Capítulo 6

Rachelle despertó y se dio cuenta que tenía las piernas entrelazadas con las de Tonny. Ambos estaban sumergidos en un abrazo muy cómodo, se percató que estaba en ropa interior y él también. 
Habían visto una película romántica que a Rachelle le encantó, pero a Tonny no, sin embargo se la vio hasta el final con ella. Luego vieron “Soy Leyenda” y esa sí que la durmió. 
Ella lo miró, él dormía profundamente. Nunca en la vida le había pasado algo como eso, él no la presionó, hicieron lo que ella deseó. 
Eso le sacó un suspiro, sentía que estaba navegando en agua peligrosas. 
—¿Tonny?—lo llamó 
Él se movió un poco y abrió los ojos lentamente. 
—Buenos días muñeca 
—Buenos días 
—¿Dormiste bien?—le preguntó mientras se estiraba 
—Sí ¿Y tú? 
—Delicioso y a la vez una tortura, por tener una hermosa mujer a mi lado y no poder tocarla 
Ella sonrió—Que mal 
Él la acercó más a su cuerpo duro y ella sintió su miembro viril. Él le apretó el trasero y se le escapó un gemido. 
—Tonny...
—Deja que te haga el amor—le susurró 
Ella colocó ambas manos en el pecho de él para poner distancia. 
—No, porque tú no me amas—y al decir esto salió de la cama. 
—Joder Rachelle ¡Tengamos sexo entonces! 
—No soy una cualquiera 
Él golpeó la cama con un puño—¿Por qué te niegas a vivir esto? ¿Por qué? Es obvio que lo deseas 
—No Tonny—le dijo mientras se colocaba el vestido—Tú no eres mi tipo 
—¡Menos mal! Odiaría ser tan imbécil, es lo único para lo que tienes buena vista 
Eso la ofendió—¿Crees que eres diferente a ellos? ¡Estás casado! 
—Yo en ningún momento te he dicho que dejaría a mi mujer por ti ¿O si? Rachelle pon los pies sobre la tierra, los hombres somos infieles y eso nunca va a cambiar; podemos tener a Miss Universo en la casa, que la del vecino nos va a gustar más 
—Los felicitó, son unos idiotas 
Ella se acercó a la puerta y él corrió, interponiéndose en su camino. 
—Rachelle, por favor...
—Se exactamente como ven todos Tonny. Soy una estúpida. Mi hermana me lo dice, mis amigas me lo dicen, las plantas me lo dicen, los animales me lo dicen... yo lo sé. Me importa una mierda el feminismo, el empoderamiento femenino, yo quiero ser madre. Todos los putos días me arrepiento de haber abortado a mi bebé, por lo menos con él, me sentiría menos sola 
Él la miró sin decir nada. 
—Tú eres padre, sabes qué es tener una parte de ti, porque ellos son no una parte de ti. Si ustedes los hombres son así por su “naturaleza” que feo debe ser, que feo debe ser que seas un monstruo con alguien que te ama. Gracias a Dios nací mujer 
Ella abrió la puerta y se fue.

***

Tonny se encontraba en el famoso TV Show A las ocho no, cariño. Había viajado a Los Ángeles muy temprano en la mañana hace ya tres días. 
Los chicos de Decode se encontraban en el 
set respondiendo las preguntas mal intencionadas de Lulú, la presentadora. 
Él y los demás guardaespaldas estaban distribuidos de manera estratégica por todo el lugar y fuera de este. Él hacía pareja con Tango, su compañero de grado A, que en realidad se llamaba Xander Smith, pero que aquellos idiotas disfrutaban de aplicarle un sobrenombre a cada uno. Ambos se fumaban un cigarrillo en silencio. 
—Odio venir a este show—comentó Tango
Tonny no le dijo nada y se limitó a esparcir el humo de su boca. 
—Volaremos a Chicago de nuevo, hay una presentación allá 
—¿Podrías cubrirme? No quiero ir allá 
—Desde hace rato estás un poco raro ¿Te pasa algo? 
—Nada, es sólo que... siento que no debí hacer ciertas cosas apresuradamente 
—¿Cómo cuáles? 
—Como casarme con Marina sólo porque quedó embarazada 
Tango botó la colilla y lo miró fijamente.
—¿Ya no la quieres? 
—Yo la quiero, creo que no había dudado de mi amor por ella. Hasta ahora. Hasta que conocí a Rachelle 
Su amigo se echó a reír—Hombre, ya sé lo que tienes. Todos pasamos por eso, acuéstate con esa mujer dos o tres veces y regresa con Marina. Ella es tú mujer, la otra es sólo un capricho 
—¿Tú crees? 
—Sí hombre, pero no le hagas eso a Marina, no se lo merece. 
Él suspiró y siguió fumando. Nunca se había encontrado en aquel dilema, por la misma condición de su trabajo había estado con muchas mujeres, pero Rachelle era diferente. Con ella no quería un rollo de una noche, sin embargo ella nunca se entregaría de esa forma. 
—Vamos, ya terminaron—le dijo a Tango y se pusieron en marcha.

