A segunda vista

Capítulo 6

Aquí vamos, denle amor a los dos capítulos 🌚💓, yo sé y ustedes saben que extrañabamos el choque de personalidad…

Primer aviso; últimos capítulos de la historia🥺

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Jolie'

«Debes estar pensando que estoy loca, no sabía dónde más contactarte y decidí dejarte cartas aquí, un simple E-mail no bastará ahora que mis padres me han dejado ir con Alessandro a Alemania, ¡Jolie estoy saltando de emoción! No sé cuál de toda mi ropa colocar en el equipaje, estoy entre mis conjuntos finos o los sexys. Ay no, ¿Cómo se borra esto? Estoy bromeando, en este instante acabo de abordar, Aless convenció a Isaí de venir, no estoy segura si debería contarte esto, lo último que quiero es inquietarte, pero lo veo muy mal, está muy delgado, triste, cansado, apenas come desde que te fuiste y es verdad, el amor no mata, pero sí destruye»

«¡Amo este departamento! Tiene una vista increíble de la ciudad, los chicos han salido a una cita médica para Isaí y he decidido salir por mi cuenta, las personas son cálidas y el clima frío»

«Demián al parecer odia más a Frieda que a ti, si, hoy nos visitó, así que decidí esconderme en el segundo piso mientras ella trajo a Fri a recibir a su tío, pero cuando escuché que el cachorro se alteró quise ayudarla y me deje ver… No le gustó nada verme, lo positivo vi a Isaí sonreír cargando a su sobrina»

«¡Iré de viaje con Aless, haremos una escala por las ciudades principales de Europa, Isaí tiene una nueva enfermera que cuidara de él en nuestra ausencia, cuidado, la nueva enfermera es guapa»

«París es más lindo y grande de lo que imaginé, su magia es tal como lo decía Aless, hay cosas que no se pueden describir, no hay que hacerlo, hay que vivirlo»

«He probado los labios de Alessandro, fue una descarga de adrenalina que nos ha dejado boquiabiertos, no malinterpretes… he cumplido una ilusión y con ello llegó una desilusión, no sentí las chispas y fuegos artificiales que creí se sentirían, Alessandro es un sueño y lo que siento por él no es real.»

«Hemos decidido intentar algo, él cree que lo que siente por mí es diferente a lo que ha vivido antes, no lo culpo, me veo y lo comprendo»

Sonrío de imaginar a mi niña feliz escribiendo esto último.

«Hemos decidido dar un paso más, estoy nerviosa, estoy viviendo tanto que me da miedo despertar»

«He sentido punzadas en el pecho, papá dice que es por el cambio, que seguro estoy viviendo muchas emociones, imagina… Despierto con Alessandro Livingstone, es como estar dormida y despertar a seguir soñando.»

Ha llegado el lunes, no he podido dejar de leer los E-mails de Abi, así continúe durante el vuelo, y el trayecto por carretera hasta Loreto. Al menos eso me distrajo de las miradas grises que llevaba a cada lado lanzando preguntas a por mayor sobre mí hasta bajar del taxi en el pueblo.

Estando ahí Isaí insistió de manera inquietante si yo conocía algo cerca donde pasar estos días, me las ingenié para llevarlo al centro del pueblo y no a las afueras, seguro quería ir a casa de mis padres, no se le cumplira, aquí no encontramos gran cosa, es muy limitado y sin atracciones turísticas no tiene la capacidad de sustentar un hotel. A la otra punta de las afueras nos informaron que rentan una pequeña casa amueblada con lo básico, así que es sí o sí.

Pagamos por completo la estancia, me da un poco de miedo, estamos a un kilómetro de Loreto y prácticamente a la intemperie. 

Ventajas el jardín es enorme y frente pasa una laguna.

Cuenta con tres habitaciones, dos individuales, una matrimonial, un juego de sala incompleto en el corredor, un intento de cocina integral que gracias al cielo tiene agua potable y un solo baño.

— ¡Quielo está, mami!

Grita Abi saltando sobre la cama de una de las habitaciones individuales con emoción mientras Isaí revisa que no haya algún intruso en el resto de la casa y vuelve con nosotras.

— De acuerdo mi amor, ahí dormiremos ambas y el señor Vance puede tomar la grande.

— Lo justo es que ustedes que son dos tomen la principal, cómodamente puedo estar en una de las individuales—indica despreocupado revisando el estado en el que llegaron las cámaras que trajo consigo.

Me dirijo con Abi a nuestra habitación, en minutos nos instalamos, no traemos gran cantidad de cosas y a pesar de que está es la habitación principal es bastante pequeña.

Salimos y lo encontramos en la misma posición, pero ahora checando las lentillas.

— ¿Vamos Ishí?—pregunta Abi atrayendo su atención. 

— Si, vamos—responde él comenzando a guardar todo.

—¿A dónde van?—pregunto.

— No sé, ella acaba de invitarme, igual y debemos comprar víveres para estos tres días. Dudo que haya algún servicio de comida rápida en kilómetros.

Él se pone de pie y guarda su equipo en estuches especiales los cuales lleva a su habitación temporal.

Caminamos al menos un kilómetro para llegar al pueblo, hay cincuenta casas cuando mucho, la mayoría son pequeñas y de familias económicamente estables. 




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