Capítulo
5
Sobreviviendo.
Caminamos varios días por los túneles secretos de Luvok, allí conocí a Vesna y su compañero de armas Calavera y a Fresia, esa noche era la última que estaríamos bajo tierra y estaba tan nerviosa que me quedé despierta, Calavera se había ido a patrullar y el silencio me incomodaba por eso me fui a la esquina y comencé a llorar estaba desconsolada, no sabía si volvería a ver a Mucu, o si podría volver a Luvok, todo el reino me buscaba y según los informantes de Calavera iban a mandar a buscarme en todo Topik, si no me encontraban sospecharían que me había escapado. Al mismo tiempo yo no quería hacer demasiadas preguntas por miedo a las respuestas, que obtendría. Entonces al rato de haber empezado a llorar escuché a Calavera decir.
-Me extrañaba tu buen estado de ánimo. Se que no es fácil, pero te acostumbras, todos terminamos acostumbrados.
-No quiero acostumbrarme, yo deseo volver.
Él se acercó y se sentó en frente mientras yo lloraba.
-No tiene sentido que llores más, si te encuentran estarás muerta antes de lo que canta un Kepes (gallo o gallina)
-¿Por qué no desapareces?
-Porque soy el único que os mantiene con vida.
Después él se retiró y me quedé dormida al rato mientras lloraba. Al llegar la mañana escuché.
-Hey despierta Asar.
Me despertó Calavera y me sobresaltó su voz.
-Vamos tenemos un largo camino por delante.
Dijo él y me ofreció su mano, cuando se la observé me di cuenta de que su mano era muy parecida a la mía, se la agarré y le pregunté mientras le seguía de cerca para salir del túnel.
-¿Eres un Londra?
-No, soy un Milenius.
-¿Un Milenius?
-Sí, pero si no has escuchado de nosotros mejor.
-No la asustes, tenemos que salir de esta cloaca antes del atardecer y no quiero juegos macabros.
-Lo que usted desee señora Vesna.
-No juegues conmigo Calavera.
-Chicos, nos estamos…
Escuchamos un ruido en el fondo y cuando me di la vuelta estaba Calavera sujetando a Fresia.
Luego Vsna dijo:
-Fresia despierta, no podemos estar así eternamente.
Y Calavera replicó:
-Ellas son tus hermanas no las mías.
-Bien cárgala hasta que despierte.
-Bien.
Me coloqué al lado de Vesna y pregunté.
-¿Es normal que Fresia se desmaye?
-No a menos de que tenga una palcks (visiones).
-¿Y tú no tienes?
-Yo las controlo por eso no sufro, igualmente al principio Calavera me ayudó a superarlo.
-Y que sepas que, no pienso hacer de nicuma (niñera) otra vez.
-No te lo hemos pedido, pero gracias por ofrecerte.
Dijo Vesna riéndose.
-Ni lo pienses ni en un millón de años.
-No te preocupes Asar él no es tan rudo como parece y será mejor cuando haga de tu nicuma (niñera)
-Vesna no le mientas que luego se lo va a creer.
-Hoy ya entiendo, te preocupa su bienestar ¿verdad?
-Sí no me preocuparán ellas ya estarían muertas.
-Claro, si ese es tu estilo.
-Ya estamos llegando…
Llegamos a una escalera y él siguió indicando.
-Ponemos la capucha y tu Vesna iras primero luego la llunta (primeriza) y luego subiré con Fresia, y tened los ojos abiertos porque presiento que no estamos solos.
-Bien mi capitán, con silencio y destreza.
Cuando subió del todo esperó y me dijo.
-Ya puedes subir.
Cuando subí estábamos en un jardín con estatuas blancas, doradas y una gran fuente todo era de un estilo Berborá (griego) con grandes columnas y escaleras de mármol. Calavera nos llevó hacía la entrada sur que estaba justo del otro lado y entramos en el palacio a lo que yo pregunté.
-¿Estamos en el palacio de Kappa?
A lo que Calavera respondió:
-Ssss.
Y Vsna aclaró.
-Es impresionante adónde te llevan los túneles…
-Ssss callad.
Las dos nos miramos y nos reímos, era como si nuestros pensamientos se conectaran para decirse mutuamente que no le íbamos a hacer caso alguno a Calavera.
-¿A dónde vamos ahora?
Pregunté con curiosidad.
-Vamos a salir del palacio, para dirigirnos al desierto del Kep.
-Ssss.
Vinieron unos guardias y decían.
-Sabes lo que odio de los turistas es que tocan todo y luego cuando les digo que no se toca y me doy la vuelta sé que ellos siguen tocando las estúpidas esculturas, si sigo así me volveré loco.
Ellos pasaron y cuando iban a cerrar la puerta se escuchó.
-¡Suéltame no seas estúpido!
Entonces Calavera disparó hacía los guardias y los mató, pero ellos ya habían tocado la alarma.
-Bien, pero cierra la boca.
Dijo Calavera muy furioso:
-Valla parece que nosotras tenemos mucho más cuidado que tú.
-Déjate de chistes Vesna tenemos que salir.
-Y ¿cómo sugieres que lo agamos? Porque si salimos ahora nos matan.
-Vamos, tengo una idea.
-Genial, sujetaos bien las faldas porque sus ideas suelen ser radicales.
Subimos las escaleras detrás de Vesna veíamos los cadáveres de los guardias que Calavera mataba. Al subir a la parte superior había una sala de relajación, con plantas exóticas y una gigantesca piscina de agua del rio Terma (cálida).
-Es increíble que estemos ante el Pulips (sauna) del rey Kappa.
El rey era un arolan (anfibio) y por eso era estremecedor estar allí.
-Nicus, la salida es por aquí.
Dijo Calavera, impacientándose.
-A ver quieres que todas nos tiremos al vació y sobrevolamos sobre la cascada del castillo y caigamos sobre el rio Terma.
-Exacto Vsna, y tu acompañaras a Fresia y yo iré con la llunta (primeriza)
-Okey, nosotras primero y no te preocupes Asar el no muerde a los de su equipo.
Fresia se tiró con Vsna, después de decir eso:
-Es gracioso que todos te tomen el pelo.
-Bien vasta de charlas.
El me tiro de golpe y mi corazón latía con intensidad y mis gritos eran ensordecedores y cuando caí en el rio Terma el agua me arrastraba por en medio de las piedras y el agua iba muy deprisa, gasté todas mis energías tratando de resistir la corriente entonces sentí que Calavera me gritaba.