A cambio de ti

tengo la esperanza de encontrar a mi hermano

Narra Dante

Me adentro en los profundos anhelos que despierta en mí la posibilidad de hallar a mi hermano perdido. Cada día que pasa, la incertidumbre y la desesperación se entrelazan con una chispa de esperanza que se niega a extinguirse. Recuerdo los momentos compartidos, risas y aventuras vividas a su lado, y eso me impulsa a seguir buscando sin cesar.
A medida que exploro nuevas pistas y caminos, la imagen de su rostro se mantiene vívida en mi mente. Me encuentro en un viaje tanto físico como emocional, donde cada paso que doy está impregnado de la intención de reunirme con él. La búsqueda se convierte en una travesía forjada por los lazos de la familia y la promesa de que jamás dejaré de encontrar a mí hermano

Se despliegan mis esperanzas entre los recuerdos y las posibilidades, y aunque enfrento obstáculos y desánimos, mi determinación se fortalece con cada pequeño indicio que se presenta en mi camino. La historia de mi búsqueda no solo se trata de encontrar a mi hermano, sino también de descubrir la fuerza que reside en el amor fraternal, una fuerza que me sirve de guía en este sendero lleno de dudas

Sostengo firmemente que debo mantener una actitud positiva a pesar de la oscuridad que me rodea. Intento conservar la calma y pensar con claridad, pero en lo más profundo de mi ser siento que algo no está bien con mi hermano. Esta inquietud me genera preocupación y miedo. Es una señal clara de que debo salir en su búsqueda con todos los recursos que tenga a mi disposición.

No se trata únicamente de una corazonada. Es como un murmullo persistente que resuena en mi pecho, como si un hilo invisible que me conecta con Elian estuviera tirando de mí con una urgencia inquietante. Hay una sensación en el ambiente, algo intangible que no logro identificar, pero que me impide encontrar la paz y me roba el sueño.
A veces me encuentro reflexionando sobre la posibilidad de que él también me esté buscando. Me cuestiono si, en algún escondite del vasto mundo, aún guarda en su memoria los momentos en que entrelazamos nuestras manos antes de que la noche nos envolviera. Recuerdo claramente cómo le prometía que nada podría hacerle daño mientras yo estuviera a su lado, siendo su refugio y su protección. A pesar de que ahora nuestros caminos se han separado y se presentan llenos de incertidumbres, tengo la firme convicción de que cuando finalmente nos volvamos a encontrar, todo este sufrimiento que hemos experimentado habrá valido la pena.
Justo ahora estoy tomando la fotografía entre mis manos, esa imagen que he contemplado innumerables veces a lo largo de los años. Sin embargo, en esta ocasión, no me brinda consuelo alguno. Al contrario, me impulsa a tomar acción y dejo la foto de mi hermano en la mesita de noche.

Me levanto de la cama y empiezo a recorrer la habitación, caminando de un lado a otro. Cada paso que doy resuena en mi interior como una promesa imborrable. Ya no puedo permitirme esperar más señales del destino. No puedo seguir aferrándome a la creencia de que el tiempo, por sí solo, solucionará todas mis inquietudes y problemas.

Mañana estaré dispuesto a hacer todo lo que sea necesario.
Me comunicaré con todas las personas que necesite contactar y haré las llamadas que sean pertinentes. No me importará si debo volver a acercarme a aquellos que me cerraron las puertas en el pasado.

Me han comentado que mi hermano está atravesando una etapa complicada en su vida. Dicen que ya no es el mismo niño risueño que solía ser, aquel que corría alegremente tras de mí, creando juegos y soñando en mundos llenos de fantasía. Esta situación me parte el corazón. La tristeza que siento se instala en un rincón profundo de mi ser, un lugar que no puedo alcanzar con mis manos. Es un peso abrumador, como si yo mismo estuviera en su lugar, experimentando y sintiendo el dolor que él está pasando.

Hago todo lo que está a mi alcance para que regrese conmigo, porque me importa mucho su bienestar y lo tengo muy presente en mi corazón.
Porque no hay un solo día en que no lo tenga presente en mi mente, en mi pecho, en los recuerdos que arrastro como un segundo corazón.

Existen noches en las que me resulta imposible encontrar el sueño, y en esos momentos me asalta la duda de si él también estará desvelado, sintiéndose abandonado y cuestionándose por qué nunca volví.

A pesar de que no lo sepa, y de que jamás escuche mis palabras, yo le dirijo mis pensamientos. Le converso en mi mente, en cartas que jamás tienen destino, en los silencios que me envuelven y me atrapan cuando todo a mi alrededor se apaga.

Me quedo en un profundo silencio al revivir en mi mente aquella noche, cuando me encontraba escondido bajo la mesa.

La promesa que hice en ese entonces, siendo aún un niño, sigue resonando en mi interior. Sin embargo, en este momento, ya no es simplemente una promesa propia de la infancia. Se ha transformado en un compromiso auténtico, sólido y lleno de significado, un pacto que guardo con reverencia y que considero sagrado.
Pero una voz profunda y serena en mi interior me habla con una tranquilidad palpable, pero al mismo tiempo transmite una gran intensidad. Me advierte que el momento del reencuentro se aproxima, que tendré la oportunidad de verlo de nuevo. Sin embargo, esa misma voz me susurra algo que resulta imposible de ignorar: él no será el mismo niño que abracé la última vez. Su cambio es inevitable y palpable.

Las transformaciones aunque él llevará consigo una carga de traumas psicológicos.

A pesar de esto, estoy decidido a acompañarlo durante todo su proceso de sanación. Me comprometo a asumir el papel del hermano mayor que siempre he querido ser para él, aquel que no escapa, que no juzga, que no se rinde.

De repente siento profundamente sus sufrimientos.
Estoy preparado para acoger su historia, sus heridas, su proceso.

Y aunque el camino sea extenso, estaré presente. Siempre. brindándole mi apoyo y comprensión incondicional a lo largo de este camino difícil pero necesario.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.