A través de ti (marcadas por el destino)

A través de mi

A través de mi. 15.

《No puedes despertar, esto no es un sueño 》

Samantha.

Desde que saben mi problema las cosas se han puesto tensas…

Las miradas de lastima, rencor y empatía me están volviendo loca. El medicamento en mi sistema me tiene tan débil, que a veces solo siento morir lentamente.

“Solemos creer que la vida o todo es blanco y negro o que otras veces tiene colores, yo veo mi vida como una paleta monocromática, grises, negros, blancos… me pregunto en qué momento de mi vida deje de entender el significado de estar bien.

La culpa recae en mí y lo único que se me viene a la mente es que no hay arrepentimientos, soy lo que soy porque quiero, pero esos ojos cafés logran replantearme la pregunta. Ella es Suspicaz, Oportunista, Perseverante, Hostil, Irritante y Encantadora; la definición de su nombre “la que posee sabiduría” es la más acertada que pueda existir.

Fue un error que me orillo a verla otra vez sabiendo los peligros que existían, ella me amaba y yo nunca descubrí el sentimiento”.

E. Rivera.

Desde que recupere parte mi conciencia estoy en un ir y venir en cuanto a los escritos de Einar Rivera.

-Nunca podrás deshacerte de mí. – su voz susurrante me perturba.

-No si acabo conmigo primero, déjame en paz. – el pensamiento en voz alta hace que sobre salte.

-Yo solo te protejo de lo perturbada que esta tu mente. – la alucinación regresa…

Me veo a mí, siendo una niña, era mi cumpleaños número siete, la decoración lujosa y los invitados se ven como fantasmas.

-Este vestido es horrible madre. – mi yo pequeña trata de quitarse el vestido.

-Sabes que lo único horrible en ti es tu actitud de loca desquiciada. – su voz molesta hace que retroceda.

-No tengo la culpa de que el psicólogo me diagnosticara hiperactividad…

-Claro que es tu culpa, siempre ha sido tu culpa y la de tu padre, tienes suerte de ser su hija, de lo contrario ya me habría desecho de ti. – Amy sale de la habitación dejando a la niña sola.

Trato de moverme, pero no puedo y el observar como me destruyo tampoco es de ayuda.

-Sabes que lo único que deseas hacer es desaparecer, yo te puedo ayudar. – su voz aparece fingiendo ser un bálsamo.

-No puedo, eres mala, por tu culpa debo consumir pastillas. – la voz de la pequeña me hace llorar.

-Solo déjame tomar el control, prometo que nunca más te sentirás así.

De la nada grito diciendo que no la escuche, que no la deje entrar en su cabeza, pero de nada sirve porque presencio por 4ta vez en lo que va del día, como mi alter ego se deshace de mi y toma mi lugar.

-Las cartas del juego están sobre la mesa, depende de ti, saber retomar el camino, sino yo me asegurare de tenerte sometida como cuando eras una pequeña indefensa. – sus ojos mas oscuros me observan y yo solo sigo gritando.

-Sam… despierta… - la voz de Melanie me hace despertar, pero no me hace dejar de gritar.

No es hasta que salpica un poco de agua en mi rostro, que consigo despertar y regresar de la realidad falsa creada por mi cerebro.

-¿Qué sucede? – su pregunta me deja en blanco.

-Son los efectos de la pastilla, no es nada grave. – trato de ocultar la verdad, pero un par de ojos me incriminan.

-Si quieres que te ayudemos, será mejor que hables, no tengo tiempo para soportar a otra inestable. – su tono gélido me hace encogerme en mi lugar.

-Fue una alucinación/recuerdo, sucede cada vez que dejo de consumir el medicamento por un tiempo y luego lo vuelvo a consumir, se ira con el tiempo…

-Llevas una semana actuando como un fantasma, ¿es normal para ti? – la pregunta de Sophie me deja fría.

-¿Una semana? Eso es imposible, el efecto solo dura 3 días, no juegues conmigo que no puedo soportarme ni yo. – le suelto con desprecio y ella solo sonríe con cinismo.

-Llevas una semana actuando como una demente, gritando y llorando mientras te hundes en lo que parece ser depresión, la única que está jugando contigo eres tu misma. – le hace una seña a Melanie y esta me mueve hasta el sofá de no se que parte de la casa.

-Solo queremos saber que te tiene tan mal. – Melanie me tiende un vaso con agua y lo bebo con prisa, tenia la garganta seca.

-Son los traumas de mi infancia, poco a poco he ido guardando miedo y odio dentro de mi cabeza, así como también es el estrés post traumático, ver casi morir a Amy en aquel entonces mi madre, hizo que ella despertara del todo y se adueñara de mi cabeza. – los recuerdos me atormentan, pero doy todo de mi para seguir en el presente.

-¿Cómo que casi morir? – Sophie se acomoda los cabellos castaños y saca su teléfono.

Va a grabar tu confesión, piensa bien en lo que vas a decir. – otra vez su voz aparece y la miro en la esquina de la habitación.



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En el texto hay: mentiras, familias separadas, problemasfamiliares

Editado: 20.03.2022

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