¿Todavía no sabes?
Lo que te pasa a ti, me afecta a mí.
¿De verdad no sabes?
Tu hermoso destello me desencadena a ser yo.
Estando juntas, incluso separadas,
podemos ayudarnos a enfrentar todo,
vivir nuestros sueños a nuestro modo.
Pon tu mano en mi hombro.
Estamos hechas de oro.
Quiero llevarte a un lugar
donde no te alcance ningún mal,
y con un abrazo alejar tu soledad.
Este averno pasará,
volveremos a vernos una vez más,
y en mitad de la histeria gritaré que te amo,
probando que a nuestro lazo
no lo separan metros cuadrados.
Ahora que está lloviendo y estamos lejos,
parece que el tiempo detuvo el momento
en que nos reencontremos.
En unos meses bailarás,
de esta pesadilla te reirás,
y verás diferente lo que es una caricia.
Ahora que está lloviendo y estamos lejos,
no puedo evitar pensar
que tu dolor quisiera arrancar.
En un instante desaparecerá todo,
volverás a vivir a tu modo,
y las coronas solo serán de oro.