Mi hombre, al verse acorralado, miró hacia el suelo contándome que en mismo mes de Junio, su cumpliría cuatro años desde que dejó este mundo.
- Pero porque no me dijiste eso antes?
- Por qué no es algo que pueda contarlo tan abiertamente, todavía me afecta, además no tenía idea que las elecciones iban a ser en mayo, es más creí que estas serían en Febrero.
- En Febrero tengo que presentar mi candidatura y haber tenido la gran cantidad de firmas hasta esa fecha por eso es tan importante la campaña, ahora entiendo que los dos estamos siendo egoístas y aquí es donde uno de nosotros tiene que ceder.
- Es en serio Alex, o no te das cuenta que el que está cediendo en esta relación soy yo y no me estoy quejando, estoy feliz de estar aquí, te amo y sin embargo, siento que no estás poniendo nada de tu parte.
No entendía porque se estaba comportando así ya que desde que él llegó no he hecho más que respetar sus tiempos y su espacio. En otras palabras yo me he tenido que adaptar a él.
- Entonces que hacemos, tenemos que buscar alguna manera de ponernos de acuerdo, de buscar una fecha ideal para casarnos en donde todos estemos contentos, no quiero que sigamos peleando por tonteras ni menos hoy.
- Ya me estoy dando cuenta que para ti, mis asuntos son una tontería, me pregunto como será después.
Agregandome después de que se alegraba vivir conmigo para darse cuenta de como era realmente nuestra vida en pareja y como iba a ser estando casados.
- No sabía que te sentías así mi amor pero ya nos embarcamos en esto y no podemos echar marcha atrás, no después de todo lo que hemos luchado y de todo el amor que te tengo.
- De amor no se vive Alex.
- En eso tienes razón pero dime que pareja enamorada no tiene discusiones, pelear es parte de la vida y tenemos que aprender a conocernos, saber cuales son nuestros gustos o las cosas que nos molestan y saber como afrontarlos sin tener que separarnos y te prometo que los dos nadaremos para el mismo lado.
Minutos más tarde y mientras aún lavabámos los platos, mi papá ingresó a la cocina a preguntarnos si estaba todo bien entre nosotros.
- Está todo bien entre nosotros? - Preguntándole directamente a mi novio quien no decía ni una sola palabra y en cambio solo recibí una mirada antes de que abandonara el lugar.
- Te das cuenta, ni si quiera se lo que le está pasando y por más que trato de hablar con él terminamos discutiendo y a ha estado así desde que... - Ahí recordé que lo había dejado solo cuando más me necesitaba.
Mi plan era intentar nuevamente a hablar con Henry pero mi papá me detuvo.
- Es mejor que lo dejes solo y yo tenemos que hablar.
Ante la advertencia de mi papá no me quedó otra que escucharlo.
El señor Oscar Diaz parecía ser más papá de él que mio ya que en todo momento se puso de su lado y puede que tenga razón y de que yo nuevamente estaba siendo egoísta al poner la campaña sobre este día que para Henry era importante.
- Pero que querías que hiciera, que me quedara de brazos cruzados viendo como Wainright me gana en las encuestas?
- Te das cuenta de lo que me estás diciendo Alex como es posible que en tu cabeza solo haya espacio para la famosa campaña que no pudiste dejar un solo día que era este para concentrarte en tu novio y en lo mucho que a él le importaba este día?
Agregó diciendo lo mismo que Henry me había dicho antes, que esta sería nuestra primera navidad juntos y que tenía que ser especial.
- Entonces que debo hacer?
- Haz que estos días y hasta la noche de año nuevo, sean días especiales para él o hagan planes juntos pero acorde a lo que a él le guste hasta que sienta amado y apoyado por ti, porque decirle "Te amo" no basta, te acordaras de este viejo cuando las cosas empiecen a mejorar entre ustedes, te quiero hijo - Luego de eso nos abrazamos y anoté cada palabra de las que él me dijo.
Por lo que cuando despertamos a la mañana siguiente lo hice con una gran sonrisa y hasta le preparé el desayuno a mi príncipe quien todavía dormía.
Amaba verlo dormir ya que se veía tan tranquilo, era el momento perfecto para sorprenderlo y no solo con el desayuno que le estaba preparando, sino que con un regalo que le había mandado a hacer.
- Buenos días bebé - Con la bandeja en la mano - Mira te preparé unos huevos con tocino, palta y unas ricas tostadas además de un café de máquina que tanto te gusta y por si eso fuera poco, también te tengo una sorpresa.
Creí que todo lo malo se había olvidado al ver que al despertar me dio su típica sonrisa tierna que lo caracterizaba.
- Por que haces todo esto cariño?
- Acaso no puedo sorprender al hombre que amo?
Su sonrisa volvió a iluminar esa habitación cuando nuevamente se asomó en su rostro.
- Te amo - Intenté darle un beso pero me corrió la cara.
- Tu piensas que con un desayuno exquisito o con palabras bonitas voy a olvidar lo de anoche?
- Pensaba que si y ya no se de que otra manera pedirte perdón y esta situación ya me está volviendo loco.
- Si quieres que realmente te perdone vas a tener que hacer mérito y creo que vas muy bien, te amo.
Sabía que él me estaba poniendo a prueba y para seguir sorprendiénlo decidí sacar mi cartita bajon la manga, dándole así el regalo que le tenía preparado.
- Cariño quiero que cierres los ojos y estires tu brazo - Y en cuanto lo hizo colgué un pequeño paquete - Ahora ábrelos - Agregué.
En cuanto vio el regalo se sorprendió, creo que no se lo esperaba.
- Y esto?
- Es un pequeño presente que quiero que veas es algo especial confía en mí.
Sin más, finalmente sacó del paquete una cajita que contenía dicho regalo. No podía esperar a ver su reacción.
- Un collar, ese es tu regalo especial?
No era la respuesta que esperaba pero estaba seguro que en cuanto supiera la historia del presente, su rostro se va a iluminar.
- Mira este no es un collar cualquiera tiene un significado especial, resulta que esos tres días en los que no estuviste, fui a caminar por las inmediaciones de la Casa Blanca pasé por un árbol, uno que ahora es muy especial donde comenzó todo.
Luego de mi corto de mi corto discurso, el príncipe parecía no entender cual era la relación entre lo que le decía y el collar.
- Si te das cuenta en el detalle notarás que tiene forma de pino y es exactamente el mismo pino que nos vio darnos el primer beso, un momento mágico para nosotros.
- No debiste haberte molestado pero está muy bonito, gracias.
No pensé que su agradecimiento iba a ser tan frío, admito que me dolio pero para no generar otra discusión le sonreí levementemente.
- Sabía que te iba a gustar, feliz navidad mi amor.
Lo mejor de ese momento fue que terminamos dándonos un abrazo muy apretado lo que terminó en un beso.
Después de aquel apasionado beso él y yo nos miramos sonriendo, confirmando de esa manera que todo iba a estar bien entre nosotros.
Y Aprovechandome del momento le pregunté cuales eran sus planes para hoy ya que era un día festivo, le sugerí salir o quedarnos en casa a ver una película o tal vez leer o cocinar juntos.
- Lo más quiero es estar contigo cariño.
- Ambos pensamos lo mismo.
- El collar está hermoso cariño y me gustaría que mi joven plebeyo me ayudara a ponérmelo - Accedí de inmediato y mientras él se levantaba de la cama y se colocaba de espaldas a mi pude sentir su aroma lo que me hizo perder el norte de lo que estaba haciendo.
- Y bien cariño, pudiste ponérmelo?