Capítulo 14.-

Mi mañana comenzó un poco asqueada -Pequeño monstruito, ¡quiero comer mi desayuno favorito!, y no me dejas hacerlo- Fingí llorar mientras reía, realmente los cambios iban empezando, por lo cual me faltaban tantas cosas por conocer de esta nueva etapa de mi vida -¿Luci, estás en casa?- Se escuchó la puerta abrirse y la dulce voz de Namjoon -Si, intento desayunar unos panqueques con mermelada de fresa, pero bebé no me deja- Reí para meter un poco de comida a mi boca.

Namjoon.

Entre a la cocina justo cuando llegué, Luci se encontraba aún en pijama intentando comer un poco, una porción de los panqueques que estaban frente a ella entró en su boca, y no tardó mucho en devorarlo cuando corrió al baño, inmediatamente la seguí -¿Estas bien?- Sostuve su cabello  -Si, son solo las náuseas matutinas, nada del otro mundo- Me arrodille junto a ella mientras sostenía su cabello, comencé a acariciar un poco su espalda, definitivamente el embarazo es complicado y se ira poniendo aun mas dificil, supongo que debería leer un poco sobre el tema. No podía seguirla viendo intentar comer y regresar cada bocado, le prepare algo más de comer y finalmente el desayuno terminó por completo en su estómago. Al terminar y después de que ella se arreglara, salimos directo a la oficina, llegamos tomados de la mano, lo cual hacía que muchos murmullos se escucharan a nuestro paso, ella soltó mi mano, su mirada bajó, se sentía bastante mal en este momento, y fue algo que realmente me molesto -¡¿Que es lo que miran?!- Pregunte a los demás trabajadores bastante enfadado -Será mejor que todos regresen a sus trabajos- Ordené, para tomar su mano y entrar a la oficina -¿Como te hago entender que tu no tienes la culpa de absolutamente nada?, no debes bajar la mirada ante ellos, no debes ni siquiera sentir vergüenza- Ella tan solo se limitó a asentir, el trabajo seguiría completamente igual, ella seguiría siendo mi mayor ayuda en este puesto, la puerta se abrió, dejando ver una visita para nada esperada -Buenos días señorita Danielle- Salude a la posible nueva accionista de la empresa

Luciel.

Una chica rubia, con figura envidiable entró a la oficina, no era extraño que me sintiera intimidada por tal aspecto -Buenos días señorita Danielle- Su nombre me suena conocido -Buenos días, joven Kim- Y era completamente descarada al coquetear con él aunque yo estuviera justo frente a ellos - He venido aquí a hablar sobres las acciones que la empresa de mi padre comprara- Namjoon se sento en su escritorio, no se si es tonto o solo se hace, pero no notaba lo descarada que la tipa era con el -Claro, ¿sucede algo?- Preguntó buscando unos documentos -Por lo que se rumora, usted ha cancelado su matrimonio con la señorita Hwassa, por lo que en este caso, podríamos realizar la alianza de los dos bufetes jurídicos de otra manera- Y la muy descarada seguía coqueteandole, observe como la tipeja se sentaba en el escritorio tomando la corbata de Namjoon sin importarle mi presencia, aclare un poco mi garganta y me miró de inmediato -Creo que los rumores nunca llegan por completo- Ella se notaba confundida -Él “Joven Kim”- Imite la voz que había hecho al hablarle -No está interesado en comprometerse en este momento- Él solo sonrío -¿Y tu como sabes?- Preguntó la mustia -Porque no está buscando algo ni siquiera similar a lo que tu le ofreces, Namjoon terminó su compromiso porque va a ser papá- Su pálida expresión me daba bastante risa, pero debía ser fuerte y no reir -Asi que lo mejor será que salgas de la oficina y dejes a mi hombre en paz- Quizá fui bastante lejos, pero algo en mí me hacía necesitar aclararle ese punto -Ya escuchó Danielle, las acciones siguen en venta, pero no se cambiará el tipo de oferta- La chica solo se disculpó y salió del lugar -¿Soy tu hombre?- Preguntó con una sonrisa -Llevaré estos documentos a Seokjin- Y tome la primer carpeta que vi para salir del lugar. Entre a la oficina de Seokjin -¿Ocurrió algo?- Preguntó por la manera en la que entre a su lugar de trabajo -Quizá, solo quizá he cometido un gran error- El río por mi reacción, es mi amigo y sabe las frases que digo cuando meto la pata -Ahora… ¿que hiciste?- No podía evitar mirarme mientras su risa limpia vidrios se escuchaba en todo el lugar -Quizá, solo quizá acabo de correr a una chica de la oficina de Namjoon diciéndole que “deje a mi hombre en paz”- Y si, la risa incrementó -Yo solo intentaba correr a la chica, pero se me salio… Intenté no sonar tan obvia, pero ella no tiene porque estar restregandose frente a él… Tampoco es que sienta algo por Namu, dijo Namjoon, digo, el joven Kim… ¡Ya no se ni que diablos estoy diciendo!- Caminaba de un lado a otro en la oficina mientras hablaba y escuchaba la característica risa de Jinnie -Respira un poco pequeña loro- Me miró atento -No es nada del otro mundo- ¡¿Nada del otro mundo?!, obviamente es mi fin, el fin de la novela china favorita de Larisa -Necesito a mi padre- El me miro riendo un poco, ya sabía a quién me refería -El señor Kim morirá de risa al igual que yo- Y no le preste más atención, salí de su oficina de manera inmediata -Se que quizá esté ocupado, pero he pasado la peor vergüenza de mi vida, corrí a Danielle, una de las futuras accionistas por estar coqueteandole, además de que me sentí un poco celosa y cuando me di cuenta salí inmediatamente de la oficina de Namj…- Llegue abriendo la puerta como de costumbre, hablando sin parar y caminando de un lado a otro en la oficina, hasta que me di la vuelta para sentarme en el lugar que era mío cuando trabajaba con él y mire a Namjoon quien se aguantaba la risa -¡¿Porque me pasan estas cosas a mi?!- Y mis mejillas se colocaron bastante rojas -Saldré por un café- Dije ya avergonzada saliendo de la oficina. Llegué a mi cafetería favorita, llamé a mi mejor amigo y justo al mismo tiempo entramos por la puerta -Así que… ¿tienes algo que contarme?- Pregunto Hoseok mirándome fijo -Quizá… Solo quizá- Y fui interrumpida -Cuando comienzas una oración con él “Quizá, solo quizá”, Significa que has hecho algo de lo que me voy a reir, voy a regañarte o voy a querer llorar junto a ti- Y sinceramente tenía razón, reí un poco -Seré breve… Meti la pata de manera enorme- Era algo típico de mi, pero esta vez sí era enorme -Por accidente corrí a una tipa, dije que Namjoon era mi hombre, le conté a Seokjin y se burló, intente decirle al señor Kim, pero no note la presencia de Namjoon y termine avergonzandome por completo, y para terminar, ¡Hoy no hubo galletitas!, ¿sabes lo frustrante que es que no haya galletitas?, aún peor ¡¿Lo horrendo que es que no haya galletitas estando embarazada?!- Grite la ultima parte y todo el mundo volteo, Hoseok comenzó a reír de manera descarada lo cual ocasionó en mi unas inmensas ganas de golpearle con lo primero que pudiera tomar, y como un milagro, frente a mí había un menú del lugar, lo tome y lo lance a su cara y por el movimiento que hizo al asustarse, el término en el piso -No te rías de una embarazada hormonal- Y rei esperando que él se levantara del piso.