3-Dimas

Dimas recibe con abrazos a un Caín cansado y con algunos secretos, ahora sabe lo que paso en ese viaje, así que como dicen, la pelota está en la cancha de Dimas. ¿Qué pasará?

I

—Señor Dimas ¿cuándo llegará el señor Caín?

—Aun no sé. Román ha mandado noticias, pero solo sé que Lester está moviendo cosas a una habitación, tal parece que vienen con alguien.

—¿Será que traen a la madre y al mocoso?

Dimas escuchó a Félix atrás de él y solo se preocupó más. Lester no había dicho mucho y Jack parecía un poco tenso.

—Solo espero que estén todos bien.

—Claro que sí, Dimas, deja de molestar tanto. Evan ya dijo que llegarán pronto.

—Hay algo que aún no puedo evitar pensar, Félix. ¿Para qué están haciendo arreglos para esa habitación?

—¿Ya la viste? ¿Cómo está? ¿Qué tanto esconden Lester y Jack?

Dimas negó, Félix era demasiado quisquilloso.

Las llamadas de Caín eran cortas y a veces tenía ruidos de fondo, el sonido de gritos y chillidos eran más seguidos. Pero también en algunas videollamadas se veía a Román con cosas de bebés, así que Dimas pensó que Román era el encargado de la mujer y el niño. A Dimas le preocupaba el niño, que este fuera más pequeño de lo que pensaba. Solo esperaba que la madre del niño estuviera bien y pudiera estar sana y segura. Dimas también pensaba en cómo ayudar a esa mujer. Le pediría a May que le ayudara a buscar algún trabajo para ella y una guardería para el niño.

—Señor, el señor Caín llamó, ya vienen en camino, estarán en unas horas.

—Bien. Le diré a la ama de llaves que nos ayude con la cena, Evan y Caín estarán hambriento y la dama también.

—¿El niño?

—Oh—. Dimas miro como Lester miro a Jack y éste solo se encogía de hombros. Dimas no les dio ningún pensamiento a esos dos, seguro que Lester estaba emocionado por la llegada de los demás. Así como él con el mismo Caín.

—Señor Dimas, si gusta la ama de llaves puede hacer algo suave para el niño, le puedo decir a Colby también, descanse por ahora.

—No Jack, yo ayudare a la ama de llaves. Tú y Colby vayan a estar tranquilos por ahora, sé que ayudaron a Lester con la nueva habitación. O por lo menos tú Jack, Colby puede ayudarme.

—¡Claro que sí, Sr. Dimas!

-II-

Caín tenía sus manos sujetando al pequeño niño de cabellos oscuros y ojos azules, el cual estaba bien despierto sentado en sus piernas, el niño empezaba a hablar con palabras cortas y la que más sobresalía era mamá, el idioma materno del niño era bueno para la edad del menor que apenas ni llegaba al año y medio, pero con las horas y nuevas caras el pequeño pasaba entre los brazos de Kit y Román, quienes hablaba otro idioma para el niño, el cual se ponía irritado cuando no entendía algo.

Los guardaespaldas ya estaban dándole todo, como si fuera su nuevo señor, incluso Caín escuchó a Kit llamarlo joven amo, eso hizo que el pecho de Caín se estrujara, el bebé era toda una bola de energía y luz en cualquier lugar que estuviera. La madre estaba en lo correcto con el apodo al niño.

—¿Estás bien?

Evan llamo su atención y lo miró con ojos fríos.

—No sé qué dirá Dimas, será ¿qué piensa que es mucho?

—Le prometí que su hijo estaría con una familia que lo amara, si tu amante no quiere o no puede aceptarlo, buscare a alguien más, tengo conocidos que buscan niños para parejas que no pueden tenerlos y se aseguraran que estén muy bien.

—¿Los venden?

Evan miró a su hermano pequeño y sonrió, su conocido era un hombre que una reputación poca ortodoxa, pero sabía que la esposa de él lo tenía en línea.

—No, sé que la señora de él se encarga de una fundación de adopción, es legal. Es su negocio legal, el que paga impuestos y presentan estados financieros. Se que tiene otros negocios que no son nada legal, pero la señora quería tener un trabajo así que él decidió apoyarla en esto.

—Hablare con Dimas, no quiero que el niño se vea sometido a otro cambio, con todo lo que paso estos días.

Evan asintió.

—Félix y yo nos quedaremos en el hotel, me llevare al niño para que hables tranquilo con tu amante.

Caín asintió.

—Dejare que Kit se vaya contigo ya que se lleva bien con el niño.

Con eso dicho Evan y Caín dieron por finalizada su conversación.

-III-

Dimas había recibo la llamada de Román sobre que ya estaban aterrizando y que el señor Caín llegaría con Evan y los demás guardaespaldas. El primero en estar feliz fue Lester al saber que sus amigos estaban sanos y salvos. Félix se vio confundido cuando escuchó de su mano derecha que Evan estaba llamando al hotel para que él y todos los suyos estuvieran moviéndose a dicho hotel.

—¿Por qué?

—Señor Félix, por favor, solo sé que el señor Evan quiere que se mude al hotel.

—No lo entiendo, pero está bien. Vamos. —Se despidió de Dimas y de Lester solo porque estaba ahí, si no, ni lo hubiera visto.