Soy una escritora de 24 años, casi 25 y por ello quizás me tocó vivir mi adolescencia y mi niñez en una época en la que leer era tildado de "nerd" Hoy en día pienso que es un poco más sencillo, tengo vecinas jóvenes, de entre 15 y 16 años, y leen sin problemas y sin ese estigma que parecía perseguirnos en una época donde si no conocías al actor o cantante de turno ya eras rara.
¿A dónde quiero llegar con esto? A que si leías ya eras raro, pero si escribías. Oh si escribas. En mi época de primaria, entre los 6 y los 11 años, teníamos en cada curso o grado escolar tres proyectos que presentar, cada proyecto era escogido al inicio del trimestre o lapso y este era el tema sobre el que se estudiaba una vez por semana, sobre el que investigabas, realizabas exposiciones y más. Sobre estos temas también debías escribir un cuento.
Aquello era mi bendición y también mi maldición. Me encantaba escribir, aun lo amo, pero en aquella época, con 7 u 8 años me mandaba no cuentos de una página como mis amigos, sino cuentos de hasta 10 y 20 hojas completamente ilustrados. Todos los cuentos iban a parar a una carpeta personal que presentabas a fin de año.
¿El gran problema? Terminaba con una carpeta realmente gruesa que ninguna persona deseaba leer, todos elogiaban y preferían los cuentos sosos, vacíos y cortos de mis amigos antes que los míos. Y ojo, no digo que fueran malos por cortos, había muchos que eran muy buenos, sino que uno, con esa edad, notaba que el rechazo venía por lo extenso de la historia. Los chicos de secundaria y preparatoria que se pasaban por el lugar eran mucho más crueles y se burlaban.
Esto me marcó mucho durante mi juventud, encontré como escribir en internet y empecé con los fanfics a los 12 años, toda una liberación porque alguien siempre iba a leerte y a comentar. Pero, no me atreví a publicar historias originales hasta ahora, no por falta de ideas, sino por ese trauma intrínseco que tenía al rechazo.
Mi época como escritora de fanfics me hizo madurar mucho y me abrió la mente para enfrentar mejor todos los pros y contras de escribir en la red. Y aunque no he desempolvado algunas historias que escribir en mis cuadernos de secundaria, por fin puedo encontrarme en un mundo donde leer y escribir empieza a ser valorado y no ridiculizado.
¿Les ocurrió algo similar? ¿O no? Me encantaría conocer sus anécdotas.
Sí, quiero
9 comentarios
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IngresarYo tengo 18 y yo sí fui tildada de nerd en mi niñez y bueno ahora igual, en la primaria y secundaria leía mucho, en los recreos, en las formaciones de la mañana e incluso al subir las gradas al subir a clase. No fue duro para mí porque mi mamá y papá siempre me han apoyado y gracias a ellos he llegado a tener una colección de casi 350 libros.
Creo que con el tiempo hay cosas que cambian, pero depende mucho del ambiente en el que te encuentras y de las cosas que lees, ahora vemos muchísimas lectoras y lectores que van transmitiendo eso a sus compañeros pero otros que aún sufren de acoso y malos ratos por leer mucho...
Saludos! y me encantó tu blog y el tema que tratas es muy interesante!
Adhara Stanley, Saludos, gracias por compartir tu historia. Si, tienes razón, aun hoy pueden presentarse esos casos. Es necesario siempre el apoyo de alguien de confianza :)
Hola.
En mi caso comparto tu misma edad.
Es cierto lo que dices.
En mis días escolares leía, poco pero lo hacia y sentía la marcada línea de no compartir el gusto con los demás.
No había nadie con quién hablar de libros. Así que me quedé con ese tesoro yo solita. Jiji.
A la hora de escribir, pues admito que me era fácil desenvolverme con las palabras a la hora de redactar trabajos de cualquier materia.
Y escribía pequeños relatos para ocasiones especiales. Cómo en la universidad. O cómo cuando me cambié de trabajo. Les escribí a mis compañeros un escrito que relataba el día a día de ese ajetrado empleo, incluyendo sus manías, chistes gastados, frases y regaños de los supervisores. Al final todos lloraban al leerlo. Jaja.
Ahora es distinta la perspectiva que hay de las personas que leen y escriben.
Sin embargo, únicamente comparto mi pasión por la escritura con mi hermano y dos amigos. Por qué o no se da el motivo para hablar de ello o se que me dirán que es pérdida de tiempo.
Pero sin importar nada. Hay que tener claro. Si queremos escribir o leer por que eso nos llena y nos hace felices. Pues a ello.
