Youngblood | Jjk & Knj

Capítulo I

 

Esa noche RM había subido al avión con la intención de cerrar sus viajes de gira y por fin poder descansar en su país natal. Ese mismo día, pero de mañana al otro lado del mundo Jungkook se había despertado con emoción al ver aquel tweet en el que se informaba que RM regresaba a Corea y que por el horario de llegada podría ir al aeropuerto a verlo.

Esa mañana Jungkook llego temprano a la universidad, siendo recibido por un salón casi vacío a excepción de tres compañeros y sus dos mejores amigos que parecían distraídos en sus respectivos celulares. Hoseok fue el primero en levantar la mirada cuando Jungkook se acercó a sus asientos.

—Ey, ey buenos días ¿a qué se debe tanta emoción?

Jungkook no había pronunciado una palabra desde que había entrado, pero traía consigo una enorme sonrisa que lo delataba, sin contar esa aura eufórica que simplemente irradiaba.

—¡Es hoy! —Jungkook termino por exclamar liberando toda su emoción en aquella frase.   

—¿Qué es hoy? ¿por qué tanto entusiasmo? —Yoongi hablo por fin despegando sus ojos de la pantalla de su celular.

—RM regresa a Corea después de su gira. —La voz de Jungkook seguía derrochando euforia mientras que el aire de sus amigos paso a desinterés y hasta una pizca de decepción.

—Ah… eso. —Yoongi se limitó a decir, mientras que Hoseok a penas dejo salir un débil sonido parecido a un “oh”.

—Si, eso. —Jungkook hablo con obviedad esperando una mejor reacción.

—¿y que tiene eso de importante? —Cuestiono Yoongi sin el mínimo interés, volviendo la mirada a la pantalla de su celular.

—¿No es obvio? — Jungkook hizo una pausa esperando que alguno dijera algo, pero en cuanto paso un segundo término por completar la idea. —Iré a verlo.

—No vayas. —Yoongi levanto el rostro y lo miró fijamente, su voz era de completa desaprobación.

—Claro que iré, pero no quiero ir solo… ¿me acompañan? —Jungkook parecía ignorar la desaprobación de Yoongi, como si esperara que este cambiara de opinión de pronto ante su propia actitud.

—No puedo. Y si pudiera no deberíamos ir. —Yoongi busco la mirada de Hoseok quien había permanecido en silencio limitándose a contemplar la conversación. —Además, que caso tiene, si ni siquiera te vera.

Aquella última frase había sido escupida con más desprecio que la anterior, cosa que preocupo un poco a Hoseok quien rápidamente se levantó del asiento y tomo a Jungkook del hombro, mirando seriamente a Yoongi en un reproche.

—No te preocupes, yo te acompaño. —Sonrió de manera dulce apaciguando el ambiente y logrando que Jungkook sonriera también.

—Gracias, Hobi. —Jungkook se acercó lo suficiente para darle un abrazo de medio lado separándose casi al instante.

Yoongi soltó un refunfuño en tono bajo acompañado por una mueca y volvió a su teléfono.

—No hay problema ¿a qué hora será? —Hoseok volvió a tomar asiento.

—A las siete y media, aún tenemos tiempo, pero el aeropuerto está algo lejos así que debemos salir tan pronto acaben las clases.

Tan pronto Jungkook culmino la frase la señora Kang hizo presencia en el salón y todos guardaron silencio acomodándose en sus lugares. Ese día en particular Jungkook veía cuatro horas de clase, las dos primeras eran de clase teórica, Historia de la música y una clase práctica de dos horas de teclado. Luego sería la hora del almuerzo y debía correr a buscar el autobús que le llevara al aeropuerto. Jungkook comenzó sus estudios musicales hace dos años, gracias a una beca que le hizo mudarse para estudiar en la capital en la universidad de Seúl.  Con su trabajo de medio tiempo en una floristería de Gamnan paga un pequeño departamento y paga las cosas adicionales de la carrera.

Antes de mudarse a Seúl Jungkook ya era fan de RM, pues la primera vez que escucho una de sus canciones quedó fascinado con la forma en que el rapero podía transmitir tantas cosas con las que podía identificarse, además de eso, muchas de sus canciones hablan de un sentimiento de constante soledad y desentendimiento con la realidad, dos cosas que a Jungkook le parecían curiosas ya que RM era un misterio, nadie conocía su nombre real o nada sobre su vida privada pese a sus años de carrera.

Fue quizás gracias a RM que Jungkook decidió dedicarse a la música y no a otras cosas como el bádminton o una carrera más formal pues descubrió que la música podía ser más efectiva para comunicar y expresar que cualquier otra cosa y el en especial quería poder expresarse de manera más abierta. Ahora se esforzaba por mejorar cada día y llegar a convertirse en alguien como RM.

Esa mañana es particular la euforia de la noticia se había convertido en energía que Jungkook uso en sus cuatro horas de clase, participando y preguntando en su clase de historia, mientras que en la lección de teclado pudo tocar la partitura más de tres veces sin equivocarse al realizar las variaciones, cosa que sorprendió hasta a Yoongi quien había ido a la casa de Jungkook varias tardes para ayudarlo a practicar debido a lo difícil que se le había hecho aprender a tocarlo.

Cuando la hora del almuerzo llego, Jungkook agarro su mochila y de jalón arrastro a Hoseok consigo fuera del salón, deteniéndose en el umbral de la puerta donde por fin se despidieron de su amigo.

—Yoongi ¡Nos vemos! —Exclamo Jungkook antes de terminar de desaparecer por el pasillo arrastrando a Hoseok con él. —¡Adiós! —Fue todo lo que Hoseok pudo decir desde el pasillo.

Yoongi se limitó a verlos desaparecer antes de volverse a recoger sus cosas.

Luego de salir de la universidad Jungkook ya había soltado a Hoseok y por el contrario mantenía su mirada en la pantalla del celular mientras caminaba casi sin ver, Hoseok lo miraba con curiosidad y al mismo tiempo pendiente de que este no se callera por no mirar por donde iba.

—Oye ¿no deberías mirar por donde andas? —Dijo Hoseok deteniendo a Jungkook al tomarlo del brazo.



#948 en Fanfic
#3577 en Fantasía
#1512 en Personajes sobrenaturales

En el texto hay: vampiros, licantropos, bts

Editado: 11.07.2024

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.