Capítulo 9 - FINAL

Chicago, Illinois

Habían pasado dos semanas desde que Tonny había partido a hablar con Marina. No le había llamado y sólo le había colocado un un mensaje de que estaba bien. Quizás si arreglaron las cosas y se dieron una oportunidad, si ese era el caso ella estaría contenta. 
<<¿A quién quieres engañar?>> pensó desconcertada. Estaría muy triste y predijo que lloraría más que nunca. 
Las cosas en la revista iban de maravilla, pero sentía que últimamente nada la llenaba. Había salido con las chicas un par de veces y se había distraído sólo un poco, no podía negar que extrañaba demasiado a Tonny Anderson.

Ella se encontraba jugando parqués con sus padres y su hermana. Cada jueves jugaban un juego diferente, Lisa y Ronnie Rice-sus padres-eran muy competitivos y era divertido verlos discutir. Los cuatro estaban en pijamada, eran las 19:00 PM, pero era domingo y ninguno iba a salir. 
—No puede ser—dijo Ronnie—Me soplaste la ficha Lisa ¡Me la soplaste! 
—¿De qué hablas?—se defendió esta—Yo no he soplado nada 
—¡Te duele que sea mejor que tú en todo! 
—¿Que tú eres mejor que yo en todo? ¡Ridículo! 
—Aquí vamos de nuevo—comentó Raisa 
—Te toca—le recordó Rachelle 
Su hermana tiró el dado y le salió un tres. En ese instante sonó el timbre. 
Ella miró a sus padres—¿Están esperando a alguien?
Ellos negaron con la cabeza y su hermana se puso de pie. 
—Yo abro—anunció y todos miraron hacia la puerta. Ella la abrió y Rachelle abrió lo ojos. 
—Buenas noches—saludó Tonny 
—Oh... Por... Dios...—susurró Raisa—Lucifer a venido por mí, he sido muy mala y no me arrepiento 
Él le sonrió y Rachelle se puso de pie. 
—Tonny ¿Qué haces aquí?
—¡¿Qué?!—exclamó su hermana—¿Él es tú Tonny?
—¿El novio de Rachelle?—quiso saber su padre 
—¿Mi futuro yerno?—añadió su madre 
—¡Basta!—ordenó Rachelle—Me están avergonzando 
—Pasa cuñado—le dijo Raisa 
—Si interrumpo, puedo venir mañana—dijo este 
—Para nada—le dijo su madre—Soy Lisa Rice, la madre de Rachelle y él es Ronnie, su padre 
—Encantado de conocerlos—dijo Tonny 
—El gusto es nuestro—le dijo su padre—¿Juegas al parqués?
—Sí señor 
—Puedes jugar por mi—le dijo Raisa 
—Tienes buen porte—lo alabó su madre—¿Alguna vez estuviste en el ejercito? 
—Si señora, presté el servicio militar—respondió él 
—¿Y ahora a qué te dedicas? 
Rachelle cerró los ojos mientras se hacía a un lado dejaba que Tonny ocupara el puesto de Raisa. <<Ya empezó el interrogatorio>> pensó. 
—Soy guardaespaldas 
—¿De quién?—le preguntó su padre 
—De Decode 
Raisa gritó—¡No puede ser! Llamaré a Vivían 
—¿Quienes son?—preguntó su madre 
—Es una banda de chicos papá—le explicó Rachelle—tocan rock alternativo 
—¿Son esos maricones que se pintan el pelo y las uñas?
—Creo que si 
—Efectivamente son ellos—confirmó Tonny
—Que denigrante—le dijo su padre—¿No te gustaría ir a la Marina? 
—No puedo señor, ya pasé la edad 
—Si nosotros hablamos, podrías entrar—le dijo su madre—mi esposo es Coronel de la Marina y yo fui capitán de la armada 
Tonny los miró con toda la admiración del mundo. 
—Eso sería grandioso
—Tonny, mi amiga Vivían pregunta que ¿de qué rango eres?—le dijo Raisa 
—Rango A 
—Rango A—repitió su hermana—¿Que si eres Citrux o Tango?
Él suspiró—Citrux 
—Citrux—repitió Raisa y Rachelle escuchó el grito de Vivían.
—Dice que te ama, que te sigue en Instagram y que gracias por cuidar de Will—le comunicó Vivían 
—Dile que gracias a ella—le dijo él 
—Eres famoso—le dijo Rachelle 
—En contra de mi voluntad 
