Otra vez la música suena reacia,
otra vez escondes la mirada.
Yo estoy intentando que puedas confiar.
Otra vez el cielo es gris e inerte,
otra vez pretendes no estar triste.
Yo estoy intentando ser apacible
incluso para el peor escenario posible.
Veo pétalos secos
y tus ojos húmedos,
veo el humo del café
y el espectro de algo que duele.
Te veo hermoso como una flor
que está matando el calor.
Quiero levantar tu ánimo
o arroparme contigo,
que tengas en cuenta, mi amigo,
que una sonrisa y una risa no es lo mismo.
Ocultas tus ojos
como la luna al amanecer,
estamos solos, no estás solo,
¿por qué es tan difícil entender que te puedo sostener?
Tus ojos me dicen cosas que tus labios callan,
¿cómo puedes creer que puedo estar bien sabiendo que estás mal?
Tus ojos son una flor abierta.
En la noche los capullos se cierran,
cuando todo es problema, te aíslas.
Si ves borroso y oscuro está
déjame ser la luz que brille por donde vas.
Quiero que sepas que me preocupas,
que no es molestia poderte ayudar.
Veo tu cara petrificada,
inmóvil, queriendo gritar basta.
Escucho tus labios de papel
diciendo que todo estará bien.
Te escucho quebrarte como un tallo
y contarme por qué estás llorando.
Veo tus ojos como flor abierta
agradeciendo la luminiscencia y mi presencia.