Academia Aether

Capítulo 14: Misión de gremio.

—¿Huesonegro? ¿Quién es Huesonegro? —le preguntó Wind al cuerpo agonizante del supuesto Líder, pero este solo respondió con una carcajada hasta ver la auténtica muerte—.

—Eso fue muy extraño... chicas, este tipo dijo algo raro.

Wind voltea hacia atrás para ruborizarse muchísimo al contemplar como todos y todas la presionan con sus miradas de asombro.

—¡¿Te das cuenta de lo que acabas de hacer?! ¡¿Qué diablos fue eso?!

Le gritaba Alba muy sorprendida. Sin dejar que Wind responda, Kris añade:

—O sea ¿tu manipulación también altera tus emociones? Estabas escondida y de repente saliste e hiciste todo este desastre, de una forma que tu actitud no te lo permitiría, o al menos hasta donde te conozco.

La muchacha bastante apenada, responde cabizbaja y risueña:

—Bueno... Soy asi, a veces solo hago las cosas, y por lo de la manipulación; solía suceder desde antes, solo que esta vez la controle un poquitín. Todos comienzan a reírse un rato, pero Lucas se queda pensativo y agrega:

—A veces las manipulaciones fluyen dependiendo del sentimiento de la persona, es como una hormona, y en una persona arriesgada como tú puede salirse de control.

—Lo siento, tratare de calmarme un poco.

Se quedan en silencio un momento viéndose las caras, pero Samanta lo rompe diciendo:

—Ahora que todo paso, recojamos una botella de espíritu de vuelo cada uno para la tarea de mañana.

Todos reaccionan, en especial Alba quien dice:

—Cierto ¡vamos!

Justo cuando comienzan a caminar, son interrumpidos por las palabras de Kris:

—¡Esperen! Al final... ¿Quién es Huesonegro?

—No pensemos en eso ahora, lo sabremos después —respondió Alba—.

Y así pasó toda la noche. Los chicos y las chicas recogieron cada uno dos espíritus de vuelo embotellados de los carruajes de los nigromantes; uno lo bebieron y el otro lo guardaron para la tarea de mañana.

—Tiene un sabor raro, es como algo dulce —dijo Wind después de tomar el suyo—.

De repente, desde la piel de todos emanó una débil y efímera luz azul; una luz que siempre aparecía cuando alguien tomaba un espíritu vuelo, pues representaba que ya podían volar. Sobraron demasiados, pero no los tomaron para evitarse interrogatorios con la Guardia de la academia, y con las fuerzas del Aether.

—¡Vamos Wind! ¡Abre tus alas! —le propuso Alba a Wind con una gran sonrisa, a lo que la chica, confusa le pregunta: ¿Cómo lo hago?

En ese momento Kris interviene para enseñarle lo básico: —Es igual que cuando creaste la bola de energía solar, ahora solo debes concentrar la energía en tu espalda ¡Inténtalo!

La muchacha, aprieta sus ojos y se coloca en una postura agachada que demuestra el gran esfuerzo que está haciendo para concentrarse, realmente es difícil para ella; pero sus ganas de progresar son inquebrantables. Debido a que la salida de su manipulación recientemente había sido expuesta, sus alas emergieron de un destello de luz en poco tiempo. Entonces, al sentirlas, vuelve a una postura erecta abriendo los ojos lentamente y relajada, con una sonrisa de satisfacción —¿Qué tal? —Les pregunta—.

—No son como las anteriores —Dice Aarón asombrado—.

—¿Que? —Wind entonces gira la cabeza para ver como son estas alas distintas, por el tono en el que le habló Aarón se imaginó que estaban mal, pero realmente queda impresionada; las alas están hechas de una energía cósmica color azul, con rayos color purpura y chispas blancas muy brillantes—.

—¡Son muy hermosas Wind! —Exclama Alba—.

—Gracias...

Kris, se encuentra hipnotizada por el hermoso brillo de las alas de su compañera, para luego, saliendo del trance, decir:

—Es de noche, son alas de poder lunar. Son realmente preciosas, pero debemos irnos; ¡Vamos!

Los muchachos entonces emprendieron el vuelo de vuelta a la Academia, Wind, inhalando en concentración; aletea progresivamente más rápido hasta ascender, y volar junto a su equipo.

Tardaron dos horas volando hasta la entrada principal de todo lo que conformaba el territorio académico, ya que no podían atravesar el campo de fuerza. Dicha entrada era un portón circular enorme y cerrado, el cual no era afectado por el campo de fuerza, estaba custodiado por una gran cantidad de guardias con armaduras pesadas y de todos los tipos de manipulaciones. En frente del portón había una extensa y muy hermosa plaza; llena de fuentes, farolas y decoraciones ecológicas. En ella también merodeaban muchos guardias.




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