23 Historias Cortas de Terror

Un Ganador

Recuerdo haber visto esto en una película, juraría que es una copia descarada de ella, quien sea que esté detrás de esto simplemente no posee ni una pizca de creatividad.

Una grabadora con un mensaje tan estúpido, “bienvenida Victoria, es un placer al fin conocerte, lástima que no podamos hablar en persona, en fin, debo explicarte el juego…”

Patético, pensé en el momento de escucharle decir que seria una especie de “juego de supervivencia”, como dije me parece una copia casi exacta de una mal llamada película de terror, pero, ¿qué podía hacer?

“…Seis jugadores, un ganador, matar o morir, es la cuestión.”

Es ridículo a estas alturas, pero justo ahora es que me dispuse a observar mi entorno, una especie de baño con duchas públicas, donde una de las paredes llamó mi atención, había una hoja de papel con algo escrito en ella, “lee la parte trasera”, sólo eso decía, me acerqué, la tomé y justo al retirarla de la pared una pantalla en el lugar donde se encontraba la hoja inició una cuenta regresiva.

Al leer el reverso de aquel papel pude observar que decía “para la salida hallar tu mente y cuerpo deberás despejar, pero apresúrate, al terminar la cuenta atrás te vas a ahogar”, justo al finalizar de leer aquella especie de acertijo las duchas se abrieron de pronto comenzando a correr el agua, empapando el suelo y subiendo lentamente, por un momento me quedé parada frente al reloj intentando comprender el significado de esas palabras y encontrar la solución del acertijo.

De pronto un grito desgarrador rompió mi concentración, a penas volver en mí el sonido de una cuchilla cortó abruptamente aquel grito y comprendí que podría de hecho morir en aquel baño, “para la salida hallar tu mente y cuerpo deberás despejar” que significaba, despejar mi mente, eso sería no pensar en nada, pero, ¿y despejar mi cuerpo…?

El agua llegaba a mis rodillas y no paraba de subir, era lento pero constante, entonces lo entendí, despejar mi cuerpo, aunque estaba rodeada de duchas, también había inodoros, despejar mi cuerpo, cómo tardé tanto en descubrirlo, tirar de la cadena, eso haces cuando vas al baño.

Corrí a uno de los inodoros y tiré de la cadena, en ese momento el agua comenzó a bajar rápidamente y una puerta se abrió tras de mi—

Abrí los ojos lentamente e intenté levantarme desconcertado, “¡Dominic! Vaya que duermes, comenzaba a creer que empezaríamos sin ti, bienvenido al mejor juego de tu vida, frente a ti en la mesa encontrarás un martillo que deberás tomar, ahora tienes dos opciones, a tu derecha hay una pared delgada la cual te conducirá a otra habitación en la que conseguirás una piscina de ácido el cual deshará tu piel en cuestión de segundos y vaya que será doloroso. Mientras que a tu izquierda está tu amado sobrino inconsciente, puedes observar la cicatriz detrás de su oreja, cuidadosamente introduje una capsula que guarda el código para sellar la piscina y poder salir caminado sobre ella, no tenemos todo el día, toma una decisión, tienes quince minutos…”

“…Seis jugadores, un ganador, matar o morir, es la cuestión.” Esto debe ser un mal chiste, debe haber otra manera de salir de aquí, además que clase de jueguito estúpido y retorcido es este.

Hey despierta, oye Brian despierta ya, Dios que niño tan difícil, realmente tiene el sueño pesado.

Siete minutos para que se cumplan los quince que dijo la grabadora, este niño no reacciona, que debo hacer, no quiero morir ni hacerle daño a mi sobrino, pero sino hago nada moriremos los dos encerrados en este lugar. Joder la opción obvia sería la pared, de seguro no hay nada peligroso del otro lado.

Tomé el martillo y luego de par de golpes a la pared se desprendió un pedazo de un tamaño significativo, dejando ver una habitación con una piscina y en ella un líquido con tonalidad verdosa y burbujeante, me quité uno de mis zapatos de cuero y lo arrojé dentro de aquella piscina que cubría la totalidad de la habitación, apenas entrar en contacto con el líquido comenzó a humear y burbujear, consumiéndose por completo, al ver esto quedé en shock, pero ya sólo restaban 3 minutos.

Debía tomar una decisión y rápido, de verdad lo lamento Brian, tomé el martillo y golpeé su cabeza 3 veces hasta que uno de sus ojos saltó de su cuenca y tras el se asomó una pequeña capsula, hundí mis dedos en la cuenca de su ojo y tomé la capsula, al abrirla se encontraba dentro un control similar al de un auto, al presionar el botón la habitación donde estaba se tornó oscura y la tenue luz verde proveniente de la piscina dejó ver un número en la pared junto al cadáver de Brian, veintitrés, dieciséis y quince.

Me acerqué a la abertura en la pared y pude ver como una especie de cubierta se deslizaba sobre la piscina haciendo un camino hacia una puerta, tan pronto llegó la cubierta hacia mi me dispuse a cruzar aquella trampa mortal, al llegar a la puerta pude ver un panel con un teclado numérico sobre el panel se mostraban los números cuatro, cuarenta y dos y ocho y una pantalla en donde solo había 3 espacios.

Debía pensar rápido puesto que la cubierta de la piscina comenzaba a recogerse de nuevo y no pasaría mucho antes de caer en el ácido, tantos números rondaban mi mente, los de la habitación junto al cadáver del pequeño Brian, los que tenía frente a mí y fue ahí cuando lo supe, ninguno de esos numero abriría la puerta, debía sumarlos, si sumaba los de la habitación el resultado era cincuenta y cuatro, mismo resultado que al sumar los que tenía frente a mí, pero faltaría un digito—




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