miro detenidamente y le sonrío, como esa típica pausas innecesarias de las películas, bueno.

-¿quieres que hable? – pregunto acomodándome en mi lugar para que él quede frente a mí. – ¿Qué quieres saber?, ¿De qué quieres hablar? –Lo miro fijamente que parece que soy una acosadora, aun no he llegado a ese nivel.

-Hablemos de lo que piensas cada vez que te quedas callada –Propone tentativamente. Esto se pondrá bueno, si se me escapa que él me gusta he fracasado.

-Prepárate para saber qué es lo que piensa Valentina Margarita cada vez que no quiere socializar – Índico seriamente. Él solo me mira esperando a que diga el primer pensamiento. –bien, pienso en cómo me gustan las estrellas, quisiera estudiar astro física pero sé que lleva mucha matemática y sabes que no me gustan – Se ríe imaginándose ese futuro. –Lo sé yo tampoco me veo en el. Otra cosa que pienso es en mi papá, también lo sabes, a veces me siento muy mal porque lo recuerdo, dirás que estoy enfrascada pero es que…- Me detengo, suspiro para seguir –Es difícil, me gusta pensar que soy fuerte para él, para que este orgulloso.

-Valentina, todos estamos orgullosos de ti, no te presiones. Además entiendo que la perdida de tu papá fue muy dura, a todos nos dolió –Toma mi mano y me mira. Malditas miradas, son puras batallas de miradas. –Estaré para ti, estoy para ti y lo sabes – Afirma extendiendo sus brazos para abrazarme pero yo me niego. Lo siento, me hará llorar y no quiero que me vea llorar.

-No quiero llorar, no quiero que me veas llorar, lo siento –Confieso bajando sus brazos y reponiéndome, me había puesto sentimental. –Como decía, pienso que eres un chico increíble y en lo mucho que me encantaría que me besaras en este momento aunque yo lo haría pero quiero que tu lo hagas para que sea más especial, porque si lo hago yo vas a pensar que soy muy atrevida y voy a sufrir un terrible rechazo. - Obviamente eso no fue lo que dije, solo me quede mirándolo con una sonrisa muy falsa pero ya quedó claro que eso es lo que quiero que suceda, estoy muy desesperada. –Bueno Matías, otra cosa que pienso es que eres muy cerrado, desde que te conocí no has dicho nada acerca de tu vida, claro no quiero ser entrometida pero al menos quisiera saber un poco. –protesto ligeramente, para no parecer exigente. –Por favor. –Añado un poco después.

Suspira bajando la mirada –Ay Valentina, ¿En serio quieres saber qué es lo que pienso? Bueno, pienso que quiero que sea mi novia. –No, no lo dijo. Solo dijo esto -¿En serio quieres saber la vida de este servidor? –Preguntó tronando sus dedos, odio ese sonido pero lo hace ver malo y me encanta. Yo asiento muy decida, en serio quiero saber, soy muy entrometida pero debo saber de quién me estoy enamorando. –Bien, mis padres están a punto de divorciarse aunque no lo creo, ellos se aman mucho, son mi inspiración, quisiera estar a la altura de mi papá para tomar su empresa, tengo miedo a fracasar. Me gusta ser misterioso por eso no comparto mucho mis pensamientos, por ejemplo pienso que eres una persona mis asocial que debería de relajarse un poco y no centrarte en el futuro, debes vivir el presente, pero me gusta que sea atrevida con algunas cosas, que des tu opinión firmemente, que seas sentimental y me encanta la manera de cómo ves las cosas que te rodean. Y tengo una debilidad, sufro de una depresión muy leve, me he controlado a lo que pasa el tiempo y, muestro ser duro para ser duro conmigo mismo. –Confiesa sin miedo, sonríe y se levanta –Ese es el 10% de mi vida, a medida que pase el tiempo sabrás el resto –me ayuda a levantarme, yo sigo perpleja de todo lo que me dijo, aunque no entendí lo último de ser duro, es raro que Matías se abra así conmigo a pesar de que me haya dicho el 10%. Yo solo agradecí que me confesara y lo abracé, luego bajamos a ver a mi madre y la verdad no me sorprende, se fue con su novio, otra vez. Me ayudó a limpiar y al finalizar se fue, me quede sola pensando y analizando lo que Matías me dijo. Estoy sorprendida, Matías es una caja fuerte y es interesante, es como que tengo que escuchar bien los engranajes para abrir la caja y descubrir todo. En fin, me di un baño para calmar mi mente porque si no me deja dormir en paz, busque mi libreta para describir mi día y luego irme a dormir.