A tí, que me has roto el alma

La curva del olvido

No pensarte
Resultaba costarme noches de desvelo
En las que sin duda,
Si lo hacía.
Te pensaba hasta llorar de impotencia.
Los días pasaban melancólicos.
Nostálgica la lluvia que visitaba mi vencindario cada tarde.

Mis amigos de fiesta cada noche.
«El chico enamorado que perdió su diversión por ello » 
Decían mis amigos.
Me invitaron en varias ocasiones,
No asistí a ninguna
Porque sabía
Que estarías allí.

«La superas mirándole y viendo que
Por más que lo intentaste, 
No fuiste nadie en su vida.»
Era la frase que más solía oír.
Pero me negaba a hacerlo,
No por ti, no por la perdida relación,
Sino por mis sentimientos
Tú tan bien.

No consideraba justo que 
Yo aún sintiendo cosas por ti,
Doliéndome hasta el alma si te veía con otro
O haciendo eso que dijiste que nunca harías.
Tú siguieras tu vida
Aparentando que era perfecta.
Digo aparentando
Porque de eso tratas, de aparentar que vas bien
Cuando en realidad te desmoronas sola cada noche.
Pero, me dolía que te destruyeras de esa manera.
Porque yo no te importé nada,
Pero yo si me seguía preocupando demasiado por ti, por lo que estabas construyendo.
Una vida de mentiras
De falasas amistades, de esas
Que hoy toman contigo 
Y mañana te traicionan.

Cada día te veía más destruída.
Y yo así no te dejé.

 




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