Cap. 12 Mal inicio
Como Jesse no tenía que asistir a la escuela durante aquellos días, había estado un par de veces en el pub de los Mitchel, pero la última vez le había dicho a Martha que no volvería si no lo dejaba pagar por el pastel. El último día del año y como no tenía trabajo, decidió ir a hacerles una visita, pero cuando iba saliendo tropezó con Nick.
- ¿Qué estás haciendo aquí, Nicola? -- preguntó y Nick arrugó el entrecejo
- ¿Hice algo mal?
- Sí, no quedarte cómodamente en tu casa -- contestó él y echó a andar hacia la estación
- ¿A dónde vas?
- No es asunto tuyo
Sin embargo, Nick se pegó a él como un chicle y Jesse tuvo que cargar con él quisiese o no, de manera que no fue por la parte de atrás del pub como solía hacer, sino que entró por la puerta principal. A pesar de la fecha y como de costumbre, aquello estaba atestado de gente, sin embargo, en cuanto Ed lo vio le hizo un gesto de saludo y para que se acercara a la barra.
- ¡Ey, Ed! -- lo saludó
- ¿Qué haces fuera de casa en un día como este, pequeño demonio? -- le preguntó, pero antes de que contestase llamó a su mujer y Martha se asomó
- ¡Jesse querido! -- exclamó al mujer -- Pensé que en verdad no ibas a volver -- le dijo abrazándolo y luego miró a Nick que veía todo con expresión divertida -- ¿Y este guapo jovencito quién es? -- le preguntó
- Un sujeto muy molesto al que te recomiendo no darle mucha confianza -- le advirtió mientras Nick extendía su mano
- Si eres amigo de Jesse siempre serás bienvenido, querido -- le dijo Martha
- Gracias mi encantadora señora, y cuando me conozca un poco más, verá que soy mucho más agradable que este pequeño individuo -- dijo destilando encanto
- Bueno, bueno deja la zalamería con este sujeto y vamos por mi pastel -- dijo Jesse
Martha rio y se fue con Jesse a lo que Nick supuso que sería la cocina, pues no tenía idea que el matrimonio vivía allí, así que luego de cruzar algunas palabras con Ed y como este estaba ocupado, se dedicó a ver las fotos que estaban en las paredes hasta que Jesse y Martha volvieron.
- ¡Nick! -- lo llamó Martha, pero él estaba mirando una de las fotografías y se volvió con expresión divertida
- ¡Estás aquí, enano! -- le gritó por encima de las voces de los presentes y algunos voltearon a mirarlo
Como Jesse no entendió lo que le dijo siguió tranquilamente sentado en la silla a la que se había trepado para comerse su pastel, pero un momento después una chica gritó.
- ¡Es verdad, es él! -- y un segundo después varias chicas se acercaron corriendo a Jesse y casi lo tiran de la silla
Nick se apresuró hacia la conmoción y ayudó a Ed a sacar a Jesse de escena.
- ¿Pero qué les pasa a esas chicas? -- preguntó mal humorado
- Lo siento enano, creo que fue mi culpa
- Cualquier cosa que suceda puedo creer que sea tu culpa, pero exactamente cómo lo es en este caso
- Es que te vi en una de las fotos que están en el salón y pues te grité diciéndotelo, así que ellas se acercaron y luego bueno…
- Espera, espera -- lo detuvo Jesse -- ¿De-qué-estás-hablando? -- silabeó y Nick comenzó de nuevo
Jesse había olvidado que había estado allí a principios de año cuando los chicos habían estado firmando autógrafos y se había tomado una fotografía con ellos, pero de lo que no tenía idea era que estuviese colgada en una pared del pub.
- ¡Demonios! -- exclamó -- ¿Por qué no podías mantener tu gran boca cerrada?
- Bueno, ahora eres famoso -- dijo Nick en tono burlón y a Jesse le provocó lanzarle algo a la cabeza
Pasaron un buen rato allí y cuando el pub comenzó a vaciarse ellos también dijeron que se marchaban, sin embargo, Martha les sirvió una última taza de chocolate y luego les dio un enrome trozo de pastel de manzana a cada uno para que se lo llevasen, pero cuando se despidió de Jesse le sujetó el rostro.
- ¿Estás bien, cariño?
- Claro ¿por qué no habría de estarlo?
- Es que… creo que tienes calentura ¿Por qué no vienes con nosotros a la casa de Dàmir?
- No digas tonterías Martha, estaba muy cerca de la chimenea, eso es todo, y no, no tengo deseos de comenzar el nuevo año viendo al jefe, ya lo veo suficiente
Terminaron de despedirse y se marcharon. Nick arrastró a Jesse a su departamento donde se reunirían todos a recibir el nuevo año, pero faltando pocos minutos para esto, a Jesse comenzó a dolerle la cabeza y le preguntó a Nick si no tenía algún analgésico, como ciertamente aun le quedaban de los que le había dado David, los buscó y se lo dio a Jesse, pero como recordó lo que había dicho Martha, lo miró con preocupación.
- ¿Te sientes bien?
- Sí, solo me está doliendo un poco la cabeza