Enfrentamientos y primeras discusiones. 05
《Mis silencios, son el reflejo de la guerra que tengo conmigo misma.》
A.F.P
Destiny.
-Enserio es una mujer estúpida, no entiendo cómo es que no se da cuenta- le hablo a mi mejor amigo Joseph.
-Ella ya te dijo que no lo es, entonces créele Dest- dice ya aburrido.
-Se supone que debes ayudarme Josh-ruedo los ojos y me lanzo a la cama.
-Y lo hago, pero entiende que no todo gira en torno a tu odio contra tu madre, para ella todo esto es nuevo y créeme que poco a poco se dará cuenta de la verdad- explica pacifico.
-Conociendo a Sophie tratara de engañarla-digo mirándolo con preocupación.
-Todo estará bien Dest, bueno cambiando de tema, ¿cuándo llega? Quiero conocerla-dice emocionado y solo río.
-No lo sé, fue a casa de sus padres a traer sus cosas o yo que se, la verdad salió con Sophie en la Jeep 10 minutos antes de que llegaras-miro mi teléfono como si fuera el objeto más interesante del mundo mientras le hablo.
-¿Que tan iguales son?-dice después de un momento.
-Ella es 2 cm más alta que yo, su cabello es más claro y tenemos los mismos ojos-me encojo de hombros.
-¿Son gemelas espejo?
-No lo sé-niego con la cabeza y pongo una música para que no sea incómodo.
Tag you're it comienza a reproducirse desde mi teléfono y yo comienzo a tararear.
-Tú y tu música tétrica-ríe Joseph.
-Yo no critico que escuchas a ABBA-le muestro mi lengua y el solo sigue riendo.
-Su madre y hermana están de regreso, Sophie te llama-dice Melanie apareciendo en mi habitación y ruedo los ojos otra vez.
-Oki Mel ahí voy-digo divertida, ella no dice nada y se va.
-Conoceré a tu hermana- Josh se emociona.
-Es un perra-digo fría a lo que él solo le resta importancia.
Nos dirigimos a el despacho de Sophie ya que es el único lugar donde se siente en paz para hablar, según ella.
Entro sin tocar como es costumbre y me topo con una Sophie molesta.
-¿Porque no te callas? No me conoces del todo para decirme eso, soy tu madre-sus ojos retan a Samantha quien se encuentra con los dos brazos apoyada en su escritorio.
-No me callo porque me quieres ver la cara de estúpida y eso créeme que no podrá ser posible-dice neutra Samantha.
-Vaya... al parecer a alguien se le están complicando sus planes-digo casual ocasionando que ambas me miren.
-Por cierto, Sammy él es Joseph mi mejor amigo, Josh ella es la perra que tengo por hermana-los presento con poca amabilidad y me siento en uno de los muebles de 3 piezas.
-Si que son iguales...-dice Josh con asombro.
-Que esperabas, son gemelas espejo-dice Sophie con un poco de fastidio-por cierto, hola hijo-suaviza su tono cuando dice lo último.
Ella lo quiere como un hijo más, estoy con Josh desde el Kínder y nunca nos hemos separado, Sophie y su mamá se llevan bien ya que son ex compañeras del colegio, por lo que tenemos una amistad bastante estable y libre de malos entendidos por parte de nuestras madres.
-Hola-dice Samantha en un tono frío.
-Se cálida hermanita-digo en burla.
-Cállate perra- dice con odio y yo solo me encojo de hombros.
-Chicas lean este libro, es algo de historia familiar-dice Sophie poniendo sobre su escritorio un libro grande y demasiado grueso para mi gusto.
- ¿Y para qué? -digo mirando con asco el libro.
-Para que aprendan sobre su historia, ustedes no son iguales por casualidad, hace 150 años existieron Danna y Dennis, gemelas espejo como ustedes- dice mostrando una página con una fotografía vieja y en ella veo mi rostro y el de Samantha.
-Claro y nosotras somos las destinadas a algo súper importante que definirá nuestra vida-dice Samantha con ironía.
-Le atinaste- dice Sophie simple.
-¿Qué?-dice asombrada.
-Tienen que leer el libro de principio a fin- se encoje de hombros y pasa su vista hacia mí.
-Yo no leeré nada, sabes que odio leer- digo molesta por todo lo que dice.
-A mi si me gusta, dámelo, tendré un resumen de lo más importante en una semana como máximo-dice mirando el libro con emoción.
-Eres una nerd-digo con fastidio recordando lo de la mañana.
-Al menos yo si soy culta, no como otras que solo viven en una burbuja llena de odio y color negro- se defiende.
-Al menos a mí no me gusta el rosa- trato de defenderme como puedo.
-Y a mí no me gusta ser una perra como lo eres tú-se dirige hacia mí con mucha molestia.
-Si yo lo soy, tú eres peor-digo a la defensiva.