***

Era la doceava vez que Rachelle miraba el teléfono. Ni una llamada, ni un mensaje, era como si se lo hubiese tragado la tierra. Eso le sacó un triste suspiro, ella no lo había llamado quería esperar que él lo hiciera. 
Ella se encontraba de pie en un puesto de revista viendo el número de Box R, había comprado sólo una, ya que se las habían llevado todas. Anna Todd tenía muchos lectores. 
Tenía puesto un short de Jean, un Boddy blanco y un kimono, con unas botas marrones de tacón, cortas. Metió las revistas en su bolso de Channel y fue a reunirse en una cafetería con una de las ganadoras de un concurso de Poesía que se realizó en la plataforma Wattpad, Lynn Puello. 
Rachelle entró a la cafetería y allí estaba la escritora, tenía un cabello rizado casi igual al de ella, su piel era más clara y era bajita. Tenía una blusa manga larga de color negro y un short de Jean, acompañado de unas botas largas. 
—Hola Lynn, soy Rachelle Rice, editora de Box R. Gracias por tu tiempo 
Ella le sonrió—¡Gracias a ti! De verdad amo la revista, casualmente la compré 
—Gracias 
El mesero se acercó a ellas y les sonrió. 
—Buenas ¿Qué desean ordenar? 
—Un café de leche largo y un plato de fresas con crema, por favor 
—A mi un capuchino de vainilla 
—Enseguida—dijo el joven y se marchó
—¿Te pareces si empezamos ya?—le preguntó Rachelle y ella asintió. A continuación sacó su teléfono celular y oprimió “Grabar”.
—¿Cómo comenzaste en Wattpad?
—Porque una amiga me lo recomendó, muy intensa en el tema. Ella vio el potencial que yo tenía, ni siquiera yo lo veía. 
—¿Crees que la plataforma fomenta la lecto-Escritura? 
—Por supuesto 
—¿Qué opinas de los Wattys? ¿Crees que deberían tener alguna mejora?
—Los Wattys son buenos, ya que fomenta la competencia, pero si creo que deberían mejorar,  y más cuando en la plataforma hay libros muy buenos,  pero no son casi vistos. 
En ese momento llegó el mesero y dejó el pedido. Ella tomó un sorbo y se comió una fresa. 
—¿Crees que el género de poesía es invisibilizado en la plataforma?
—La verdad no. En la plataforma hay mucha poesía y a las personas en verdad le gustan. 
Me gusta ese ambiente donde muchas personas  utilizan ese genero literario para generar una expresión
—¿Qué poetas te gustan?
—Pablo Neruda, Allan Poe  y julio Cortázar
—¿Qué le dirías a los que están empezando en este género?
—Que lean mucho y que se atrevan a escribir de todo, que transmitan lo que sienten. Pero que su único recurso para escribir no sean sus sentimientos, ya que un buen poeta puede hablar de las olas del mar, de la cálida luz del sol en media tarde, o de aquellas estrellas que callaron su silencio el cual las obligo a olvidar sus sueños.
En ese momento algo atrajo la atracción de Lynn en la televisión.
—Lo siento Rachelle, es mi banda favorita y los están entrevistando justo ahora 
Ella miró la televisión también y se percató de que era Decode. 
—¿Sabes todo sobre ellos?
—Todo, como toda Dexotic 
—Perdona ¿Qué? 
—Dexotic así se llama el club de fans
—Oh entiendo y me dices que sabes todo 
—Así es 
—¿Hasta los nombres de sus guardaespaldas? 
Ella se echó a reír—La verdad no, sólo del más cercano, de Citrux 
Rachelle alzó las cejas—¿Así se llama?
—No, pero así lo llaman ellos. Lo aman y nosotras también, es un negro precioso y hace muy buen trabajo con los chicos 
—Entiendo 
—¿Tienes más preguntas? 
—No, Lynn creo que es todo. Me encantaría quedarme charlando contigo, pero debo volver a la revista y escribir la entrevista 
—¡Claro! No te preocupes 
—Esta es la tarjeta de nuestra fotógrafa, ella se pondrá en contacto contigo para las fotos ¿Vale?
Ella asintió mientras lo recibía y Rachelle le dejó dinero. 
—Por favor, yo invito—insistió y le dio un beso en la mejilla mientras se despedía. 
Rachelle salió a la calle y sacó su teléfono para marcarle a Tonny, este no respondió en la primera y ella decidió no insistir. 
En ese momento recibe un mensaje de texto.