#14.- Bodas de papel

Su reunión pudo haber sido más romántica pero, esa noche Allen solo quería abrazarla y convencerse que era real. Hana podía despertar sabiendo que, en esa misma cama durmió Allen y sabría que sería lo primero que viera al despertar.

Al abrir sus ojos se encontró con Allen mirándola con asombro. Ella acaricio el cabello del hombre frente a ella tratando se decirle: es real, todo esto es real.

Cuando el romanticismo cayo en la realidad tenían que empezar la escuela de nuevo y trabajos. Allen buscaba las palabras correctas para decirle a Hana que Mirei les presto cierta cantidad de dinero además él tenía algo ahorrado y Hana aun tenia las joyas que su madre le dio, esperaba no tener que venderlas.

Para su buena fortuna, Allen fue contratado como mesero en un café mientras que Hana busco un poco más hasta encontrar una florería donde solicitaban personal.

No confiaba en su habilidad para cocinar ni atender personas pero, allí necesitaba alguien que supiera de decoración y Hana estudio un poco de ello junto a su hermana Nikki.

Para entrar a la preparatoria le pusieron varias trabas pues tendría que iniciar desde primer año.

Allen no pudo tomar el examen la universidad así que opto por tomar una revalidación de su último año de preparatoria y hacer un examen extraordinario de ingreso. Los resultados los dieron a finales de marzo y entro al programa que eligió. Hana estaba orgullosa. Allen le prometió que el primer gran proyecto que haría sería una casa para ellos.

El primer día de clases pone nervioso a cualquiera pero, a Hana, le parecía interesante.

Alli nadie la conocería como Kanronji, de la familia más influyente de ese lugar, solo buscaría ser Hana.

— Hola, soy Keira, ¿y tú?

— Hola... puedes llamarme Hana

No conocía muchos tipos de personas pero, Keira se veía como si fuera a aprovechar alguna oportunidad para ganar notoriedad.

Los días pasaban lentamente pero, al mirar atrás se dio cuenta de que faltaba 10 días para su primer aniversario de matrimonio.

No tenían algún plan específico pero, quería que al menos recordaran la fecha con una buena comida. Mirei le envió ingredientes al igual que Franco. Hana aun no sabía que preparar. Allen llegaba todos los días muy tarde a veces del trabajo o solo de las clases.

Siempre le preparaba un té.

— Hana, pronto cumpliremos un año juntos, ¿qué tal si vamos a una cita?

— Pero, ¿estarás bien? Todos los días llegas cansado, quizás sería mejor si solo tenemos una comida en casa.

— ¿Debería ser así? No tuvimos ninguna cita el año pasado, creo que al menos quería hacer algo especial esta vez...— su voz sonaba molesta.

Parece que ella se había equivocado en algo.

No era un tema que pudiera hablar en la preparatoria y Mirei también tenía clases. Por un momento no sabía qué hacer.

— ¿Diga?

— Hola, Franco, soy Hana, ¿podemos reunirnos?

— Seguro... ¿te parece en el café negro?

— Si, te veré allí a las 4

No se le ocurrió otra persona. No había nadie más que conocieron a Allen como él.

— Hola, ¿Mirei? Soy Allen, ¿estas ocupada?

— No, ¿necesitas algo urgente?

— ¿Podemos vernos?

— Si, ¿te parece bien en mi casa? ¿Cómo en una hora?

— Si, allí estaré

Allen dejo la escuela rápido y fue a casa de Mirei.

Quería saber porque Hana no le estaba tomando tanta importancia a su primer aniversario. Quería preguntarle pero, no soportaría contestarle de la misma manera que antes.

Al menos quería tener una cita normal con ella pero, no pensaban lo mismo.

— Allen... ¿a qué viniste...?

Podía sentir enojo en su pregunta.

Le platico que Hana no quería ir a una cita con él por su primer año como matrimonio alegando que lo veía muy cansado.

Mirei intento no golpearlo.

Le explico que Hana solo está preocupada por él y su salud. Este cambio fue abrupto para ambos e incluso si es una fecha especial hay varias formas de festejarlo. No importaba lo que hizo irá solo tenían que recordar que es importante ese acontecimiento.

Le sugirió que hablara con ella.

Por otro lado, en el café negro, Hana platicaba con Franco acerca de lo que dijo Allen sobre su aniversario. Este en lugar de enojarse se rió a carcajadas hasta que las personas alrededor no podían apartar su vista de ellos.

— Es en serio, ¿y te estas burlando?

— Algo así... Allen quizás investigo como podrían festejar su aniversario. Déjalo que te de ideas sobre qué hacer. A veces es difícil poner todo en palabras y para él es difícil. Es tímido así que necesitas escucharlo con atención.

Hana agradeció el consejo y fue a casa.

Al llegar Allen, platicaron.

Podrían ir a una cita y cenar algo rico.