Muerte a la Corona

En el misterioso reino de Zarek, donde la política y lo divino se entrelazan, un niño llamado Alan, nacido de una chispa celestial, es adoptado por una familia campesina tras ser hallado en un bosque. Su vida se ve envuelta en giros por la llegada del Rey Marcus, quien con amenazas lo aleja de su familia, usándolo como moneda de cambio con la iglesia y comprometiéndolo con su hijo, el príncipe heredero Magnus, él cual no quiere comprometerse, púes su corazón ya esta domado por una doncella del Castillo. Nuestro joven Alan de igual forma se ve en negativa ante el compromiso, él ama a otro hombre, el príncipe segundo del Reino de Argón, Nolan Aegón del el Reino enemigo.