Cap. 38 Adaptándose

Cuando Jesse había salido del hospital, estaba tan emocionada que no se había fijado por dónde iban hasta que entraron al aparcamiento del edificio.

• Creí que íbamos a tu casa  --  le dijo a Nick
• Que es tuya ahora también
• Gracias, pero igual no estamos en ella  --  insistió, pero él siguió guardando silencio

No obstante, cuando salieron del elevador, Nick introdujo la llave en la cerradura de una puerta y la hizo pasar.

• Bienvenida a nuestro nuevo hogar, enana  --  le dijo

Jesse había abierto los ojos con desmesura y continuaron así mientras lo inspeccionaba todo a su alrededor. Era un espacioso departamento que constaba de un pequeño recibidor, un amplio salón, una terraza, una cocina enorme en opinión de Jesse, y cuatro habitaciones. Después que lo habían visto todo, Jesse miró a Nick.

• ¿Qué sucedió con el otro?
• Nada, solo me cansé del odioso casero  -- dijo él  --  además, necesitábamos un lugar un poco más amplio
• ¿Acaso no te gusta?  --  preguntó Charlie
• Seguro, solo que ahora tenré mucho más que limpiar  --  dijo ella y Nick rio

Un poco más tarde se había presentado Jack trayendo al señor Miau, algo que alegró mucho a Jesse, pues mientras estuvo en el hospital había sido imposible que lo viese. Sin embargo, el minino no se parecía en nada al que había sido, pues ahora no solo estaba más grande sino mejor alimentado, y llevaba un collar en el cuello donde podía leerse Mr. Miau, algo que causó la hilaridad de Jesse.

• Te has vuelto muy snob, señor Miau  --  le dijo

Y no sabía Jesse cuánto, pues aunque en realidad el gato había pasado la mayor parte el tiempo solo y encerrado en el antiguo departamento de Nick, parecía haber absorbido la personalidad del dueño del mismo y ahora parecía más tranquilo, no iba por ahí brincando y parecía haber perdido el interés por los cordones de las botas de Jack. Aparte de lo anterior y fue algo que causó la ira de Jesse, cada vez que Nick se sentaba, el gato saltaba a sus piernas y se quedaba allí independientemente del tiempo que Nick permanecesiese sentado.

Al día siguiente de su llegada, Nick la llevó a comprar ropa y artículos para su uso personal, aunque Jesse no entendía por qué, pues para salir del hospital Nick le había llevado un pantalón, una remera y una chaqueta, al igual que ropa interior y zapatos, pero además al llegar a casa había encontrado en su habitación dos pantalones y dos remeras más, así como otro par de zapatos y aquello era mucho más de lo que había tenido nunca en su vida.

Sin embargo, Nick se empeñó lo mismo y al menos Charlie y él se divertirían mucho mientras que Jack terminaría al borde de un colapso. La primera tienda que habían visitado fue un completo desastre, pues las empleadas precían más interesadas en ellos, o más bien en Jack, que en atender a Jesse, así que Nick se hartó y salieron de allí sin comprar nada. En la próxima les fue un poco mejor, pero Jesse no encontró nada de su agrado ya que se trataba más que todo de vestidos y ella no se imaginaba metida en una de aquellas cosas. De manera que aunque Nick escogió un bonito vestido veraniego para ella, y Jesse juró que nunca usaría eso, él igual lo llevó.

Finalmente encontraron una mucho más acorde con la personalidad de Jesse, pues era una tienda de ropa casual que le recordó a la que los había llevado Dèjan a Mihailo y a ella en oportunidad de adquirir prendas adecuadas para asitir al concierto de Zora. La vendedora asumió de forma arbitraria que Jesse era hermana de Jack, tal vez porque ambos tenían el cabello negro y los ojos azules, y queriendo congraciarse con el chico, atendió a Jesse con el mayor esmero. Jesse mostró su interés en los jeans y en algunas remeras, pero como no se decidía y Nick para variar ya tenía hambre, resolvió el asunto llevándolas todas. Antes de marcharse y mientras Nick estaba pagando, la vendedora le hizo señas a Jesse y ella se acercó.

• ¿Podrías darle esto a tu hermano?  --  le preguntó intentando darle un trozo de papel y señalando con disimulo a Jack que discutía en ese momento con Charlie por una chaqueta
• En principio, ese no es mi hermano  --  dijo Jesse  --  y segundo ¿Por qué no se lo das tú misma?  --  y acto seguido se giró  --  ¡Ey Jack, esta quiere darte algo!  --  le gritó para mayor vergüenza de la chica

Salieron de allí con Charlie y Nick partiéndose de la risa, con Jesse riñendo a Jack, porque ella no era mensajera, y con un Jack furioso.

Nick no estaba muy seguro de si ir a la zona de comidas rápidas fuese buena idea, ya que David le había dicho que Jesse debía alimentarse bien con alimentos nutritivos y balanceados, pero mientras decidía, ella expresó su deseo de comerse una pizza, algo que había comido muy poco mientras estuvo en el hospital y solo en un par de ocasiones en las que Charlie, que era el experto en aquella materia, se las había pasado de contrabando. De modo que Nick decidió que una vez no le haría daño y se ocupría de que en la cena comiese lo debido, así que fueron por la pizza y mientras Jesse y Charlie daban cuenta de la misma, Jack se había decantado por comida tailandesa y Nick se despachó dos hamburguesas con doble ración de papas y un refresco extra grande.

• ¿Qué tienes en contra de las pizzas?  --  le preguntó Jesse
• Nada, pero no me llegan a ninguna parte
• No pareces italiano, Nicola
• Come o Charlie te dejará sin nada