¿La leíste?
¡Si te gustan las historias de alphas, hombres lobos , esta historia es para ti!
—¡Eres estupida!, ¿Ya quieres otra paliza?
—¡Y-o.o-h, perdóneme!
—Sabes, no te termino de matar, porque ni siquiera mereces que ensucie mis manos con tu apestosa sangre.No sé porque, pero siempre me dolían sus palabras y el odio tan profundo que veía en sus ojos.
Sentí como una lágrima rodaba por mi mejilla, no pude evitar mirar sus ojos furtivamente.
A pesar de tener el aspecto de un dios griego,con su pelo negro azabache, sus ojos verdes, igual que los míos y un cuerpo majestuoso, como el de todos los alfas, tenía 120 años, aunque aparentaba de unos 30.
A pesar de toda esa belleza, en su corazón había un odio y resentimiento profundo, destinado a mi persona.
Todos dicen que un lobo al perder a su mate, se sumerge en una profunda oscuridad y que muchos terminan en los peores casos muertos.
El alpha Eddison no había muerto, pero sí su nobleza, y si alguna vez la tuvo, falleció junto con su luna y su hija. Ojalá algún día escapara de él, ojalá un día terminara mi castigo.
0 comentarios
Es necesario iniciar la sesión en su cuenta para poder dejar un comentario
IngresarEliminar comentario
¿Está seguro de que desea eliminar el comentario?
Eliminar CancelarEl comentario se eliminará de forma permanente.
Bloqueo de comentarios
¿Realmente quiere prohibir a comentar?
Prohibir Cancelar