CAPÍTULO 5: REVELACIÓN

La cara de Izan fue de asombro, abrió los ojos como si fuesen dos platos, me miró fijamente y dijo:

-¿De veras?¿Quién es?

-Si... -dije-, no puedo revelarte su identidad aún, él me pidió que acudiese a alguien que entendiese sobre todo esto...

-Esta bién, -dijo él-, lo entiendo, pero... ¿Por qué un físico exáctamente?

No se si estaba bien que le revelara tanta información de golpe, en cualquier caso yo no podría salir mal parado directamente, así que continué explicandole.

-Este chico también era un físico -le expliqué-, pero de otra época...

-¿A qué te refieres? -preguntó Izan inquieto.

-Me refiero a que viajó en el tiempo.

-¿Cómo? -su cara de asombro fue a más.

-En efecto -dije-, él proviene del año dos mil diecisiete, me lo contó todo... fue un fallo en un experimento que estaba realizando.

-¿Me estás queriendo decir que viajó al futuro por equivocación?¿Y que ahora está aquí alguien que nació hace más de mil años?

-Así es... -dije-, por eso necesito tu ayuda... El chico me contó algo sobre su experimento, al parecer, tenía que ver con el principio de enlazamiento cuántico y de la aceleración de las partículas de luz.

-Por suerte entiendo bastante del principio de enlazamiento cuántico, pero... ¿Qué ocurrió exactamente?

Me rasqué la cabeza y empecé a dudar de si aquel tipo de verdad podría ayudarme, pero algo en él hizo que confiara, así que continué:

-Las particulas de luz se proyectaron creando una especie de túnel de luz por el que viajó.

-Creo que sé lo que pudo ocurrir... -dijo Izan-, el entrelazamiento es un fenómeno que permite la teletransportación, esto por una parte fue lo que abrió el túnel, o "agujero de gusano", y por otra está lo de las partículas... probablemente la luz entró en un bucle acelerado continuamente hasta llegar a la máxima velocidad, eso hizo que el túnel le absorbiera, y una vez dentro de él, probablemente este chico alcanzó la velocidad de la luz, y eso provocó un desfase en el espacio tiempo que le trajo al año tres mil dieciséis.

Sinceramente, me había sorprendido, cuando le vi no creí que pudiera saber tanto, pero después de explicarme aquello no tuve ninguna duda en sus conocimientos.

-Realmente sorprendente -le dije.

-Bueno chico... -me dijo-, yo he de irme, pero te daré una tarjeta con mi dirección y mi código de ultranet por si quieres contactar conmigo.

-Sí, pronto volveremos a vernos.

-Hasta entonces -me dijo y se fue.

Bien, ahora entendía mejor lo que me había ocurrido, lo comprendía tan bien que incluso podría volver a intentar probarlo por mi cuenta, para así viajar otra vez, pero antes tendría que saberlo todo sobre aquello... por otra parte tenía a los de ISC detrás, investigando el caso, así que tenía que ser como un águila y tener todo bajo control, entonces pensé en lugares donde fuera más difícil encontrarme, y me dirigí a la periferia de New Heaven.

Según iba caminando hacia el aeromóvil noté una sensación extraña, ya era de noche, todo estaba inmerso en un profundo silencio, un silencio perturbador, cuando de pronto escuché algo...

Eran pasos, se dirigían hacia mi, yo actué con normalidad siguiendo mi camino como si no pasará nada, pero me tope con dos tíos altos que se detuvieron en frente mío.

-Disculpe caballero -dijo uno de ellos-, somos de la ISC, queremos hacerle unas preguntas.