Jane
Nos sentamos con cuidado sobre la cama, aquel cómodo edredón que varias veces son cubrió del frío, que nos cubrió tantas veces que uno ya se siente parte de el, es como parte de tu piel. Traté de curar a Luke con todas mis fuerzas, él inmediatamente se curó sin que yo hiciera algo.
Sabía que ahora me diría la verdad de todo y eso era lo más importante, sólo quería saber la verdad que ocultaba, sabía que todo esto lo estaba atormentado. Con sólo ver su hermoso rostro me di cuenta de todo lo que estaba mal. No me agradaba para nada las cosas que estaban sucediendo dentro de mi, pero sabía que dentro de él también había algo que lo agobiaba.
Algo que no lo dejaba ser, algo raro y extraño que sabía que me estaba ocultando, sabía que lo que fuera sería demasiado malo.
—Soy... Soy un oscuro, el único de mi familia. Tengo un hermano llamado Óscar, él está atrapado en el infierno, y mis padres lo quieren de vuelta. Mi madre prefiere dejar su sabiduría porque él vuelva, pero... Yo, yo debo hacer cosas terribles para sacarlo de ahí. —Lo mire a los ojos.
—Por eso el libro, no lo harás tú... Lo hará un ángel.
Vi que él asiente.
—Yo... Empecé con el hechizo, sangre de dos niñas demonio, Erica y otra chica. Gracia y corazón de un ángel, ya los tengo en mí poder... Sólo falta un ingrediente fundamental.
—Entiendo... Leí el famoso libro cuando me quedé a dormir en tu casa, Luke no tienes que hacer esto, dile a tus padres que no, o que lo hagan ellos. Tú no quieres que tu hermano vuelva entonces no lo hagas. ¡Demonios!, Deja de hacer caso por una vez en tu vida. Mataste a una persona inocente, ¿Qué más pretendes hacer? —Lo mire mientras negaba varias veces.
—No lo entiendes, créeme... Si no lo hago estoy bastante seguro de que yo seré el siguiente ingrediente. No lo entenderás y eso lo sé, yo al principio me costó mucho trabajo comprender, hasta que me obligaron. Jane jamás vuelvas, vete... Por favor, ¡Ahora!, Mis padres saben con claridad usar el “Lin”. Vete, busca a Lionel, él te ayudará —Me dijo con un tono de voz de miedo. Pero algo dentro de mí no creía sus palabras.
— ¿Lionel?, No... No iré con él.
—Por favor.
Negué con la cabeza pero en un pequeño movimiento Luke ya me había enviado directamente hacia Lionel, Luke era mucho más rápido y poderoso que yo y por ese motivo hacia lo que él deseaba conmigo, no importaba cuentas veces lo hablamos él seguía haciendo de las suyas. Lo vi en esa iglesia nuevamente y me acerqué rápidamente, lo más pronto posible para que nos ayude. Él se dio la vuelta y me miro a los ojos con una pequeña sonrisa en su rostro, debo admitir que era una sonrisa tranquilizadora, ¿Cómo es que estaba tan tranquilo?, Era el final y él estaba sonriendo como si no hubiera problema alguno.
— ¿Ya te contó? —Pregunto él.
Asiento.
—Te ayudaré a detener esto, si traen a un demonio del infierno ángeles vendrán en su búsqueda y créeme, no le importarán los que se pongan en su camino. Todos morirán.
Fruncí el ceño y tome su mano fuertemente para teletransportarnos hacia donde estaba Luke. Por suerte todo estaba completamente bien y por ahora no había ningún problema a la vista. Lionel se acercó a Luke y lo miro a los ojos.
—Tú, tú... Me enviaste aquí.
Él asiente, yo los miro sin comprender mucho.
—Mis padres me matarán si no lo traigo de vuelta, debo admitir que realmente no quiero morir. Sé que ellos son capaces de hacerlo, ya secuestraron y maratón a un par de personas y mi madre recibió su sabiduría por algo... Algo que aún no descubro y realmente no quiero descubrir —Dijo Luke.