Luciel.
Tan solo me mantuve callada, no sabia que decir, vaya, ni siquiera sabía que estaba haciendo, si estar embarazada de mi jefe ya era una tremenda locura, estar aqui lo era aún más -Debería irme, me siento bastante cansada- Respondí y estaba a punto de irme cuando me tomo del brazo -Espera..Yo… esto es algo nuevo para mi, te pido me tengas un poco de paciencia, estoy nervioso al igual que tu, enterarme que seré padre…ha cambiado todo en mi vida y la ha volteado 360°- Lo mire cálidamente -Lo se, tambien a mi me ha sorprendido bastante, pero lo correcto es hacernos responsables de nuestros actos- Acaricie su mejilla y me dispuse a salir del lugar -Solo cuida bien de mi bebé, de nuestro bebé- Dijo él con un poco de nerviosismo, estuve a punto de abrir la puerta cuando -Prometo que empezare desde hoy a demostrarles que sere lo mejor para ustedes dos- Su voz se escuchaba muy reconfortante y justo ahi sali del lugar.
Me quede en la empresa, era evidente que le había ocultado muchas cosas a quien era casi un padre para mi y ahora, sería el abuelo del bebé que estaba esperando -¿Quien lo diria?, terminarás dando un nieto y un pequeño heredero- El sonrio y yo entre lágrimas hice lo mismo -Yo sabía que eras una pieza fundamental para el desarrollo de esta empresa, pero no que sucederia esto- Y nuestras carcajadas se escucharon en toda su oficina -Mi plan era que él aceptara que le gustas y que le dieras una oportunidad, ese matrimonio que es evidente que ya no se va a llevar a cabo, era para que el acelerará las cosas- ¿Todo esto fue un plan del señor Kim?, esto no puede ser verdad.
Segui platicando algún tiempo con él, pero era evidente que tenia mas asuntos que resolver y era momento de irme, estaba esperando el ascensor cuando senti me tomaron de la mano -¿Joven Kim?- Lo mire sorprendida -De ahora en adelante soy Namjoon o Nam, y no digas nada, me asegurare de que comas bien, ¿que quieres comer?- Pregunto entrando juntos al ascensor que acababa de llegar -Bueno, yo pensaba comer solo ramen y…- Me miró un poco enojado -¿Ramen?, ¿hablas en serio?- Yo solo asenti y el solo negaba con su cabeza -Nada de eso, a partir de hoy cambiaremos tu alimentación por una más saludable, nada de comida chatarra a menos que sea un antojo, a partir de este momento comeremos juntos- El elevador se abrió y salimos de este, no creo sobrevivir sin comida chatarra. LLegamos a un lugar bastante elegante y costoso -Namjoon, no creo poder pagar esto- Lo mire un poco preocupada -No seas tonta, yo pagaré, tu pide lo que quieras- Y me regaló esa hermosa sonrisa que tiene desde que sabe que seremos padres, mire la carta y el platillo más barato es casi del valor de lo que gasto por semana en alimento y transporte -Vamos Luci, el dinero no es problema- Al llegar la mesera el ordeno por ambos, ya que era evidente de que yo seguía completamente indecisa -Se que debí preguntarte, pero programe una cita en el medico el dia de mañana, pasare por ti a las diez de la mañana, no vendremos a la oficina- Lo mire bastante confundida -¿Mañana?, pero mañana te casas y finalmente estaré sola en este lugar y ahora con un pequeño bebé. Mi madre falleció hace unos días y justo mañana llegan sus cenizas, pues no tengo motivo alguno para regresar a Boston- Mis ojos se cristalizaron
Namjoon.
Los ojos de Luci se cristalizaron, ahora me sentía terrible, un insensible y la peor persona del mundo, tome suavemente su mano -Es evidente que ya no habrá boda y que ya no estarás sola, yo cuidare de ti y si me dejas, tambien te amaré- No mentía ni bromeaba con lo que decía, yo cuidaría de ella y la amarilla, es la madre de mi hijo y haría todo lo necesario para que esté bien, intente hacerla sentir un poco más tranquila -¿Que te parece si mañana vamos a la cita para saber juntos como se encuentra el pequeño monstruito y al salir recogemos las cenizas de tu madre y las llevamos al cementerio de aquí de Seúl?- Rio levemente mientras secaba sus lágrimas -¿Monstruito?- Preguntó con una pequeña sonrisa -Si, será un pequeño apodo temporal hasta que encuentre uno mejor- Y ambos reímos, la comida llegó y ambos seguiamos platicando de lo más tranquilos -Y dime, ¿como te sientes?, ¿Bebé no causa muchos problemas ahí adentro?- Ambos reímos un poco -No, realmente todo está muy bien- Sonreí, era lo único que necesitaba escuchar
Luciel.
Volvimos a la oficina, y justo al entrar a la empresa Hwassa se encontraba gritando como loca -Buenas tardes señorita Hwassa- Me sentía bastante avergonzada con ella y no era momento para provocar uno de los muy normales pleitos entre ella y Namjoon -¡Cierra la boca!- Me miró bastante molesta y para ser sincera, ella tenía razón -¿Acaso piensas que no se que te revolcaste con ¡mi prometido!?- Era algo que aún no se sabía por completo en la empresa y todo mundo presto atencion de inmediato -No te permito que le hables de esa manera- La voz de Namjoon era capaz de aterrorizar a cualquiera -Descuida Nam, ella tiene razón- Camine despacio hacia ella, estaba dispuesta a darle una disculpa sincera pero ella estaba a punto de darme un golpe, Namjoon se interpuso y detuvo su mano justo antes de golpearme, los empleados seguían mirando sorprendidos -Que esta sea la última vez que te veo cerca de Luciel, esto fue mi culpa, no la de ella- Soltó su mano haciendo que me posicionara detrás de él -Esto no se va a quedar asi- Y salio del lugar gritando como loca -¡¿Que carajos miran?!, vuelvan todos a su trabajo- Gritó Namjoon tomando mi mano y salimos del lugar nuevamente