1. Ambar.

Humanos.

Que criaturas tan crueles y desagradable.

Si por mi fiera no me acercaria a ellos por nada en el mundo.

Pero lo que voy a hacer no es por mi, sino por el.

Por Peter mi amor de infancia, a quien los humanos mataron sin piedad.

Me mojo la cara y me miro en el espejo.

- Lo haces por el, no lo olvides.

Me seco el rostro con la toalla y salgo del baño hacia el comedor.

- Buenos dias hija. -Saludo a mi madre con un beso en la mejilla y me sirvo un vaso con sangre.

Lo tomo y me limpio la boca.

Me dirijo a la puerta pero antes de irme la voz de mi madre me detiene.

- ¿Estas segura de hacer esto hija? -Me giro para ver a mi Madre.

- Jamas estuve mas segura de algo en mi vida.

- Porque no te olvidas de lo que paso y seguis adelante hija, la venganza no te va a ser sentir mejor.

- Me haga o no sentir mejor es otro asunto, pero yo no voy a dejar que la persona que hizo eso viva su vida como si nunca hubiera pasado nada.

Salgo de la casa dando un portazo.

Nada de lo que me digan me va a ser cambiar de opinion.

(...)

Paso por el pasillo de mi nueva escuela, la cual esta repleta de humanos.

No soporto ver sus desagradable rostros.

Si fuera por mi ya los hubiera matado a todos, pero tengo que controlarme no puedo dejar que me descubran y terminar arruinando mi plan.

Solo me inscribi en esta escuela con un solo objetivo, vengarme de Drake Bell, el chico que con solo 10 años matado al amor de mi vida.

Lo tengo que encontrar, no lo voy a encontrar y luego lo voy a matar con mis propias manos.

Pero voy a usar su mismo juego, voy a acercarme a el y una vez que confie en mi, ahi va a ser cuando acabe con el.

Empiezo a oler en todas direcciones hasta allar el olor caracteriztico de Drake.

Vainilla.

Ese es el olor de Drake.

Me guio por el olor hasta llegar a la cafeteria de la escuela donde logro ver a Drake a un par de metros de mi.

Respiro ondo.

Trato de calmarme, pero es inutil mis impulsos terminan ganando.

Con todas mis fuerzas grito.

- ¡Drake!

Corro hacia el y me lanzo encima suyo haciendo que se caiga de su asiento.

- Te voy a matar.