A Donde Vayas

Segundo Día de Exploración - Parte IV

No voy a entrar en detalles sobre lo que pasó cuando caímos por el peñasco con esa chica Lisseth. Me siento tan avergonzado que ni siquiera quiero acordarme de eso...

La herida en mi mano, el túnel, la cascada, el dibujo... Me pone los pelos de punta.

No quiero recordarlo; en su lugar, haré memoria de lo que sucedió después de eso, cuando por fin nos reencontramos con Ron, Valerie y el viejo. Ron y el guía estaban al borde de las lágrimas, mientras que Valerie no escatimó con el tiempo perdido y se pegó a mí inmediatamente. Después de todo, había ganado la apuesta de hace rato.

Tuvimos que explicar qué fue lo que sucedió mientras estuvimos desaparecidos y el cómo me lastimé la mano. Intenté omitir las partes de la cascada porque no creí que fuese apropiado hablar sobre eso... Supongo que la chica Lisseth pensó lo mismo que yo.

Antes de darme cuenta, estaba andando de la mano con Valerie, saltado por los techos de las ruinas por encima del resto. Estaba sucediendo otra vez... Intento pensar en otra cosa e ignorar el hecho de que solo hoy he estado en contacto con más chicas que durante toda mi vida, pero ahora siento una presión extraña en mi cuello.

¿Será así como se sienten los tipos como Billy?

⎯¿No te molesta que estemos así? ⎯Para ese punto, ya nos habíamos sentado en la ruina más alta, para contemplar el mundo tan pequeño pero tan grande que teníamos bajo nuestros pies⎯. Creo que estoy siendo muy confiada contigo...

⎯¿Estás enamorada de mí?

⎯¿Ah?

⎯Se supone que Ron es tu compañero y amigo, pero lo tratas mal y lo insultas cada que tienes oportunidad; evitas contacto directo con la chica Lisseth porque es posible que la veas como un obstáculo, y tampoco pareces estar interesada en el viejo; solo te la has pasado pegada a mí desde que nos conocimos, así que ⎯quizá solo estoy sacando conclusiones apresuradas basándome en la información obtenida hasta ahora, pero si no le pregunto, seguirá molestándome y eso será un problema⎯... Te lo preguntaré una vez más: ¿estás enamorada de mí?

¿De dónde viene esa pregunta así de repente? No ha sucedido nada que nos conduzca a esa conclusión, así que es como si solo se me hubiese ocurrido... Pues no es así.

El amor es un tema tabú para la mayoría de los jóvenes cuando no se lo trata como broma, así que hablar de eso seriamente aumenta la tensión y el rechazo hacia el que sugirió el tema. Lo digo por experiencia.

Mi plan fue hacerle esa pregunta con la intención de que me vea como un bicho raro o un tipo desesperado por encontrar pareja y se alejara de mí. Es psicología. Esta es mi manera de hacer que me deje en paz y pueda seguir disfrutando de más paisajes hermosos para dibujarlos.

Así es; la razón por la que le pregunto esto de la nada es para que deje de relacionarse conmigo. No es que me desagrade, pero será mejor que se separe de mí antes de que sea tarde. Ella no quiere conocer a alguien como yo.

Hubo un silencio desquiciado y ella evitaba mirarme a los ojos. Lo sabía; piensa que estoy loco y que veo cosas donde no las hay. Solo falta que me diga que estoy equivocado y podré seguir con mi vida... Solo di que me equivoco, por favor. Solo di eso.

⎯Bueno... Tal vez un poco... ¿Te enojarás si digo que sí?

⎯...

Así es; mi plan fracasó.

⎯Estás mintiendo, ¿cierto?

⎯¿Qué pasa? ¿Esperabas que dijera que no? ⎯Habla como si se estuviese burlando de mí. Maldita sea⎯. ¿Por qué te sonrojas? Eres muy interesante... Supongo que te pasa seguido, ¿no? Que alguien se enamore de ti.

⎯... ¿Cómo crees?

⎯¡Es en serio! ⎯retrae su pierna derecha, abrazándola y acurrucándose sobre ella⎯. Sabes, estoy muy acostumbrada a que los chicos me busquen y me sigan a todos lados. Me he aprovechado de eso algunas veces, pero contigo es... No sé, es diferente.

⎯¿Y un resumen?

⎯He tratado de llamar tu atención todo este tiempo, y aunque estás conmigo, tú solo pareces interesado en tus dibujos, como si yo no existiera, y eso me vuelve loca...

La chica Lisseth dijo algo parecido... Se siente incómodo.

⎯¿Dices que estás supuestamente enamorada de mí porque quieres mi atención? Eso es ridículo. Además, nadie se enamora en un día.

⎯¡Obvio no! Cuando te conocí, pensé que eras de esos que fingen depresión y quieren que todo el mundo los vea, pero ahora noto lo diferente que eres. Nunca había conocido a alguien tan único como tú... Tienes toda esa aura misteriosa alrededor de ti que me obliga a querer conocerte más. Hay pocos que no quieran estar conmigo todo el tiempo, y eso me llama la atención de ti.

⎯¿Qué me dices de Ron? Él está todo el tiempo persiguiéndote. Si eso no es algo que te guste, ¿por qué no lo alejaste de ti antes?

⎯Esa es... Una historia aparte ⎯suspira profundamente y luego regresa sus ojos a mí, como una niña esperando un premio⎯ ¿Quieres saber?

⎯¿Tienes otros planes?

⎯Hace tiempo que él y yo nos conocemos. Fue en el kínder. Mi primer día nadie quiso jugar conmigo, excepto Ron. Él llegó acompañado de otro niño y ambos me hicieron compañía.

⎯Suena adorable.

⎯¿Verdad? ⎯soltó una risa tímida y miró al suelo⎯. A partir de ese momento nos hicimos amigos. También estaba ese otro niño...

⎯¿Quién?⎯Lo conocí por poco tiempo. Jugábamos mucho en las tardes, pero nunca me dijo su nombre. Una tarde estábamos en el patio como de costumbre, y entonces me dio este papel ⎯de su bolsillo saca una hoja manchada y un poco rota y me la entrega.

Como era el dibujo de un niño, la calidad no estaba garantizada, pero era mejor de lo que esperé; al menos el contraste de colores estaba muy bien trabajado.

No era algo muy complejo; se trataba de un niño recostado en un cerro verde e infinito, bajo un espléndido cielo estrellado con muchísimo color. No eran solamente unas cuantas estrellas nada más, había varios intentos de galaxias, planetas e incluso manchas que parecían nebulosas. Era un buen dibujo para ser de un niño.




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