14 Tips Para Enamorar a mi mejor amigo.

Capitulo 7

Era viernes, un día muy caluroso o eso parecíaporque el sol iluminaba toda mi habitación y mi cama estaba caliente.
Estaba frente al espejo amarrando mi cabello en una coleta. Siempre me ha encantado mi cabello, rizado medio largo. Estaba dudando si llevar la camisa del uniforme que es manga corta o llevar la de manga larga.

Era una decisión de morir de calor o morir de frío. Me decidí por la manga corta, total no me siento cerca del aire acondicionado del salón.

Bajé las escaleras de la casa y pude ver a Guillermo, mi hermano menor.

Me sorprendió mucho verlo ya que nuestros turnos de clases son opuestos, casi no lo veo. Al igual que entrena en un equipo de fútbol cuando salgo temprano de la escuela.

—¡Hey! Enano —me acerque a él para abrazarlo.

— ¡Lind! ¿Puedo jugar con el conejo cuando no estés? —exclamó para saltar a mí. Tiene 9 años, pero es muy inocente— ¡Hoy no tuve clases! ¡Duermes mucho! Te estuve esperando toda la mañana ¿Iremos a jugar? ¿Verdad? Mamá dijo que nos llevará a comer.

Me quedé sorprendida al escuchar lo que había dicho, miré a mi mamá que en respuesta solo sonrió.

—¡Claro que sí! —le dije de la misma manera y me senté en la mesa.

No estaba muy convencida de lo que Guillermo decía, pero estaba emocionada y respecto a Jeansey, tener una mascota le haría bien a mi hermano, solamente pediría que lo cuidara bien.

Baje la mirada para buscar a mi conejo y ahí estaba en esquina de la casa, estaba comiendo heno.

—¡Alejandro también irá! —me mencionó emocionado mientras comía su cereal— ¡Es mi nuevo mejor amigo!

¿Qué?

Mi cara cambio en ese momento, alcé mi cabeza y mire a los lados buscando a mi mamá para saber si eso era real, pero ella estaba en la cocina.

— Claro que si pequeño —Hablo una voz varonil, pero con cariño.

Voltee a mi izquierda.
Era él, estaba tomando asiento a mi lado.
Su voz había sonado diferente a como la escuchaba cuando me respondía a mí. Ya no me pareció seca y fría... Fue más amable y con entusiasmo.

Me pareció genial que le agradara a Guillermo, ya que ahora no estaba solo en las tardes, pero a mi aún no me agrada del todo.

Lo escanee con mi mirada, observando lo que traía puesto.

Y ahí me dio un infarto.

¡Traía el uniforme de la escuela!

No puede ser...

No puede ser...

¡No puede ser!

(...)

Mi madre nos había llevado a la escuela, a mí y a Alejandro, jamás habíamos ido juntos. Llevamos casi tres meses desde el inicio del curso y jamás lo había visto, además nunca habíamos ido juntos.

¿Qué está sucediendo?

Porque se me hace complicado entenderlo.

— ¡Dime qué es cierto! —dijo emocionada Isme a llegar a dónde estaba. Ella siempre me esperaba en la entrada.

— Ni me lo recuerdes— la empuje para que entrara a la escuela.

—¡Tienes que contarme! —siguió insistiendo.

—Isme, ni yo sé qué hace aquí —me quejé— Jamás lo había visto.

—Ni yo —se encogió de hombros— Hoy es la primera reunión para los nuevos en el club ¿Vamos? —me preguntó, ahí mi alma regreso a mi cuerpo. Se me había olvidado por completo.

— Claro, vamos —Los clubes siempre son a la primera hora de clases, sólo cuando inician.

Yo que tenía pensado platicarle a Isme lo que sucedió ayer.

Cambiamos nuestra dirección para ir al club de Literatura, no estaba muy lejos.

—Me debes una salida —dijo con un ligero puchero— ¡Me dejaste sola!

— Lo sé —me reí— Pero Jean me regaló un conejo —le dije feliz.

Recordarlo era lo mejor del mundo.

— ¿Qué cosa? Nunca creí que fuera de los chicos detallistas —mencionó.

—Yo menos—Giré para entrar al salón donde era el Club de literatura. Aún no había mucha gente.

—Sentémonos aquí —me dijo Isme al poner su mochila en la silla que estaba en medio de la última fila.

Puse mi mochila aun lado y me senté mirando el pizarrón.
Había una frase en el escrita con gis.

"Me rompiste, destrozaste las piezas que tanto tardé en formar y luego las esparciste por distintos lugares. Ahora debo buscarlas y encontrar la manera de amarme por mi cuenta"

Era de un libro que había leído, baje mi mirada al escritorio y ahí estaba el libro

" La chica de la bufanda rosa."

Sabía que era de un libro.
Duh Lind, es un club de literatura.

Volteé a mi derecha para comentarle a Isme, pero ya no estaba allí, se encontraba hablando con unas chicas.

—Ella es Lindsey —me señaló. Me limité a sonreír y solo saludar con una mano, pero las chicas se acercaron.

—Soy Cristina—dijo una de ellas— Me encanta tu cabello —mencionó y se quedó mirando mi coleta.

Me sentí apenada, no sabía cómo reaccionar a ese tipo de comentarios.

—¿Gracias? —respondí con timidez.

Y ya no volví a decir nada, la otra chica se llamaba Karina no parecía ser una chica que leyera mucho estaba hablando con Isme y con Cristal en frente mío sobre cosas de maquillaje y chicos.

Solamente me recargue en mis manos y las escuché.

—Va a ver mucha gente hoy —mencionó Cris. Mire a la puerta y era cierto, persona tras persona entraba, en la mayoría mujeres.

— ¿Por qué? —preguntó Isme mirando la puerta.

— ¿No sabes? —chilló con emoción Karina— ¡El fundador del Club vendrá hoy! —exclamó.

¿Fundador?

—¿Fundador? —preguntó Isme.

— Sii, el Club fue creado hace 5 años, cuando él estaba en segundo de secundaria —le mencionó Cristina.

Ella me daba pinta de que es una chica que Lee mucho. Por su forma de hablar...

Así que es un "él", no sabía que el club se había fundado hace 5 años, es sorprendente. Y tiene sentido, las escuelas Esperanza y paz son populares por su plan de estudios.

El Kinder y Primaria estaban a Dos calles y es la primaria a la que asistí, así como también Guillermo estudia ahí.




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