Capítulo 45: Carter
Esta mañana al despertar, amanecí con la boca seca y necesitada de un vaso de agua. No había bebido tanta cerveza, pero el mal sabor en la boca se había quedado. Desayuné con mis padres y fui la primera en salir de casa. Milagro, hoy llegaría temprano a clases.
Estuvimos cada una en sus respectivas clases y nos juntamos a comer para el almuerzo, todo parecía ir bastante bien, ya que una compañera del equipo de futbol de Ronnie nos invitó a todas a una fiesta este viernes en casa de Jake después del partido, así que este fin de semana tendríamos fiesta.
Después de que hablar del tema de la fiesta, Eli nos contó la gran noticia del día, aunque sigo pensando que debió haberla contado después de que terminara de tragar mi comida, porque casi la escupí. Eli había besado a Lee la noche anterior y le contó que Andy ya era historia. Sinceramente, Lee era mucho mejor que Andy, mil veces, me alegraba de que ella también se hubiera dado cuenta.
Después de que las malditas horas avanzaran y las clases terminaran, Eli se dirigió hacia el centro para visitar a Chuck en la tienda de tatuajes, Ronnie y Jessie se pusieron de acuerdo para estudiar para los exámenes de Jessie, y Sky aceptó irse conmigo en la camioneta.
- ¿Carpi? – Me preguntó Sky mientras yo intentaba de encontrar una buena estación de radio.
- ¿Dime?
- ¿De qué forma te importa Elliot? – Aquello era algo que no me esperaba en absoluto. Deje de cambiar la estación de radio y me hundí en mi asiento.
- ¿Importar?- Pregunté sarcásticamente.
- Ya no te desagrada.
- No. Pero no significa que se haya vuelto importante. – Sky asintió y miró por su ventana.- ¿Por qué lo preguntas? ¿Crees que me gusta Elliot solo porque dije que tenía un cuerpo sexy?
- No, no es eso.
- ¿Entonces?
- Es solo que él… Él no hizo que pagaras tu cerveza anoche, y fue bastante raro.
- Mira, él solo quiso devolverme la cerveza que le invité en mi casa el otro día, no tiene nada de raro.
- ¿Y cómo explicas las miradas?
- ¿Qué miradas? Sky, en serio estás viendo cosas donde no las hay.- Ella frunció el cejo y se acomodó en su asiento para mirarme mejor.
- Ya, tal vez tú no lo miraste distinto, pero él sí.
- No sé, no le presté atención.
- ¡Debiste hacerlo! ¡En vez de estar embobada mirando a Cole!
- ¿Cole?
- Sí. Desde que él se fue a sentar con nosotras te quedaste pegada mirándolo como una idiota.- Abrí la boca indignada, quería decir algo insultante pero me contuve, Sky no estaba intentando ofenderme. – Y Elliot también lo notó.
- ¿Qué querías que hiciera? Cole está bien guapo, y canta sexy. – Sky rodó los ojos y dejó caer su espalda en el respaldo con brutalidad. No entendía por qué estaba enojada ahora.- ¿Qué es lo que de verdad te molesta? ¿Qué no haya mirado a Elliot o que haya mirado a Cole?
- ¡Ninguna! – Me gritó.
- ¿Ninguna? Claramente estás enojada por algo, pero no me lo dices.- Terminé gritándole también.
- No deberías mirar a Elliot, ¿sí? – Me gruñó.
- ¿Entonces que…?
- ¡Tampoco a Cole! – Me interrumpió antes de decir lo que estaba pensando. Miré hacia el cielo, no entendía qué es lo que molestaba tanto a Sky.
- ¿Por qué a Cole no?
- Porque no. – Cuando Sky quería ocultar algo, siempre lo hacía dando excusas y respuestas sin explicaciones. Nos quedamos calladas un buen rato hasta que estacioné fuera de su casa.
- ¿Te gusta Cole verdad? – Pregunté antes de que Sky se bajara del auto.
- No.- Mentiras, sabía perfectamente cuando Sky mentía porque no me miraba a los ojos.
- Siempre hemos tenido gustos similares pero…
- ¿Pero?
- Pero a pesar de que Cole sea el tipo más sensual que he visto en un escenario, no me importa. Si lo quieres, tienes que decírmelo, yo no iré tras él.
- No irías por él de cualquier forma. Siempre que te gusta un chico sales corriendo y nunca le hablas.
- ¿Quién eres tú para decirme eso? Tú eres igual.
- Yo no salgo corriendo.- Contuve una sonrisa porque Sky seguía seria. Tenía razón, ella tenía mejor control de pánico cuando se trataba de chicos.
- El punto es… No estoy interesada en Cole ¿de acuerdo?
- Yo tampoco.- Sé que eso era algo que ella misma intentaba creerse.
- Bien, ¿punto final entonces?
- ¿Y Elliot?
- ¿En serio tienes que hacer preguntas desagradables? Sabes bien que no. – Esta vez fue Sky quién sonrió.
- De acuerdo, punto final.