Dos meses desde que decidimos intentar otra vez por salvar nuestro matrimonio.
Era un día como cualquier otro, solo que yo me encuentro en el baño de mi habitación sumamente asustada y nerviosa, Isabela ansiosa me espera del otro lado. Veo al lavamos y la respuesta aparece, ahogó un grito cuando una raya aparece en la prueba de embarazo.
Estoy embarazada de Kai.
—¡Hermana! ¿Todo bien? —. Sentía miedo, mucho miedo ya que él no quiere ser papá.
Abro la puerta saliendo, Isabela estaba sentada en mi cama viendo con preocupación a mi dirección. Sentía las lágrimas correr por mis mejillas a medida que voy avanzando, caigo a sus pies llorando como nunca antes, sollozando que ya todo había acabado y que esto él no me lo va a perdonar jamás. Kai creerá que busqué embarazarme a posta por no perderlo, si tan solo supiera que la última vez que estuvimos juntos ninguno usó protección.
—Isabela estoy embarazada de Kai. —. Mi hermana se ahogó con sus palabras.
—Tremendo imbécil por padre tendrá mi sobrino
Ella ríe feliz felicitándome mientras que por dentro me encuentro temerosa, él no quiere ser papá y yo lo estaba obligando en pocas palabras.
Ella no entiende la gravedad del asunto y de lo que este embarazo desencadenará. O Kai lo acepta y acepta el hecho de que será papá o termina por dejarme, de todo esto lo único en lo que estoy segura es que no interrumpiré mi embarazo ni lo abortare, quiero ser mamá, era mi más grande sueño en el mundo y se estaba cumpliendo y junto al amor de mi vida.
Isabela se va de mi casa a la media hora en compañía de su novio, le he pedido el favor de no decirle a nadie sobre que estoy embarazada ya que quería primero comentarle a Kai y ver su reacción, dependiendo de lo que él haga y diga decidiré mi futuro y el de mi bebé.
He pasado toda la tarde ordenando nuestra habitación y he mandado a la servidumbre preparar el comedor de la casa de una forma preciosa ya que debía comentarle algo a mi marido, todos a eso de las cinco pusieron mano a la obra. Yo terminaba de subir un vestido de los que a Kai le encanta que yo use y dejé mi cabello al aire, media hora después él aparece
—¡Cariño!
Al verme bajar las escaleras abraza mi cuerpo dándome vueltas, robándome risas.
—Creí que vendrías tarde hoy. —. Le comenté.
—Todo salió bien en la reunión con la editorial tanto que no necesitaba quedarme más tiempo. —. Él pellizca con ternura mi mentón — ¿Y eso que te pusiste hermosa? ¿A dónde vas?
Meneo mi cabeza negando y lo tomo de la mano hasta el comedor
—A cenar contigo.
Kai encantado aceptar la cena y nos acercamos a la mesa para ocupar nuestros asientos e iniciar con nuestra cena.
•~~~
Ella lo estaba intentando y lo aprecio mucho, es la esposa que yo en un principio tenía y me encanta saber que ha regresado.
Aurora se encuentra hermosa con ese vestido aunque no paso por alto que su barriga se encuentra un poco, no mucho, hinchada. Quizás y sea mi imaginación, o solo estoy viendo todo eso en mi cabeza.
Personalmente está ha sido una semana muy dura para mí en la editorial ya que he estado con unos síntomas muy raros, de vómitos constantes a incesantes dolores de cabeza como de espalda, entiendo que ya la edad me esté cobrando factura pero no pensé que sería tan pronto.
Y ahora que pruebo parte de la comida vuelvo a sentir la sensación de querer vomitar, las náuseas se aglomeran en mi garganta exigiendo salir pero me niego, luego mi esposa creerá que no me gustó nada de lo que mandó a preparar.
La observaba de reojo y estaba inquieta, cada segundo veía a la puerta que da a la cocina, no me mantenía la mirada y eso me extraña bastante, se que a ella le encanta mirarme aún cuando cree que no me doy cuenta. Lo dejo pasar y a lo mejor solo está un poco cansada y desea dormir.
—Kai.
—Dime cariño. —. Sujeto mi copa de vino entre mis manos para darle un sorbo.
—¿Todavía estás en contra de tener hijos?
Es egoísta de mi parte prohibirle eso a Aurora pero era lo que yo exigía a una mujer si deseaba estar conmigo y ella lo aceptó aún cuando le repetí que nunca cambiaría de opinión.
Yo antes de estar con Aurora o de alguien menos conocerla tenía una pareja, ella yo la amaba mucho, tanto que ahora me avergüenzo de eso. Esa individuo quedó embarazada de mí y nunca me lo reveló hasta que abortó, mató a mi hijo antes de decirme.
Y son absurdas mis opiniones pero luego de ese incidente dije que no quería más hijos más sufrimiento, me cerré a las posibilidades de tener otro y así será siempre.
—Sabes lo que pienso de eso. —. Yo estaba tenso ahí sentado, no se porqué quiere hablar de esto.
—Creí que habías cambiado de parecer, te vi muy dulzón con la hija de tu amigo.
Oh, la hija de Dave..
Es imposible para mí ignorar a un bebé cuando se acercan, así que probablemente Aurora me haya visto sostenerla en mis brazos.
—Es la hija de mi amigo ni modo que la trate mal.
—Entiendo… —. Murmura en un tono de voz relativamente bajo.
Lo cual me preocupa, algo le está pasando a Aurora.
—¿Qué tienes? —. Ella niega y yo bufo, la conozco como la palma de mi mano y se que le está pasando algo.— Aurora…
—De verdad —. Alza su mirada y tenía sus lindos ojos grises llorosos.
—¿Entonces por qué parece que quieres llorar? Dime si te hicieron algo.
—Kai.
—Aurora. —. Repliqué firme y ella suspiró profundamente deslizando su mirada a otro lado.
Ella al parecer tenía un debate mental ya que no me miraba sino que sollozaba en silencio y fue lo que más me preocupó, ella nunca se comporta de este modo a posta.
—Entre más lo ocultes más rápido lo averiguaré. —. Sea lo que sea que me esté ocultando lo averiguaré y ella lo sabe, sabe que soy capaz de todo por saber lo que atormenta su cabecita.
—Estoy embarazada. —. Soltó abruptamente.
Parpadeo varias veces asimilando al menos un poco de lo que confesó pero… no puedo, joder no podía con esto que dijo.
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Editado: 26.03.2024