El demonio Orthon que lucía apariciones de posesión en Francia, donde vestía elegantemente para seducir a las chicas, las capturaba para destruirlas interiormente y llevarlas a la muerte, junto con su hermana El Ángel de la Muerte. Sus seguidores que formaban el culto Satánico-Masónico del Paladinismo seguía en pie hasta este siglo. Su principal seguidor era Somi, el cual le había dotado de poderes para revelar todos los secretos.
El diseño de Orthon se basaba en ser un tipo alto, duro al tacto, de santa apariencia, un ángel hermosísimo. No podía ser de otra manera, el demonio se viste de ángel de luz, sus esbirros y adoradores por debajo de Somi eran Abyzou, Agrat-Bat-Mahlant, Ammit, Angrbuda, Ausoth, Ardat Lili, Astarté que presidía los placeres, Buduh, Chordeva, Jahi, Jilai ya que eran los mayores, a posteriori continuaban Nina, la Diosa Serpiente, Obyzuth con una voz mortal, Proserpina por supuesto que todos estos eran motes para ocultar su verdadera identidad, en realidad eran empresarios, gente de la vida pública, celebridades, artistar, genios y millonarios. Sekhmet, que se traducía como la diosa de la venganza y Pandora que había venido a la tierra para desatar la maldad en el mundo, eran las demonios reales acompañantes de Orthon para acabar con el ser humano, lo diaban a raja tabla, el ser humano se les hacía el ser más vil y asqueroso que pudiera existir, la peor creación, abominable.