capitulo I

"La belleza del rostro es frágil, una flor pasajera: 
la belleza del alma es firme y segura" Moliere 

Vanko!! ven aqui- ¿que queria mama? estaba jugando tranquilo, fui a la cocina que era donde creia que ella se encontraba, pero no era asi, no habia nadie, solo lo que mama coninaba parecia que iba a freir algo, desde que vinimos a la nueva casa ella intenta hacer comidas nuevas, me acerque para ver que era lo que comeriamos esta vez, pero no alcanzaba, me di la vuelta y vi una de las sillas, decidi acercala para poder ver mejor que habia en la sarten, cuando subi y por fin pude ver me senti decepcionado, no habia nada mas que el liquido amarillo calentandose, comence a bajar de la silla para ponerla en su sitio nuevamente.
Vanko!! ¿donde estas? - me sorprendio escuchar a mi mama tan cerca y me apresure en mover la silla, eso hiso que el respaldo de tironeara el mango de la sarten que estaba en el fuego y cayera direco a mi.

Me desperte sin sobresaltos, hacia tiempo que me habia acostumbrado a soñar con el dia en que mi curiosidad que condeno para siempre, mi nombre es Vanko Metaxas, mi familia proviene de grecia, nos mudamos a inglaterra cuando tenia 7 años y a los 8, queme por accidente mi rostro con aceite hirviendo, luego de eso ya nunca pude ser yo mismo de nuevo, nadie queria acercarse a mi, como si ellos fueran a contagiarse las quemaduras que tengo; a pesar de esto mis padres querian que siguiera teniando una vida normal y me enviaron a escuelas en las que nadie queria ser mi amigo, en ese momento no lo entiendia y ahora no los culpo, yo tampoco me habria acercado a alguien que lucia como yo lo hago, ahora con 28 años mi vida no cambio mucho, solo por el hecho de que cuando termine mis estudios no volvi a salir de casa. Mis padres trajeron algunos psicologos y todos me contaron lo mismo, "vanko, los adultos son diferentes a los niños, ellos entienden tu condicion" ¿como iba a creerles? entiendo que no soy la unica persona con el rostro quemado en el mundo, pero el que sepa eso no evita que me moleste la primera reaccion de todos al conocerme, esa cara de susto mezclada con lastima, es por eso que no quiero salir de casa no necesito ver esa expresion en nadie.
Tome mi telefono para ver la hora, 3:45 a.m, me levante, ya no volveria a dormirme siempre pasaba lo mismo, fui a buscar algo para tomar a la cocina y volvi a sentarme cerca de mi ventana, solo hacia esto de noche ya que nadie podia verme asomado por la ventana si apagaba las luces de mi cuarto, sim empargo esa noche habia alguien sentado contra el poste de luz, estaba abrazando sus piernas y miraba hacia abajo pero podia deducir que era una chica, ¿que hace sola en la calle a esta hora?¿necesitara ayuda?, ¿que estoy diciendo? de todas formas mi ayuda no es la que querra, decidi ignorarla por un rato pero se hicieron las 4 a.m y ella seguia ahi.
¿que hago?¿me armo de valor y voy a preguntarle si esta bien? podria simplemente ofrecerle mi celular para que llame a algun familiar o amigo, me arme de valor, me puse un abrigo que tenia capucha y sali de casa para dirigirme al poste, ella no me escucho llegar.
disculpa, no quiero asustarte per...- ella levanto la vista apenas me escucho, era una mujer hermosa, era pelirroja y tenia ojos color miel, ella se me quedo mirando un rato, me acomode la capucha para que no viera mi rostro cuando me di cuenta que estaba bajo la luz del poste y ella podia ver mi rostro con claridad, mi plan era no llegar a entrar en lo que iluminaba el poste asi no me veria, ella seguia mirandome pero no era una de las miradas que conocia, su mirada era mas curiosidad que miedo o lastima, se levanto y me di cuenta que me llegaba a los hombros.
Me llamo darcy, lamento haberlo preocupado- ella me sonrio, hacia mucho tiempo que no veia una sonrisa dirijida a mi que no sea la de mis padres.
¿estas perdida?, puedo prestarte mi telefono para que te vengan a buscar- le acerque mi telefono, pero ella lo rechazo empujandolo de nuevo hacia mi.
No se preocupe, ya encontrare donde dormir por aqui - dijo mirando hacia atras como si buscara un lugar comodo para quedarse.
¿no quieres volver a casa?- agachó la cabeza cuando escuchó mi pregunta.
el problema es que no tengo a donde volver-.

Nota de la escritora: Lamento si hay algun error en la escritura, pronto lo arreglare.