Capítulo 5

Deje el cuerpo debilitado de Na Hee sobre mi cama, atrás de mi, estaba mi tío, Tao “El médico de la familia” dispuesto a prestarme su ayuda, no me negare a recibirla. Me quede a un lado de la cama dejando que el checara su estado, estaba débil, podía sentir los latidos de su corazón latir lento. Cerré los ojos ingresando a su mente para poder leer sus pensamientos, y el averiguar como había ocurrido su accidente y ver quien era la persona que se encontraba a su lado, al encontrarlo, un rostro familiar, lo he visto en alguna parte. Intente concentrarme y al recordar bien, mis ojos se abrieron de golpe. Aquel chico estaba en el club aquel día, en la barra. Aquel chico había provocado el accidente que dejo a aquella chica en ese estado, la razón la desconozco por completo, pero de algo estoy seguro alguien no quiere con vida a aquella chica, pero mientras este aquí, nada malo le ocurrirá.

Han pasado ya dos días desde que encontré a Na Hee, seguía dormida, al parecer sin intención alguna de despertar. En todo momento me mantuve a su lado, cuidando y velando por su estado, admirando aquel bonito rostro, y esa calma en su dormir. Estaba por quedarme dormido, cuando un grito me despertó de golpe. Ella estaba sentada sobre la cama, al parecer confundida. Me acerque a ella sosteniendo su rostro entre mis manos para brindarle calma. Y esperando claro que me reconociera, no creo que mi rostro sea fácil de olvidar.

• Tranquila. Estas a salvo.
• Tu… ¿Dónde, dónde estoy?
• Estas en mi casa, te encontré moribunda en la carretera.
• K…Kang.
• ¿Es el nombre del chico que intento matarte?
• ¿Cómo lo sabes?
• Se muchas cosas, supongo que ocultarlo ya no importa. Cuando nos vimos la primera vez, me preguntaste que era yo, y bueno mi respuesta te la daré ahora.-Suspire pesado antes de abrir la boca para confesarme.- No soy humano, soy un hombre lobo, por eso viste mis ojos rojos aquel día. No soy normal.
• ¿E…eres que?
• Ya lo oíste. Pero tranquila, no te hare daño. Soy un buen chico.
• ¿Cómo puedo creer en ti?
• Te he salvado dos veces ya ¿No? ¿Tienes hambre? ¿Quieres algo?
• Quiero ir al baño.-Aquel comentario solo provoco que una risa se me escapara de la boca.-
• Vamos.

Baje junto a ella hacia la sala, algunos de mis tíos estaban reunidos por la casa. Todos estaban confundidos, creo que tendré que explicar todo lo que sucedió en la ciudad, las peleas, el asesinato de aquel tipo. Junto a ella fui a la sala para comenzar con el relato, en la cara de mi padre solo veía decepción y rabia, la misma que en todos los demás. Baje la mirada ante sus pensamientos que solo provocaron en mi ganas de llorar, “irresponsable” ”niño idiota” “Inmaduro” “Por tu culpa nos van a descubrir” aquellos pensamientos solo lograban que las ganas de irme de ese lugar aumentaran mas y mas.

• Te lo dije Jun, no estas listo para salir, maldita sea mataste a alguien, eso no importa, nosotros lo hacemos todo el tiempo, pero ¿Dejar testigos? Que idiota eres, no sabes nada mocoso.-Alzo la voz mi tío Su Ho.- Ah, y esta humana es la causante de todo.
• Su Ho, yo arreglo esto.-Se puso de pie mi padre quien en todo momento había estado con la mente en blanco, se puso de pie caminando hacia mi, estoy seguro que va a golpearme, pero al contrario solo palmeo mi mejilla.- No vuelvas a cometer un error así, espero hayas aprendido tu lección, y en cuanto a ella.-Miro a Na Hee de pies a cabeza.- Supongo que no puedo impedir que la cuides, conozco el sentimiento.-Sonreí al ver a mi madre en su mente. Solo pude abrazarle con fuerza.- Y usted, espero no abra la boca, porque, sería una pena tener que romperle el cuello. Mantenga el secreto, es lo único que pido.
• No diré nada, el me salvo dos veces ya. No voy a traicionar a mi héroe.

Si pudiera sentir pudor, estoy seguro de que mis mejillas estarían de un color rojo intenso, pero aquello no sucedió. Con un leve movimiento de cabeza le indique a la chica que me siguiera. Afuera, la nuevamente comenzaba a caer, antes de salir le entregue un abrigo, y así comenzamos a caminar por uno de los tantos senderos hacia el interior del bosque. En su mente rondaba una pregunta, que estoy seguro que no la hará.

• Lo que mi padre quiso decir, es que, mi madre también era humana, el se enamoro de ella, el día en que mama llego a esa casa. El conoce bien lo que es cuidar de una humana. Es por eso.
• Espera ¿Cómo es que?
• Como es que se que ibas a preguntar eso. Es simple, tengo algunos dones por así decirlo, soy especial.
• Ya lo estoy notando. Pensé que ustedes solo eran una invención de Hollywood.
• Y queremos seguir así.
• ¿Hay mas de ustedes?
• Mh claro, por todo el mundo. Y entonces ¿Por qué quieren matarte?
• Larga historia.
• Metida en problemas por prestamos, con gente indebida. Ese chico, el del club, es el hijo del idiota que mate ¿No?
• Así es. Mi vida es complicada, chica rebelde, sin padres, huérfana, detenida en muchas ocasiones, no se como es que sigo viva.
• Gracias a mi.-Ladee el rostro dedicándole una leve sonrisa a aquella chica la que correspondió de igual forma.- Y tranquila, ya no voy a leer tu mente.
• Gracias por eso.