Salgo de las primeras clases, mi amiga me acompaña a la cafetería, compramos unos refrescos y nos sentamos a comer.
–¿Qué te pasa? Has estado callada durante el día–Me decía Diana mientras abría su refresco.
Por más que quería contarle sobre lo que me estaban obligando a hacer en mi "otra vida", no podía hacerlo ya que sería peligroso que más personas sepan ésto, sobretodo no quisiera poner en riesgo a una de las personas que más quiero.
–Ehhh, no...no me sucede nada, todo está bien–Respondí mientras ocultaba el rostro.
*¡Vamos díselo!*–Me decía la voz en mi cabeza.
–¡Ay por favor!, te conosco bien, sé que algo te pasa, solo...dime– Junté mis labios, he intenté persuadir la conversación, pero por más que intenté, mi amiga seguía insistiendo en saber.
En ese momento llegó Walther y se sentó a mi lado, con una bandeja de comida y me dió un dulce.
–Te he estado observando– Me dijo Walther mientras acomodaba el plato de comida en la mesa–He notado que has estado callada durante las clases, ¿Todo está bien, Bri?–
*¡Diablos!, ¿Tan notorio es mi estado de ánimo? Pero espera... ¿Me ha estado viendo?*
–¡Eso mismo le dije yo!–Dijo Diana casi en un grito.
Agaché mi cabeza, pero eso solo señalaba que en verdad me pasaba algo, decidí levantarme para botar un envoltorio y choqué con alguien haciéndome caer al suelo, llevé una mano a mi cabeza, la caída me dejó algo mareada y al levantar mi rostro, vi a un chico que me miraba muy seriamente, se agachó y me observó durante unos segundos y finalmente me hizo una pregunta...
–¿Puedes levantarte?–Me dijo serenamente.
–Emmm, creo que sí...–Respondí mientras observaba detalladamente sus facciones.
–Entonces levántate–Con eso se levantó, metiendo las manos en sus bolsillos y salió de la cafetería sin decir nada más.
Walther llegó a ayudarme...
–¿Te encuentras bien?–Extendió una mano hacia mi, para ponerme de pie. Dirigió la mirada hacia el chico con el que choqué–¡¿Qué le pasa a ese tipo?!– Nunca lo había visto en el colegio, creo que es nuevo aquí.
Vagaba en mis pensamientos cuando sonó la campana para entrar a clases.
Estábamos un poco lejos de la clase que nos tocaba, así que Walther, Diana y yo corrimos, en la entrada del aula se amontonaron nuestros compañeros, así que esperamos para entrar, pasamos saludando al maestro y nos sentamos consecutivamente, yo primera, Diana segunda y de último Walther.
Él Profesor de Matemáticas se paró frente a la calse y aclarando su garganta , habló.
–¡Buenos días alumnos!, Ubiquemos la página número 8 en sus cuadernos de trabajo.
La clase fué interrumpida por una Maestra Consejera, quien quería entrar para decirnos algo, pensé que sería de algún evento como el día del amor y la amistad que ya se acercaba, así que no le preste interés he hise un pequeño garabato en una esquina de la paguina de mi cuaderno.
–¡Buenos días alumnos!–Habló la Maestra Consejera con entusiasmo– Hoy se une un compañero nuevo a su clase–Terminando esas palabras abrió paso el chico con el que choqué anteriormente, caminaba despacio, con una mano en su bolsillo y con la otra sujetaba la correa de la mochila, con la cara más seria que he visto en mi vida, se ubicó frente a la clase.
La maestra consejera siguió hablando.
–Él es su nuevo compañero, Thaner–Dirigió la mirada hacia el chico y lo tomó por los hombros, empujándolo para que nos dijera algo–Vamos, háblanos de tí–mis compañeros lo observaron, algunas de mis compañeras lo miraban con lujuria y otros notando la cicatriz de su ojo derecho ,dió un suspiro, como si no le gustara hablar de si mismo, pero no le quedó de otra y nos dijo cosas básicas de él.
–Hola–Nos dijo; miró hacia la maestra y ella le hizo una mueca para que continuara hablando–¡Achs!–Se le veía con disgusto–Mi nombre es Thaner Lennon, edad:16 años. Perdí dos años de estudio por mudarme innumerables veses, pero las razones de mudanza no les incumbe, no seré amable con ustedes "por ser el chico nuevo", solo no se metan conmigo y no me meteré con ustedes...¿Entendido?–
Había tanta oscuridad en aquellas palabras, que hasta los profesores se sintieron incómodos, le pidieron al chico o mejor dicho a Thaner que se sentará dónde le gustase y el caminó hacia la parte de atrás del salón,hubo un silencio sombrío mientras caminaba hasta su asiento. La maestra consejera salió del aula para que siguiéramos con la clase.
Thaner se veía algo desinteresado en poner atención a la clase, de echo, nunca miró hacia la pizarra, solo veía por una de las ventanas con su mano deteniendo su quijada. El profesor le llamó la atención y ya que nunca lo vió poner atención hacia lo que explicaba, le pidió hacer uno de los ejercicios que estaba desarrollando.
Thaner se levantó y con las manos en los bolsillos, caminó hacia la pizarra siempre con esa exprecion nula en su rostro, pasó a un lado de mí y tomó el marcador de pizarra de la mano del profesor, en cuestión de segundos desarrolló el ejercicio he incluso le corrigió un error que tenía uno de los ejercicios del profesor, este solo se quedó boquiabierto y con la voz temblorosa le pidió sentarse a Thaner, la campana sonó y nuestra siguiente clase era español, Diana y yo nos levantamos y mientras me acomodaba una de las correas de la mochila, sentí que mi mochila golpeó en algo.
–¿Eres o te haces la torpe?–Me quedé helada,su vos daba miedo y no había notado lo alto que era Thaner–¡Ohh discúlpame!, no sabía que eras sorda–Continuó diciendo.
–¿Cuál es tu problema?– Se interpuso Walther–¿No puedes solamente irte y ya?–Walther me tomó por los hombros, en señal de protección.
–¿Te incumbe? Sabes...eres demaciado entrometido para mi gusto–Se le acercó y lo tomó por el cuello de la camisa– Muy...entrometido en conversaciones ajenas, muévete– Una voz en mi mente le gritaba a Walther que se fuera.
Pensé que Thaner lo golpearía o algo parecido, pero llegó un maestro para sacarnos del aula ya que el timbre ya había sonado y nosotros seguíamos dentro