──── MSN Messenger ────
Gaby ♫ Everytime Britney dice:
nos vemos el lunes! q la pases lindo :)
☽ Selene (◡̀_◡́҂) Dibujo y resisto ʕ•́ᴥ•̀ʔ se ha desconectado
Hanna ✩ Expecto Patronum! dice:
bueno, y qué onda el resto?
qué planes tienen para el finde?
Rodri [no me jodan] dice:
ah, ¿ustedes hacen planes?
hay que dejar que las cosas fluyan :P
NickShadow dice:
yo me quedo en casa
voy a mirar algo seguro
Gaby ♫ Everytime Britney dice:
yo también me quedo
como siempre jaja
NickShadow dice:
es que vos sos chiquita para salir! ;)
Fede ♪ No Se Si No Me GuStA mAs QuE eL rOcK dice:
también se pueden hacer cosas a la tarde, eh!
no todo es salir a la noche
por ejemplo yo mañana me junto con amigos en la plaza
no sé si voy a llegar para conectarme
Juampi | keep it real dice:
claaaaro
yo tengo campeonato el finde
no creo que me conecte tampoco :(
Hanna ✩ Expecto Patronum! dice:
(U) tenemos varias bajas se ve
yo este finde no salgo
a menos que fluya un plan, como dice Rodri :P
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Rodrigo no quería ni pensar en el fin de semana: el sábado volvía Ricardo, su padre, del viaje de trabajo que lo había tenido lejos en las últimas semanas. Tenían una relación bastante distante, sobre todo desde que su mamá había muerto de un cáncer que la había consumido rápidamente, cuando Rodrigo y su hermana todavía iban a la primaria.
Ricardo tenía un puesto muy importante en un banco, y viajaba mucho por toda Latinoamérica, por lo que siempre había estado poco en su casa. Durante la crisis de 2001, mientras todo se venía abajo, ellos habían aumentado su riqueza. Rodrigo nunca había pensado demasiado en eso, lo había naturalizado, pero a medida que fue creciendo empezó a atar algunos cabos y escuchar algunos rumores.
Se decía que los ingresos de su padre no venían solo del puesto en el banco, sino que también era testaferro de algunos políticos que habían sacado una buena tajada en los 90, y habían logrado esquivar la caída en 2001. Rodrigo no quería saber nada de todo eso, elegía una ignorancia voluntaria y aprovechaba todos los privilegios que la plata podía darle.
Pero todo el dinero del mundo no había sido suficiente para salvar a su mamá. Desde entonces, Ricardo había seguido viajando y quien los había criado había sido Rosi. Al principio trabajaba con cama adentro, las 24 horas con ellos. Pero cuando se hicieron un poco más grandes, ella había empezado a ir durante el día, y durante la noche se quedaban con Carlos, que oficiaba de chofer y un poco de seguridad privada.
Así habían vivido hasta ese momento, en que a Rodrigo le quedaban unos meses para terminar la secundaria, y aún menos tiempo para cumplir 18. No sabía bien qué iba a hacer después del colegio, pero sabía que quería irse.
Los sábados solía levantarse tarde y aparecía por el comedor solo para despedirse de Rosi. Pero ese sábado ella le golpeó la puerta a las 10 porque su papá ya estaba en casa y esperaba poder desayunar con los hijos.
Le costó mucho levantarse, pero después de un rato lo hizo. Se puso un short de fútbol, se lavó la cara y los dientes, se mojó un poco el pelo y fue al comedor. Sentados a la mesa, que rebosaba de facturas, tostadas, jugos e infusiones, ya estaban su hermana, su papá y Teté, la novia de su papá. Llevaban un par de años juntos, pero ella casi no tenía relación con Rodrigo y Victoria.
—Bueno, se dignó a aparecer el señor —dijo Ricardo en cuanto lo vio.
—¿Cómo andás, pa? —dijo Rodrigo, dándole un beso frío a su papá y otro a Teté.
—Acá estamos, contentos de volver a casa por unos días. Esta semana tienen libre ustedes, ¿no?
Era usual que las escuelas bilingües les dieran una semana de vacaciones de primavera a los estudiantes en septiembre, y ese año había tocado en la última semana. Rodrigo no se había dado cuenta de que justo era la semana en que volvía su padre.
—Ay sí, papi, por suerte tenemos esta semanita para descansar —dijo Victoria, que siempre era muy zalamera con el padre, aunque Rodrigo sabía bien que tampoco lo soportaba.
—Estaba pensando en que capaz podíamos hacer algún viajecito... —dijo Ricardo, untando una tostada con mermelada.
A Rodrigo la propuesta le pareció malísima, y aunque no dijo nada, todos pudieron leerlo en su cara. Igual lo ignoraron y se pusieron a planificar posibles destinos para el viaje de primavera. Cuando terminó de desayunar, se levantó y se fue a su cuarto sin emitir palabra.
Estuvo un rato tirado en la cama pensando en las pocas ganas que tenía de hacer ese viaje, y fantaseando con la idea de no ir y quedarse toda la semana solo en casa.
Pasó el resto del día encerrado. Almorzó en su habitación porque Ricardo se había ido a llevar a Teté a su casa y se había quedado ahí (gracias al cielo ella nunca se había ido a vivir con ellos, y eso hacía que su padre estuviera la mitad del tiempo afuera). Después jugó en la computadora hasta que se hicieron las seis y se conectó, pero Hanna no mandó solicitud para armar el grupo.
Pasaron unos minutos y nada, aunque veía que estaba conectada, así que decidió escribirle.
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Rodri [no me jodan] dice:
te fluyeron planes que no armaste el grupo? :P
Hanna ✩ Expecto Patronum! dice:
naaa, es que estás conectado solo vos y Nick
y ni ganas de hablar con él
Rodri [no me jodan] dice:
ah, bueno, gracias ¬¬
Hanna ✩ Expecto Patronum! dice:
pero con vos la mejor!
qué andás haciendo?
Rodri [no me jodan] dice:
nada, aburridísimo
me salvarías si charlamos un rato ;)
Hanna ✩ Expecto Patronum! dice:
ah bueno el tempano empieza a mostrar sentimientos!
Rodri [no me jodan] dice:
jajaja que decis si yo soy un gatito u.u
Hanna ✩ Expecto Patronum! dice:
un gatito arisco, te acercás y te araña :P :P