C A P I TU L O. 25

-Como te sientes papa- le pregunte a mi padre que gracias a Dios había regresado a casa después de que lo mantuvieron una semana en observación para asegurarse de nada estuviera mal con el y su cerebro, afortunadamente no le paso nada grave, solo tendrá que tomar algunas sesiones  para volver activar los músculos de su cuerpo. 

-ya me siento bien, aun no entiendo por que no has vuelto a la escuela estas perdiendo muchas clases- me dijo 

-no volveré hasta que me asegure que esta bien- le dije 

-pues mírame bien ya me siento mucho mejor y los mismos doctores han dicho que no tengo nada de malo, a excepción de que estoy lisiado- 

-papa!!, sabes que no es permanente- le dije 

-aun así estoy lisiado- me dice haciéndose el gracioso 

-basta papa no digas eso- le dije acostándome a su lado en la cama 

-como te ha ido en la escuela- me pregunta cambiando de tema 

-el tiempo en el que estuve me fue bien, me encargan algo de tarea pero nada que no pueda manejar, además conocí mucha gente en las diferentes clases que tengo- le digo 

-eso es grandioso, tienes alguna clase con tu prima- me pregunta

-no tenemos clases separadas-

-que mal seguro les hubiera encantado tener por lo menos una clase juntas- me dice 

-si nos hubiera encantado- le dije

-Luke y las chicas habían estado triste cuando te fuiste- me dijo 

-si lose, en las mañanas despertaba con mensajes de ellos en mi celular- le digo sonriendo recordando lo maravilloso que son mis amigos 

-venían muchas veces a la semana para cenar con nosotros-  me dijo 

-no tenia ni idea, hablare con ellos para que no los molesten- le dije 

- no nos molestan después de todo los conocemos desde hace mucho tiempo- 

-esta bien no les diré nada- le dije sonriendo y en eso unos golpes en la entrada de la habitación sonaron y mi prima entro por la puerta 

-hola venia a ver como te encontrabas- le dijo y se sentó en los pies de la cama- 

-me encuentro bien no necesitan preocuparse, ahora que las tengo aquí juntas quiero decirles que he notado que no son tan unidas como antes y antes de que me interrumpas Alicia lo he notado y no les preguntare que ocurrió por que ustedes son adolescentes y era obvio que alguna vez iban a pelear, solo les quiero decir que sea lo que sea que halla pasado entre ustedes se que lo superaran y se harán mas unidas justo como pasaba cuando eran pequeñas ¿lo recuerdan?- nos dice sonriendo con nostalgia visible en su mirada 

-ustedes solían pelearse por quien tenia el primer turno al jugar conmigo pero al final del día las llevaba a tomar un helado en su tienda favorita y terminaban siendo mas unidas que el día anterior, ustedes crecieron como hermanas y no me gustaría verlas separarse después de que han creado tantas memorias juntos,  después de que salí del hospital me sentí tan agradecido con la vida al tener una tercera oportunidad de vida, el primer pensamiento que cruzo por mi mente cuando desperté fue el de tener que decirle a mi familia que la amo, así que teniéndolas a ustedes dos juntas se los diré una vez mas, las amo, las amo mas que a la vida y son lo mejor que me puso haber pasado, tu Elizabeth sabes que te quiero como una hija y me duele en el alma el saber que no pudiste conocer a la maravilla de padres que hubieras tenido, cuando ocurrió el accidente me propuse hacer que tuvieras una buena infancia y quiero pensar que lo hice bien, así que las amo y quiero que lo sepan estoy orgulloso de lo que son ahora, unas jóvenes inteligentes, bellas y llenas de luz- nos dijo y para este punto mis ojos tenían lagrimas acumuladas

Que hija no quiere escuchar a sus padres decir que están orgullosos de ella, sin duda tengo a los mejores padres que pude haber deseado. 

-también te amo, y en verdad hiciste un buen trabajo- le dijo Elizabeth mientras se acercaba a abrazarlo 

-no me darás un abrazo Alicia, soy el mejor papa del mundo- me dijo haciéndome sonreír entre las lagrimas 

-te amo- le dije 

-yo también- me susurro

-que lindo momento- escuchamos una voz por detrás y claro que si eran mis amigos sin casa, aunque mentiría si dijera que no me gusta que estén aquí. 

-Que hacen aquí no se supone que tienen clases- les dije 

-no nos podríamos perder este bello momento, eso y la escuela termino hace una hora, en fin también lo queremos - dijo Lidia a la vez que se tiraba encima de nosotras y mi padre 

-Lidia quítate, pesas mucho- le dije 

-ay que amargados - dijo después de que todos nos quejamos de lo mucho que nos aplasto, a pesar de ser chica valla que nos aplasto. 

-te espero abajo estamos todos aquí te llevaremos a comer algo antes de que te vuelvas a ir- me dijo 

-aun no me iré, faltan unos días- le dije 

-no importa, tómalo como una semana entera de despedida- me dijo y se fue bajando por las escaleras

-bien ya la escucharon saldré con los chicos, volveré mas tarde, adiós papi- le dije abrazándolo por ultima vez 

-adiós, ve con cuidado y avísale a tu mama que te vas- 

-claro, adiós- le dije y me pare caminando hacia la puerta pero antes de salir me detuve y no sabiendo si me arrepentiría o no pregunte en voz alta. 

- ¿quieres venir con nosotros?, ¿Liz?- 

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