La boda de Lisa y Rick. El mejor final está por venir. -

  Dimos el sí para siempre. 

                                                                                                               Rick Hunter

La noticia fue un boom especial, y conformaron todo para la gran boda. Pues no solo ello se tenía presente, sino que la llegada de un hijo sería recibida en meses. Lo que comenzó con una disputa entre oficiales superiores concluyo en una historia de amor. Hay más y Rick se preparó luego de un arduo día, pues festejaron la noche anterior con Roy, Max, Lían y otros oficiales.

Tenía su ropa preparada. El ingreso a la capilla sería por la tarde y luego el festejo.

Rick en su habitación seleccionaba el atuendo de frac. Lo tenía guardado desde hace mucho tiempo. Sin uso.

Detalladamente seleccionaba la ropa que sería la adecuada para su noche de bodas. Roy le dijo:

- Debes casarte hermano. No solo tienes a una gran mujer. Ustedes son el uno para el otro. Y llegará ese fruto de ambos.

- ¿Roy has estado nervioso alguna vez?

- Lo he estado siempre, aunque ello es por la simple razón de que la vida es experiencia Rick. Cada etapa que concluyas te lanzará a nuevos retos y objetivos que te pondrán nervioso y te darán miedo, porque es normal. Estamos hechos de carne y hueso. No lo olvides, pues la recompensa es grandiosa y merecida.

- ¿Quisiera que todo fuese más fácil?

- Hunter te puedo asegurar que lo peor ha pasado. Es hora de comenzar y no hay mejor ocasión para arrancar que éste momento.

"Roy me había dado de presente sus palabras que siempre guardo en mi interior. Son como tesoros que tengo allí en el cajón de los recuerdos y de vez en cuando abro la gaveta para oírlos. De eso se trata a veces".

Rick rememoró los acontecimientos previos al día especial

- Vamos Rick. Eres afortunado. Solo tendrás miedo al llegar al altar y oír al párroco, luego besas a la novia y todos te aplauden – Max intentaba ser convincente

- De todos las personas que les deseo una gran vida tu eres la primera mi amigo. A ti te debo la vida. – Lían tardó en retornar con el permiso concedido por el gobierno a la tierra por unos días con Vanessa.

Y el mensaje clave fue por su móvil.

- Éste será un día especial. A pesar de todo lo que hemos vivido. Será un día especial para ti, pero también para mí. No guardo más que todo ese cariño que te tengo y que me ha hecho brillar en mis peores momentos. Solo se feliz que yo haré lo mismo. Te quiere por siempre. Minmei

Rick al leer aquella misiva se comunicó de inmediato.

- Gracias. Se que es un momento difícil. Y admiro ese valor. Esto es complicado. Lisa se ha convertido en la mujer que amo. La persona que sostiene mi mano. Y me disculpo.

- No pidas disculpas. Al contrario, tu perdóname a mí. Tu eres una persona maravillosa. Y quiero ese día estar allí para alentar tus sueños. – Mimmei respiró hondo al escribir esas palabras, sin embargo deseaba despedir a Rick de su vida.

- Sera un placer recibirte. Gracias por todo lo bello que haces.

Rick recordó esas frases y se dio cuenta que en algún punto estimaba a esa mujer que paso tiempo con él.

Continuó sin más remedio realizando sus tareas y preparativos. Lisa viajó junto a Claudia a la ciudad de nueva Baires. Roy las llevó. Pronto llegarían los demás invitados. Las condiciones no acarreaban peligro alguno. Desde que se produjo el descenso del SDF-1 pasaron algunas semanas en la cual se proyectaron las nuevas defensas y equipos de soldados que se alistaron. Maistrof, Exedore, Global, y Lang acudieron al encuentro. Global sentía en Lisa una hija y la llevaría al altar.

Minmei se preparó. Khaylin no tenía muchos deseos de ir a la boda. Un pacifista entre militares no era un buen recurso. No encajaba, como el agua y el aceite. De todas formas decidió ir con ella para que no éste sola.

El nuevo puente de mando y el delta 1, fueron designados al conjunto de cabos. Un grupo de mujeres ampliamente capacitadas para ello. La cabo Ingrid recibió una señal extraña que provenía de muy lejos de nueva Macross.

- Mira Esther ¿Esas señales?

- ¿Qué extraño?. – Dijo ella. El foráneo acontecimiento. Importunaba al cabo.

- ¿Qué opinas Alan?

- ¡Mmm! No tenemos a nadie para la patrulla. Todos se encuentran, con una licencia especial, y fuera de ciudad según mi computador.

Alan estableció contacto con el sector B. Del cual le indicaron que se comunicará con algún superior. En la ficha Alan tenía a Max, pero no se encontraba. De alguna manera su móvil estaba apagado. Rick a pesar de su día libre recibió el mensaje del advenedizo desarrollo en el desierto.

- Señor perdone. Comandante, digo. Sé que es su día libre – expresó Alan. Rick no lo tomo muy bien

- No solo es mi día de licencia cabo, sino que es mi boda. Lo Siento por molestar

- comandante. - Sin saber que responder. De todas maneras el deber de Rick, siempre estaba allí de la mano a su responsabilidad como piloto

- No hay problema. Iré para allá – Rick supuso que sería algo simple. Todos los demás oficiales de rango estaban en otras ciudades, o en Marte. O la luna. Es por ello que se habían nombrado nuevos reclutas. Rick prefirió ir solo. No era preciso con señales carentes de hostilidad. Solo será una revisión de rutina. Tenía todo el tiempo de sobra, para llegar a la ciudad. -