8 Días

Día 2

Samael

Okey, si ella no recuerda más la voy a dejar que se valla, pensaba mientras escuchaba como lavaba el plato Chloé, quizás nunca recuerde nada, seguíamos en la cocina, derrepente algo me pego en la cabeza, pero que mierda, voltee rápido y me pare de golpe listo para atacar, pero la vi a ella asustada y con un sartén en las manos, se lo quite y le sujete rápido las manos, pero que le pasa en la cabeza? Por qué me pego? A decir verdad si dolió, esta chica si que sabe ponerme furioso, es que encerio no lo entiendo por qué se pone así, la traje a mi casa le di de comer y le dije que confiara en mi, pero en vez de eso que hace, me pega en mi casa con mi sartén, cada segundo me enojaba más y sin darme cuenta la estaba apretando fuerte de las muñecas

-No vuelvas a hacer eso- dije, en tono serio, estaba muy molesto, quizás si debí matarla y me pude ahorrar todo esto pensé, la saque rápido de la cocina antes de que agarrara otra cosa y me atacará, la senté en el sillón y con unos pedazos de tela que había en el sillón le amarre las manos y las piernas, así ya no se va a poder mover o escapar, debía marcarle a alguno de mis hermanos para que venga y me ayude, y en eso se me vino a la mente Enara mi hermana, ella si podría ayudarme, busque el contacto en el teléfono y marque

-Sam, hasta que apareces, dime qué se te ofrece- dijo ella, casi no hablaba con mi familia, solo en situaciones de riesgo

-Enara, necesito que vengas a mi casa, es urgente, necesito tu ayuda- dije casi exigiéndole que viniera, voltee a verla y vi como se movía tratando de escapar

-Ok, en unos segundos estoy ahí- dijo y colgó, paso un minuto y ella ya estaba conmigo

-La vas a matar? Oye sabes que no puedes hacerlo cierto? Eres mi hermano y te quiero, pero si le tocas un pelo a Chloé yo misma te mato- dijo ella cuando la vio, yo asentí con la cabeza, se que he hecho daño a gente pero solo a ladrones, gente que si se lo merece y ella no merece que le haga daño, jamás le tocaría un pelo.

-Ya me tiene harto, no quiere hablar y me ataco con un sartén, aparte me apunto con un cuchillo, necesito que la calmes- dije, suplicando a qué accediera, ella solo me vio y fue con ella, yo me puse en la esquina para ver y escuchar lo que le decia

-Hola Chloé quizás te preguntes que haces aquí, quienes somos, como es que sabemos tu nombre y todo eso, además se ve que estás muy asustada, bueno pues creo que falta una presentación, yo soy Enara, y el tonto de atrás es mi hermano Samael, necesitamos que nos digas si recuerdas algo de la muerte de tu padre- cuando Enara menciono a su padre, Chloé empezó a llorar y a mover la cabeza, se calmó un poco pero no dijo nada, después Enora se acercó a su oído y no escuché lo que dijo, ella solo asintió y empezó a hablar

-Ya les había dicho, después de la muerte de mi padre tuve varios recuerdos leves, pero el psicólogo me dijo que eran alucinaciones mías así que ignore todo- dijo ella, todavía llorando, yo quedé sorprendido, que le puedo haber dicho Enara para que hablara? Pero creo que se pudo contestar sola la pregunta ya que segundos después ella le desató los pies, y Chloé siguió hablando

-Si quieren saber eso tienen que ver mi libreta de niña, fue un diario mio sobre todas mis alucinaciones, ese diario está en el despacho de mi padre, pero mi madre es quien tiene la llave para entrar- y diciendo eso Enara la desató de las manos, se puso de pie y le dijo

-Ok Chloé, encerio que agradezco todo, te doy mi palabra de que Samael jamás te hará daño y si te llega a hacer daño sabes que hacer, yo me tengo que ir pero necesito que lo ayudes, cuando todo esto termine, nunca más lo volverás a ver entendido? - dijo mi hermana dándole un abrazo a Chloé, bueno pues ahora tenía que buscar la llave del despacho y buscar la libreta, parecía fácil.

Enara se quedó con Chloé hasta el anochecer en mi casa platicando, comiendo y viendo películas, después se despidió y se fue dejandome con ella, solos por fin.

-Chloe, te puedes dormir en mi cuarto si quieres o en la sala, te puedo dar cobijas y pijama, mañana iremos a tu casa por la llave y por la libreta, la voy a revisar y después de arreglar mi desastre ya no te volveré a ver, ok- dije pero ella solo me ignoro y se quedó en la sala, le traje cobijas y almohadas, espero que esté bien, cerré la puerta y active las alarmas, siempre tenía alarmas en mi casa por si alguien entraba o salía sin mi autorización.

Era ya la una de la mañana cuando fui a verla, estaba dormida, igual que siempre cuando la visitaba, recuerdo muy bien todas las noches que la vi dormir, era lo que más amaba de mi desastre, quizás nunca gane su confianza, pero nunca olvidare este día, creo que debo tratarla mejor, voy a extrañarla después de todo, es una chica muy valiente y fuerte por eso es que nunca le hice daño, jamás le haría daño a ella.

 



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En el texto hay: secretos familares, humor y chistes malos

Editado: 12.10.2020

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