- Lo eché a perder -

-¡¿SANDER?!-Abro la puerta de Golpe-¡¿QUE HACES AQUI?!

Conchale, ya estoy mas que confundida. Lo rechazo en código, lo rechazo de frente, se molesta, se pierde del estado por mas de 30 días llevándose a Sabiel ¿y ahora viene a verme?

-Hola, Shannon sé que dijiste que no querías que fuera tu amigo y se supone que entonces no me quieres en tu casa, ¿no?-hablaba súper rápido-pero necesito hablar contigo.

-No, no lo digo por eso ¿No deberías estar fuera del estado? ¿No deberías estar trabajando? 

-Es... es difícil de explicar-me dice

-Y Sabiel? ¿Lo viste, lo has saludado? porque si no estás por allá trabajando ¿por qué no estas con tu hijo y vienes para acá?

-Es que quería hablar contigo.

-¡Qué raro que quieras hablar conmigo! esta mañana frenaste el auto a mas de 50 metros-hago hipérbole.

-Esto también quería venir a hablarlo y a disculparme. Aunque no creí que te molestara, me dijiste que no te gustaba mi compañía.

-Eso no me molestó, solo me sorprendió que lo asumieras rápido. Pero Sander, ya no te entiendo, desde el día del picnic estás muy raro. Te llevaste a Sabiel de repente y no querías que me hablara. 

-Necesitaba aclarar un poco la mente y pasar tiempo con mi hijo. De todo el camino el día del picnic, cuando llevé a Sabiel a casa, me contó lo bien que la pasa contigo y que prácticamente no sentía ya que yo era como su papá y que estaba ausente. Por eso planee el viaje, fue por él. Para restaurar la relación, ya que me sentí mal, necesitaba saber si Sabiel podía pasar tiempo de calidad conmigo sin que estuvieras tú para que se distrajera.

-Bueno pero ¿por qué no estas con él ahora y vienes a verme a mi?

-Ya hablé con él y no le importa que viniera.

-No me mientas Sander, Sabiel sabe que yo no te veo como una amistad, él no te hubiera dejado venir y si te hubiese dejado venir entonces se hubiera venido contigo ¿no has hablado con él verdad?

-No, no he hablado con él, es más, ni sabe que estoy aquí. Él piensa ya estoy por allá lejos trabajando

-¿Por qué le mentiste?

-Por eso mismo, porque no me hubiera dejado venir o se hubiera querido venir conmigo.

-¿Y cuál es el problema? ¿No quieres estar con tu hijo ahora? Pasaste un mes siendo el mejor padre de repente ¿y ahora no quieres que venga contigo?

-No, no, el problema no es que no quiera estar con mi hijo, es que quería hablar a solas contigo.

Ay no ¿Por qué abri la puerta?  

-Ay Sander si vas a venir a negociar la amistad o hacer las paces te digo de una vez que mi decisión esta firme, estábamos bien hasta esta mañana que ni te acercaste-me pongo a hablar de amistad sabiendo que él a eso no se refería.

-Es que no vine a buscar precisamente eso sino...-exhala fuerte-olvidalo. 

Miro hacia los lados y se hace un espacio de silencio. 

-Deberías ir a ver a Sabiel.

-No puedo. 

-¿Por qué?

-Sabiel ha estado preguntándome mucho por qué no he ido a la casa y a veces me dice para irlo a buscar y entrar . y no es que odie a Sabrina, pero el matrimonio está en el peor de los estados, está en escombros, no peleamos, pero la última vez intercambiamos palabras un poco fuertes. 

-Pero ¿por qué no lo vas a buscar desde lejos y sales con él así y ya? Sin necesidad de entrar a la casa y ver a Sabrina.

-No, es que Sabiel es muy terco. Cada vez que salíamos me preguntaba qué pasaba con su mamá y por qué no iba a la casa, muchas veces me obligaba a ir para allá a pasar tiempo en familia, eso no es una familia ya, yo no sabía que decirle. Fue en esas veces que le conté lo del divorcio,  y como que no entiende el significado de divorcio, ya que quiere que actuemos como que todo estuviera bien,  y un matrimonio no se arregla en un solo día, eso es en las películas.

-¿Por eso tienes que mentirle a Sabiel de que estas en el trabajo? ¿Porque no quieres ver a Sabrina ni que él te obligue a tratarla como esposa?-pregunto neutral

-Exactamente

-Pero…

-No Shannon, no creo que Sabiel entienda, su mamá y yo no nos estamos separando porque peleamos y nos molestamos, es porque ya tenemos 5 años con esas incomodidades y es difícil estar incómodo y tener que ocultarlo para que tu hijo no se afecte, ya es demasiado.

Sander recibe una llamada.

-Es Sabiel-me dice. Hace un gesto de silencio para que me calle y responde-Alo Hijo ¿cómo estás?

-Hola, papá-Sander pone el altavoz-yo estoy bien, mamá te envía saludos, ¿estás en el trabajo?

-Sí, sí, Sabiel ya llegué, todo bien, solo que me llamaste en un momento en el que estoy ocupado.

Le veo a Sander la cara con desaprobación por haberle mentido a Sabiel.

-Bueno papá te quería preguntar si me das permiso para quedarme a dormir hoy en casa de Shannon.

Le quito el teléfono, pongo la llamada silenciada y le digo:

-Dile que sí.

-No, Shannon.

-¡Dile que sí!-me le acerco molesta-le mentiste a tu hijo sobre que estabas en el trabajo estando aquí en mi casa y me haces cómplice de la mentira, dile que sí y no le digo nada a Sabiel.

Le quito la opción de silencio a la llamada y le paso el teléfono. Sander se queda pensando.

-Papá, papá, alo, ¿me escuchas?

-Sí, sí, Sabiel, te escucho, silencié la llamada sin querer.

-¿Escuchaste lo que te dije?

-Sí, si Sabiel te escuché y sí tienes permiso. Recuerda sin ser demasiado confianzudo y respeta su casa. No quiero problemas con Shannon.

-Vermo, gracias papá, pensé que no me ibas a dejar, porque le pregunte a mamá y me dijo que sí sin problema, solo faltabas tú.

-¿Qué? ¿Le dijiste a tu mamá que ibas a quedarte a dormir en casa de Shannon Gabarde y te dio permiso?

-Sí... ¿qué? ¿Mi mamá conoce a Shannon?...

  Ahí a Sander y a mí se nos pusieron los ojos como platos y nos quedamos viendo, yo automáticamente me puse las manos en la boca y tenía una expresión en la cara como de ¡¿qué hiciste?!. Sander se puso mal, mal, mal, mal y hasta se puso pálido, se calló por un momento. Yo no hacía nada más que verlo, y por debajo de mis manos en la boca tenía una sonrisa. Me acordé aquel día que Sander me dijo que no le contara nada de mí a Sabiel.