Rochester Chann
Al ver que ya no sentía el olor de mi bella, decidí salirme de la academia. Tenía que preguntarle a papá sobre cosas que me estaban inquietando, ¿por qué no era normal que se vayan así de la nada? A mi corta edad no había presenciado ninguna pelea, salvo algunas provocaciones de otras manadas más nunca llegaba a mayores. Bueno, también estaban los humanos que casi siempre estaban por algún lugar…
Salí del salón, al parecer a nadie le importaba, la tensión y los nervios eran notorios, todos susurraban y no lograba interpretar lo que decían. Así que me dirigí al patio e intenté comunicarme con mi padre, pero había una tela que no me dejaba hablarle.
Eso sucede cuando los lobos estamos preocupados por algo. La preocupación y la tristeza nublan tus pensamientos.
Intenté comunicarme con mi madre, pero había olvidado que ella es humana. Busco la manera de hacerlo nuevamente con mi padre hasta que la tela blanca desaparece.
《Papá, ¿está ocurriendo algo que yo no sepa?》—digo ansioso.
《Gracias, por comunicarte,Hijo》
《Papá, qué está ocurriendo》
《Hijo, ve a casa e informa a tus hermanos mayores que reúnan a toda la manada, y, sobre todo, busca a tu madre, llamé a casa y no está, me preocupa mucho》—culmina muy preocupado.
《Tiene algo que ver con la manada de los Daciana》—insisto
《No preguntes, solo ve, ya te lo diré en casa》—corta.
Justo cuando estoy de salida Lycan me alcanza. Está muy serio.
—Hoy se suspenden las clases —dice— al parecer quieren atacar a la manada de los Dacciana, no pueden hacer eso con las mujeres más lindas —dice dejándome frío.
—¿Qué?—respondo sin poder entender.
—Sí, me acaba de comunicar mi hermano…
Me quedo en silencio —y, ¿quiénes son? —digo sabiendo la respuesta.
—Ah, pues, los Farkas, esos lobos están mal de la cabeza incluyendo al profesor —responde.
Me marcho sin responder y dejando atrás a Lycan. Los Farkas nunca fueron de mi agrado. Son manadas llenos de odio y maldad.
—Oye, al menos dile a tu manada que salga a proteger a los Daciana, nosotros lo haremos —grita.
Levanto la mano haciendo la señal de un sí, bueno solo los lobos entendemos eso.
Así que arranco mi vieja moto reparada y salgo disparado a la casa. La distancia es bastante larga, pero en medio de mi corrida desvío el camino hacia la dirección de los daciana. Necesitaba verla y preguntarle, sin embargo, mi yo racional humano me decía que no, que no la atosigara. Que dejará que siga su curso. Detuve mi motocicleta y me bajé a sentarme. Eran muy confusas estas emociones.
《Oye, tenemos que llegar a casa y alertar a los demás, tu padre no puede comunicarse con ninguno de los nuestros》—habla mi yo lobuno tratando de proteger a los nuestros.
—Quiero verla —digo
《Crees que yo no, yo muero por verla y olerla》—contesta —《pero ahora tienes que hacer lo que el alfa ordenó》—dice.
Mi yo racional vuelve en sí. Nuevamente arranco mi moto y me dirijo a la casa. El trayecto es muy relajante, día friolento y lluvioso…,cuando veo a lo lejos un coche estrellado contra un árbol. y, reconozco enseguida que es el coche de mamá.
—¡Mamá! —grito abriendo con desesperación la puerta. Su cabeza y su boca sangra. Inmediatamente rompo la puerta y la saco. Empiezo a sacudirla, no reacciona, presiono mis manos contra su pecho tratando de que vuelva en sí. Todos mis intentos son en vano.
Grito de frustración —¡mamá, mamá vuelve en sí! —continuó sacudiéndola. Mi yo lobuno está en shock que no reacciona. Mi yo racional se vuelve loco de desesperación.
De pronto, abre los ojos y la abrazo fuertemente. Tiene la boca sangrando que cae como un chorro de agua.
—Vamos al médico —digo y me fijo en el coche destruído y mi moto es un cachivache inservible.
Tengo que concentrarme. Tengo que pedir ayuda. Obligo a mi yo lobuno que vuelva en sí, pero es imposible, sigue en shock.
No había otra opción, es el único plan. Acomodo a mamá y corro hacia una roca con el fin de estrellarme, impulso toda mi adrenalina, y empiezo a correr y justo cuando estoy por estrellarme mi yo lobuno vuelve en sí e inmediatamente me transformo en un lobo desviando del peligro.
—¡Por fin! —digo.
《Qué pensabas hacer insensato》 —me grita
—Volverte en sí, estabas en shock —respondo.
《¿Qué pasó?》
—Mamá, necesita ir al hospital ¡comunicate con papá! —grito.
《Ya está en camino》
Continúo sacudiendo a mamá.
—Mamá tienes que vivir, no ahora que he conocido a la chica más linda del universo.
Mamá vuelve en sí y sonríe. La sangre sigue emanando de su boca impidiéndole que responda.
—Aguanta un poco más, un poquito más, papá viene en camino —la aliento secando sus lágrimas.
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Hoy hay actualización lob@s. Les cuento que anduve muy ocupada con temas de la pedagogía y los estudios. Por cierto, iré corrgiendo algunos errores que se me pasan.
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Editado: 22.09.2024