Dude mucho para comenzar este capítulo, pues el contar mis inseguridades implica mostrarme vulnerable y eso precisamente es algo que me molesta, no me gusta ser débil aunque se que eso nos hace humanos, pero creo que es necesario mencionar, así que, eso me llevaría a mis 7 años, y dirán que problemas puede tener una niña de esa edad, pero si... una cosa que no comprenden los adultos es que los niños también escuchan sus comentarios y también les afecta, el escuchar de personas que se suponían debían quererme y aceptarme como soy, pero a quién queremos engañar las personas somos naturalmente fijonas, no lo neguemos, pues por lo menos una vez en la vida criticamos la apariencia, la forma de ser, hasta la familia, es normal... Pero lo que no es normal, es que una niña de 7 años se pregunte porque es tan mala...
Así que les nombrare algunas de las cosas que más daño me hizo a esa corta edad... el escuchar críticas de mi familia y conocidos, por mis gusto,s no era bonito, era extraño que a una niña le gustase el fútbol, pues era un deporte de hombres, así que sí; se me critico el hecho de que prefería salir a jugar con mis amigos al fútbol, a mete gol entra al arco, al 25, pues, se decía que como señorita debía de buscar un deporte más femenino, así que si deje el fútbol por algo más femenino, intentando adaptarme a ser una señorita, intentando encajar en lo que los demás querían de mi... Deje el fútbol a un lado, para entre al ministerio de alabanza, uno para que dejaran de hablar así de mí, y dos para que mi mamá y mi abuelita se sintieran orgullosas de mí, y no me malentienda porque la verdad esa actividad si la disfrute; pero si, esos recuerdos y comentarios al día de hoy me afectan... fue hasta que alguien me dijo:
Basta, no te compliques...
No vas a agradarle a todo el mundo, deja eso de lado
Y se simplemente tu...
Así que si, tomé el consejo y desde ahí empecé a buscar mi identidad, identidad que admito que incluso hoy no pude encontrar realmente; pero también tuve otra inseguridad, una que me afecta incluso en la actualidad, pues la verdad es que los niños pueden ser muy crueles... para saber el significado de eso déjenme contarles una historia... Cuando tenía 6 años mi mamá me llevo a la casa de mi abuela para que me quedara con ella, pues querían evitar que nos pasara algo en la construcción que ellos estaban haciendo en casa, pero nos escapamos de su casa, pues no iba a permitir que mi abuela me peinara, pues ella podía ser un poco brusca, así que hicimos lo que todo niño podía pensar, la casa de mi abuela no estaba a más de 2 cuadras, así que convencí a mi hermana pequeña de huir, despistamos a mi abuela y decidimos salir del lugar y caminar hacia casa recordé una historia acerca de duendes y donde encontrarlos así que una niña muy valiente y curiosa decidió ir al lugar y adivinen que, a los perros no les gustan que se acerquen a su territorio, así que cuando entre al lote baldío el perro me salto y me mordió, si no hubiese sido por mi hermana terraneitor que uso una piedra para espantar al perro no sé qué hubiese sucedido, quizás estaría desfigurada , pues, el perro no me mordió una pierna, un brazo o una nalga, pues no, el perro me mordió la cara dejándome una cicatriz notoria en el rostro, mi desobediencia me costó lo que podría haber sido un rostro perfecto, pero no, ahora está marcada por una cicatriz en el lado derecho de mi rostro... ahora que tienen el contexto es hora de decirle los apodos si se pueden llamar así de mis muy queridos compañeros de colegio, pues desde niña fue normal escuchar que algunos niños me llamasen chuki, hija de freddy krueger, cara cortada, fea, etc... así que sí, me sentía fea y eso no cambio ni siquiera en la secundaria...
Así que es hora de entrar a la secundaria, el escuchar comentarios de otras personas acerca de mi rostro me bajo el autoestima, pues veía a mis compañeras completamente perfectas, unas señoritas... así que intente esconder mi cicatriz detrás de mi cabello, parecía emo, pero no lo era... SOLO QUERÍA ESCONDER MI FEALDAD... desde ese entonces nunca me sentí bonita, y no ayudo el ser la fea de mi grupo de amigas, pues ellas eran todo lo que yo no, ellas eran señoritas, lindas, con un bonito carácter y perseguidas por varios chicos, a diferencia de mí, que era una marimacho o así me definían mis compañeras de curso, no era tan agraciada, era la chica a la que los chicos se acercaban para ligarse a la amiga... y todo por mi rostro y mis gustos, pues a los chicos no les interesaba estar al lado de una chica como yo, pero me adapte, me dije que no era el momento y cuando alguien me preguntaba por mi novio, solo decía que no estaba en mis planes, me hacía la desinteresada, pero en realidad si me afectaba y solo una persona se dio cuenta, esa fue mi mejor amiga de colegio, pues se inventó un chico, y me dijo que le gustaba pero que era tímido, pero en el fondo sabía que era falso, pues nunca me quiso dar ni el nombre siquiera, hasta recuerdo que me dijo que me dedico una canción aunque no recuerdo el nombre de esta. Así que si uno de mis más grandes defectos es la baja autoestima, pero que ahora estoy solucionando, pero me cuesta, pues mi más inusual respuesta a cuando alguien me alaga es… NO CREO… porque la verdad es que, no me la creo, fui llamada por tanto tiempo fea, que me la creí; pues hubo una temporada que hasta llegar a pensar que era un adefesio, un ser imposible de querer, pero si soy honesta no estoy tan mal, ahí un 6 o quizás un 7 o eso me dicen mis amigas
Ojalá no hubiera vivido eso, pues por culpa de comentarios mal intencionados de personas que no tenían más que malos comentarios, puro veneno, como dijo una de mis docentes comentarios de viboreros, quizás mi forma de ser y pensar sería diferente, al menos esos comentarios me hicieron más fuerte de mente, pues aprendí a evadir los comentarios hechos de esa clase de personas… así que sí, tengo muchas inseguridades que me afecten día a día, pues las críticas tanto a mi físico y mi forma de ser me rompieron y una vez rota, es imposible que vuelvas a ser la misma persona, es como cuando rompes el florero de tu mamá e intentas unirlo con carpicola nuevamente para evitar que te castiguen, pero el resultado no es el mismo, una vez dañado es imposible que algo vuelva a estar intacto, y eso me paso…