^_^ Un saludo.
GhostFicker, Con mucho gusto.
^_^ Un saludo.
¡Hola! Yo solo tengo un año más que tú, por lo que más o menos ambas hemos vivido esa época que comentas. En mi caso siempre he ido a mi bola, cuando era una niña me encargaba de entretener a mi abuelo con mis historias y, si podía, escribía cosas para el colegio (ahora mismo, si te soy sincera, no recuerdo si tuve que hacer algo así como entrega o no). Sin embargo, hasta los 13 años (estando ya en secundaria) fue cuando comencé a escribir. Nunca he dicho a nadie que lo hago, no por vergüenza ni por miedo al que dirán, sino porque casi nunca ha surgido el tema y es algo que, a día de hoy, saben pocas personas de las que conozco. Sin embargo, en ningún momento me vi cohibida para compartir mis escritos en la red (he estado en foros y páginas como esta desde los 16 años, si no recuerdo mal).
¿Mi consejo? Que si te gusta escribir, lo hagas y punto. Tengas la edad que tengas y tengas el entorno que tengas. Con el tiempo, todo lo bueno acaba llegando ;)
R. Crespo, Si, hay que escribir porque nos gusta, porque nos llena y porque a la final eso somos y la vida es muy corta para vivirla como quieren los demás.
Me ha encantado tu experiencia, gracias por compartirla y gracias por el consejo, empecé a vivir según esa premisa hace ya un tiempo, pero nunca está de más recordarla :)
Si me paso algo parecido, solo que yo no tuve el valor de publicar ni un fanfic cuando por fin encontre un lugar para escribir y que me lean, aunque las ideas locas rondando en mi cabeza nunca paraban y solo aumentaban junto con el miedo al rechazo, no publique nada de nada.
Aun que en la primaria recuerdo que me gustaba escribir (leer no tanto) y llenaba cuadernos, hasta escribi un fanfic sobre Dragon Ball Z (era y sigo siendo muy friki) y hasta realizaba fan-arts sobre uno que otro libro o cuento que me leian o me animaba a leer.
La vida cambia constantemente y nosotros junto a ella, supongo que es lo maravillo de estar vivos. Al menos me animaste a no dejar que mis inseguridades destruyan mis sueños con ese recuerdo que contaste.
CJ Doyle, Esperaré tus comentarios ^^ por ahora solo tengo subido uno que voy actualizando semanalmente ^^
Te entiendo, la primaria a la que asistí funcionaba diferente, de ves en cuando algún maestro te pedía que escribieras algún cuento sobre lo que estudiábamos, o que simplemente escribieras algo, esos momentos eran mágicos para mi, dicen que cada artista tiene su trauma, el mío, mi familia, la escritura era un escape y hacerlo sabiendo que alguien lo leería era aun mejor, pero a la hora de entregarlo los maestros me miraban raro, mis cuantos variaban en tamaño pero nunca menos de 5 hojas, algunas veces también escribía poesía, una de mis maestras me dijo, textual "estas son palabras muy fuertes para alguien de tu edad" aclaro que tenia 7/8 años, esta profesora fue la única que me apoyo para escribir, pero a la hora de pedirme que hiciera algo siempre me limitaba, no mas de dos hojas decía, yo pensaba con todas las cosas que tengo que decir y todas las historias que puedo crear dos hojas no me bastan, hoy con casi 30 años, aun no me bastan, no creo que haya cambiando mucho, lo que pasa es que uno busca rodearse de personas afines.
Jesse, Si, cuando te rodeas de personas que te entienden todo mejora. Y si, no entiendo cual es el afán de buscar limitar lo que puedes o no escribir. Claro, es un buen ejercicio como escritor para pulir la técnica o encontrar la manera de ser más eficiente en algunos sentidos, pero nunca, debemos limitar la creatividad
Hola GhostFicker,
El conflicto yace en ti misma y no en tu alrededor. Tengo una edad similar a la tuya y no poseo este tipo de barreras a las que te refieres, y es porque cada persona es distinta a la otra. Cuando tenía 12 años, me maravillaba leyendo las historias de otras personas, y en realidad, me inculcaron la lectura en la primaria, así que yo y mis compañeros crecimos sin prejuicios. Pienso que el núcleo del problema es que tanta madurez tienes para soportar las opiniones de los otros.
Conserva la humildad, no la timidez.
Saludos.
Kent Foster, Se me olvidó agregar, me encantó tu frase, muy acertada, debemos ser humildes y no tímidos, la timidez de verdad que nos carcome las ansias de escribir
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