¿Han sentido ese nudo en el estómago y en pecho de cuando pierden algo importante o hacen algo mal?
Como cuando te roban tu celular o lo pierdes. Algo así siento ahora, pero tres veces peor. ¿Han sentido unas terribles ganas de llorar, pero no pueden hacerlo? Así estoy yo. A punto de llorar, con mi hermano al lado. Joder. No puedo permitirme llorar por él. No puedo volver a llorar por ningún hombre.
¿Por qué quiero llorar? A fin de cuentas, no somos nada. Él puede hacer lo que quiera con su vida.
Le sonrío a Mateo y seguimos caminando hasta llegar a el comedor.
—Buenos días — digo con la mejor sonrisa que puedo dar en este momento.
—Buenos días — responden todos.
—¿Estas...? — habla Thomas y lo interrumpo.
—Sí, solo tengo sueño, no es nada — me mira con el ceño fruncido y asiente sin creerme ni una palabra.
Suena mi celular y todos me miran interrogantes.
—Chismosos — río — Es mi novio — digo sarcástica y ruedo los ojos por sus caras — Es mamá — contesto.
—Hola, princesa.
—Hola, Mami.
—¿Estas con tus hermanos?
—Sí, te pongo en ella voz para que te escuchen — la pongo —Listo.
—Chicos y princesa — dice mi papá.
—Pincisi— lo arremeda Thomas.
—Celoso — me río.
—Acabamos de comprar una casa hermosa en Cancún. — todos nos miramos extrañados — Es para las vacaciones, calmen sus caras, los conozco — reímos — Es muy grande y esta hermosa, está en medio del mar y tiene un tobogán ¿Les apetece venir en las vacaciones?
—¡Siiiii! — gritamos al unísono. Todos siempre hemos amado el mar.
—Okey— ríe — Les va a encantar, lo juro.
—No lo dudo— dice Tyler.
—Bueno, nos tenemos que ir, los queremos chicos, te queremos princesa.
—Adiós — nos despedimos.
—Ti qiirimis princisi — lo arremeda Mateo y rueda los ojos.
—¿Celosos porque soy la favorita?
—Cállate, presumida — dice Thomas.
—El — Tyler señala a Thomas — Está celoso porque le quitaste el puesto de "Menor de los Miller."
—No es mi culpa — sonrío.
—Sí, sí, que les den para que tengan en que entretenerse en vez de molestarme — dice Thomas y ríe.
—¿Cómo quieres que me den si ustedes me espantan cada posible ligue? — digo y ellos ríen, menos Liam.
—Nadie te merece — dice Tyler y los demás asienten.
—Lo sé, soy mucho para toda esa bola de rabiosos — digo en broma con voz de niña presumida.
—Bienvenida, señorita Miller — bromea Mateo.
—Jodete — río.
—Bienvenida, Emma — dice Thomas y todos reímos.
Din dong
—¿Esperan a alguien? — pregunto.
—Oh, sí, viene un amigo de la Uni — dice Tyler — Me trae unos apuntes y a cambio lo llevamos.
—Por aquí — se escucha la voz de Sara — Tyler, te buscan.
Entra un chico alto, Rubio, ojos cafés claros, bastante musculoso. ¿Dónde lo vi antes?
Piensa, piensa... Mierda. Me atraganto con un cacho de hot cake y Thomas me da palmadas en la espalda.
¿De verdad universo? ¿El? ¡Por favor que no me recuerde!
—Gracias Sara, Noah ¿Quieres desayunar?
—Bueno — sonríe y me mira.
—Ellos son mis hermanos, Mateo y Thomas, él es Liam el mejor amigo de Mateo y ella es...
—Emma — dice el chico, que ahora sé que se llama Noah.
Mierda. Si me recordó.
—¿Se conocen? — pregunta Liam, hablando por primera vez.
—Algo así... — se sonrojo de vergüenza.
Flashback
—Y entonces ¡Me caí de cara! — grita Dani enfadada porque todo su café se calló en su blusa.
—¿Cómo te pudiste caer? — pregunto tomando agua.
—Es que mira... Yo iba caminando, normal, como todas las personas, me tropecé y como había mucha gente ahí me quedé tirada y grite "Es que el piso se siente solo" — me reí tanto que saque el agua por la nariz salpicando el chico que tenía al frente. Mierda.
—Oh, lo... Lo siento... Disculpa yo...
—No te preocupes — ríe — Me gusta que chicas lindas me escupan.
Mierda
—Yo...
—No te conviene coquetear con ella, sus hermanos te mataran — dice Dani.
—Perdón... — me disculpo de nuevo.
—Te perdono si me das tu número.
—No puedo por cuestiones de seguridad.
—¿Tu nombre?
—Emma.
—Bonito nombre.
—Em, hay que irnos, llegaremos tarde.
—Sí, adiós... — dejo la frase al aire, esperando su nombre.
—Lo sabrás cuando nos volvamos a ver.
Fin del flashback
—¿De dónde se conocen? — pregunta Tyler, frunciendo el ceño.
—Ahora entiendo a tu amiga— me dice y sonríe.
—Creí que nunca te volvería a ver... el destino tiene algo contra mi hoy.
—Ahora ya sabes mi nombre.
—Si... Noah, bonito nombre — sonrío y tomo agua.
—Nadie cuente chistes, los puede salpicar — dice Noah. Trago el agua y me empiezo a reír nerviosa.
—¿Eh? — dice Mateo.
—Joder... Tan grande que es New York y me vengo a encontrar a las personas que menos quiero.
— ¿No querías volver a verme? — ríe — Yo a ti si, sabía que algún día pasaría.
—¿Puedes dejar de coquetear con mi hermana? Gracias — dice Tyler.
—Ushhh, tu amiga tenía mucha razón.
—Déjalo, es que está solo y no quiere ver feliz a su hermanita. — bromeo.
— ¿Ah? ¿Skiusmi? — dice Tyler fingiendo indignación.
— Liam, ¿Cuándo traes a tu chica? — pregunta Mateo.
Auch
—No creo que quiera venir — dice Liam, nervioso.
—Puede que se lleve bien con Emma — insiste Mateo. Joder, ya cállate.
—Hoy voy a estar con Dani — miento — Tengo que contarle a quien me acabo de encontrar. Joder, que vergüenza, de nuevo, perdón.