—¿Y ya tienen fecha de boda?—preguntó Ronnie—Si te casas con mi hija tienes asegurado un buen puesto en la Marina 
—Papá estamos en el siglo XXI no en el XV—lo riñó Rachelle 
—Mi hija es una buena mujer—le informó Lisa—Sabe cocinar, tiene un negocio propio, le gusta mucho estar en la casa, estudiada y será una muy buena madre
Él le sonrió—Soy consciente de todo eso 
—No le des más largas al asunto, entonces—le dijo su padre
—¡Cállense ya!—exclamó Rachelle furiosa—Si tanto quieren deshacerse de mí, díganmelo y me voy de esta casa 
Todos quedaron en silencio. 
—Tonny no es mi novio, es sólo un amigo. Tiene una esposa y dos hermosos hijos y por primera vez en mi vida tengo claro que esta relación no va a pasar de una amistad, porque sé lo que valgo y estoy dispuesta a esperar que suceda y sino sucede nunca, estaré bien. Pero por favor dejen de humillarme de esa forma
—Bien dicho—susurró Raisa
—Lo siento hija—le dijo su padre 
—Lo sentimos—añadió su madre 
—Ahora necesito que se vayan, tengo que hablar con él 
Ellos asintieron y se fueron. 
Tonny le aplaudió—Hasta que por fin lo entendiste 
—¿A que has venido? 
Él suspiró y ambos se pusieron de pie. 
—Hablé con Marina 
—¿Se reconciliaron? 
Él negó con la cabeza—Decidimos divorciarnos, al parecer todo lo que le dijeron tú y tus diabólicas amigas hizo un efecto en ella y ahora quiere hacerse una cirugía plástica que yo debo pagarle por arruinarle su cuerpo por embarazarla y me dijo otra sátira de cosas donde incluyó “Abajo el patriarcado opresor” y no sé qué más 
—Joder, le dije que mantuviera el secreto
—Ella no me dijo nada, fue Samantha 
Rachelle cerró los ojos—Olvidé decirle a ella 
—Te gusta meterte en los asuntos de los demás 
—Tenía buenas intenciones 
—Lo sé y no estoy enojado 
Ambos guardaron silencio. 
—Me quedaré en la mansión de los chicos en Los Ángeles, hasta que encuentre algo propio. Aunque Samantha está feliz, ya que estará tranquila 
Ella asintió—Te felicitó, de verdad 
—Vine porque, necesitaba verte 
—¿Y eso por qué? Tonny... debes quedarte solo un tiempo. Vivir tu vida al máximo 
—Sí, eso haré. Mañana partiré a Los Ángeles 
Ella asintió—Viniste a despedirte
—Sí, y también vine a decirte que quizás en un futuro que no sea muy lejano me gustaría salir contigo, conocernos más, deseo conocerte más 
Ella no le dijo nada. 
—Mi trabajo es complicado, pero sacaría tiempo para verte y obviamente tú puedes verme cuando quieras 
Ella asintió—Lo haré 
—Eso era todo, salúdame a tus padres y a tu hermana 
—Bueno
Ella se dirigió a la puerta y la abrió. 
—Te escribiré—le dijo el 
—Bueno
—Rachelle...
—¿Sí?
—Perdóname 
Ella no entendió y él la tomó por el brazo y la besó. Ella no podía engañarse, ya estaba enamorada de él, pero iba hacer las cosas bien, esta vez no se iba a apresurarse, esta vez iba a apostar poco. 
Él la soltó—No es como si fuéramos novios, pero lo estamos intentando. Por favor, no veas otros hombres. Me molestaría muchísimo 
—Tú tampoco veas otras mujeres 
—Bien
—Adiós hermosa 
—Adiós Tonny
Ella cerró la puerta y pegó su espalda a ella. Raisa salió en cuclillas y la miró. 
—Muy bien hermana, muy bien—le dijo
Rachelle la abrazó—Lo quiero, quería gritarle que no se fuera 
—Lo sé, pero así está bien. Créeme, ese hombre está enamorado de ti
—¿Tú crees? 
—Cien por ciento segura
—Bueno
—Anímate, vayamos por unas frutas con helado, apuesto a que lo quieres con cien por ciento fresa ¿verdad? 
—No lo dudes—le dijo ambas rieron.