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Capitulo 2

Emil

A partir del momento en el que dejé el país , se que debo prepararme para las mas grandes locuras. El viaje fue tranquilo junto a Arvid, quien no se ha despegado de mi. Me ha contado sobre sus hermanos y los problemas que llevan pasando. Además de eso, ha terminado su relación con una mujer recientemente . Por lo que para ambos esto será una gran aventura. Dos hombres solteros en bares, y otros lugares que están dispuestos a todo.

Alemania nos recibe muy bien. Visitamos los lugares turísticos y por la noche visitamos los bares. Hicimos amigos en los bares que espero volver a ver de nuevo .

—eso estuvo intenso—ríe Arvid. Me siento un poco borracho pero también me siento un poco libre. Aprovecho para divertirme como cualquier otro joven y bebo junto a muchos de ellos. Pero al salir del bar y escuchar a Arvid, me hace darme cuenta que muy en el fondo todo sigue igual. Aun me siento miserable y con el alcohol corriendo por mis venas,de nuevo siento que nose porque estoy en este mundo. Esa sensación de que estoy perdido dentro mío no se ha ido.

—Vamos Emil, es hora de ir al hotel. Debes dormir y mañana nuestro vuelo sale al medio dia. No podemos perderlo. Nuestro vuelo sale a Austria a las 12 del medio día.—Tengo muchas ganas de ir a Austria por lo que apresuro mi paso o eso intento. Doy algunos pasos torpes debido a mi estado pero Arvid consigue ayudarme cuando casi caigo. El ha decidido tomar solo un poco para poder cuidarme porque decía que seguramente haría tonterías. Ambos caminamos hacia el taxi o lo que parece serlo. Solo recuerdo subir y quedarme dormido un rato sobre el hombro de mi amigo. Luego soy despertado por el cuando parece llegamos al hotel. Con un brazo sobre sus hombros consigo llegar a la cama donde al apenas tocar el colchón caigo rendido.

(..)

Soy despertado por mi amigo quien me grita que en una hora sale nuestro vuelo. Entro al baño y tomo una rápida ducha. Al terminar noto que mis dos maletas están ya hechas. Encuentro en la elegante sala a Arvid tomando un café y revisando su Tablet donde seguro esta viendo algo del reino. No me dice nada mas de eso, solo me pide tomar las maletas y seguirlo pues no hay mucho que perder. Aun así, tomamos el taxi y este va demasiado rápido al aeropuerto. Alemania sin duda me ha gustado , fueron noches locas de fiesta algo que no podía hacer antes como hijo del rey.

Con las prisas no se si he olvidado algo pero ambos partimos una vez mas al aeropuerto. Por el recorrido que el uber da al aeropuerto voy observando a la gente que pasa. Ellos tienen una vida normal, conversan con otros y ríen con ellos sin tener que preocuparse de su postura o la educación que aparenten. Pueden andar libremente sin tener guardias tras ellos todo el tiempo. Ahora mismo nose como es que no he sido atacado, los envidio. Esa es la vida que deseo pero se que no puedo tener. El resto del camino solo me dedico a imaginar como son sus vidas. Porque imaginar es lo único que puedo tener.

—Emil—escucho que Arvid me llama. Al darle atención, noto que luce un poco preocupado por mi . Intento hacer que deje de estarlo, ahora solo debemos divertirnos y vivir el momento.

—estoy bien, vamos —ambos bajamos del uber y tomamos las pocas maletas que llevamos, no sin antes agradecer a el joven que nos trajo . —La vida me ha quitado muchas libertades pero hoy al fin me da la oportunidad de ir a Austria.—continuamos caminando entre los pasillos del aeropuerto.

—y no solo a Austria, pronto estaremos recorriendo el mundo entero como soñábamos de críos. Una vez te dije que te seguiría en todas las locuras y aquí estoy. Así que andando porque podemos perder el vuelo—Arvid da una palmada en mi espalda y acelera sus pasos. Lo sigo entre las multitudes de gente que va de un área a otra corriendo, trotando o caminando. Todos buscando su área para abordar. Es inevitable no poner atención en la gente, en su estrés por razones tan tontas que yo no tengo. Ellos van corriendo preocupados de perder un vuelo cuando la mayoría del tiempo yo estoy preocupado por todo un pueblo y por un posible ataque del enemigo.

Arvid y yo logramos llegar al área de abordaje donde nos piden el pasaporte y el boleto antes de subir al avión. Por el pequeño pasillo mientras llevo la maleta reflexiono sobre lo que Alemania a cambiado en mi y lo que aun sigue guardado ahí en lo profundo de mí. Si bien ya me siento mas libre de andar en el mundo sigo con esa sensación que algo me falta.

Mientras el avión va despegando platico un poco sobre lo que voy sintiendo en el camino con Arvid. El ha tenido mas libertad en su vida, ha podido amar a quien quería.

—Tu vida ha sido complicada desde el segundo en que naciste y talvez lo sea por siempre, pero eso solo dependerá de ti. De tus decisiones , pero quiero que sepas amigo mío que sea lo que decidas yo voy a estar apoyándote. Porque si aun sigo vivo fue gracias a tu familia. Eso no lograría cambiarlo nunca y por eso es que tienen toda mi lealtad hasta que muera.—le da un apretón a mi mano. Algo que ha hecho siempre para demostrar apoyo en momentos difíciles.

—A veces siento que eres el hermano que siempre quise tener, no sabes cuanto desearía que no hubieras tenido esa vida. Pero agradezco aquella tarde en que mi madre te encontró junto a tus hermanos. Haz estado para mi en cada etapa de mi vida. Me haz dado tu confianza y eso es algo que valoro mas que nunca .Deseo que al volver tengas esa vida plena que tanto mereces, me encargare de ello.

—No tienes que hacer nada, la vida sola ira acomodando las piezas. Ahora deja de ponerte tan cursi y mejor veamos los lugares que debemos visitar en Austria.—sacando su teléfono móvil y usando el internet gratis de la aerolínea comienza a buscar. Da con algunos museos, pero sobre todo me muestra una de las pistas de esquiar. St Anton Am Arlberg se ve impresionante en las fotos , todo blanco lleno de la nieve. Nunca he esquiado así que le pido ir ahí lo mas rápido lleguemos a tierra.