Liberar la mente

Algo malo va a pasar, lo presiento, sigo mirando a el hombre que me genera malas vibras y trato de ver lo que hace, está hablando por celular delante de un auto que creo que es la suya porque está apoyado y se mira a su alrededor como si alguien lo estuviera observando

Me escondo detrás de un árbol para que no vea que lo estoy mirando y espero, no sé qué, pero es mejor quedarse aquí, para ver si tengo que darle razón a mi sexto sentido o es solo una paranoia mía

Mientras tanto veo a Marcos que sale de la comisaría y parece un poco asustado, me escondo mejor para que él tampoco me vea, la situación es bien rara, Marcos va hacia ese tipo mirándose a su alrededor como si estuviese por hacer algo malo o como si tenga miedo de que alguien lo estuviera mirando

Se acerca a ese hombre y cuando se asegura de que no esté nadie mirando le pega un puñetazo a Marcos, luego una patada en el pecho y lo sigue pegando, pero Marcos no se defiende, es como si estuviera pagando por algo que hizo y no pudiera defenderse, lo raro es que como es policía siempre tiene un arma y además sabe defenderse muy bien porque si no, no trabajaría de policía

Lo veo que escupe sangre de la boca y que se cae al suelo, esto es demasiado, mi instinto me dice de ir a defenderlo, aunque si quiere algo de mí que no es nada bueno, tengo que hacer buena letra y no dejar que piense que estoy en contra suyo, sino que estoy con él, así puedo sacarle toda la información que necesito y no dejar que piense que soy su enemiga, al contrario, tiene que confiar en mí más que en su propia sombra para poder manipularlo, la mente humana es muy manipulable aunque si él está entrenado para que se mantenga con una idea suya sin que nadie se entrometiera, siempre hay algún lugar de la mente que es ingenuo y manipulable

No pienso más y me preparo para la acción, eso que siempre vi pero que nunca hice lo voy a hacer por primera vez

Saco el arma de mi uniforme, junto coraje y fuerza y empiezo a correr hacia ellos

—Deja de torturarlo porque vas a terminar mal—Le digo al hombre que le estaba pegando, termina de hacerlo, empuja a Marcos en el suelo otra vez, alza su mirada hacia mí y me mira como si estuviese viendo a un fantasma, se queda helado unos segundos, pero luego saca una pistola que tiene escondida y lo apunta a Marcos

—Si no quieres que lo mate baja el arma, ninguna mujer puede contra mí, entonces te recomiendo irte corriendo y que no digas nada de lo que viste, si no quieres terminar como él—Dice el hombre que agarra a Marcos y le apunta el arma en la cabeza

—Yo estoy entrenada para eso, no sé si vio que soy policía y que ya vi a muchos delincuentes como usted, y por ninguna razón si algún compañero mío está en peligro tengo que abandonarlo y salir corriendo, no está en mi naturaleza, no soy nada débil y si quisiera lo pudiera matar en cualquier momento—Agarro bien el arma y lo apunto a la cabeza

Marcos no trata de defenderse porque se ve demasiado débil, el hombre no lo suelta y entonces yo sigo apuntándolo y me acerco para ver si reacciona

—Un paso más y te vas al cielo, déjame solucionar los problemas que tengo con este hombre que no trabaja bien y por eso tengo que ponerlo en regla, pero tranquila que no lo voy a matar porque todavía me sirve—Dice el hombre, y unos segundos después lo empuja a Marcos que se cae en el suelo otra vez, pega unos disparos en el aire para que yo me distraiga, entra en su auto y se va, yo trato de disparar en las ruedas pero luego termino de hacerlo porque hay gente que camina por la calle y es demasiado riesgoso, es mejor no convertir esto en una tragedia, si ni siquiera lo mató y además si se busca los problemas él solo tampoco se merece mi ayuda.

Me acerco a él que está todo dolorido—¿Quieres que llame a una ambulancia?—Le pregunto preocupada por las heridas que tiene, desde cerca se ven mucho peor

—No tranquila que no es nada grave, estoy acostumbrado a estos tipos de cosas, pero tengo que pedirte un favor—Me dice mientras trata de ponerse de pie

—Si claro decime

—No me hagas ninguna pregunta sobre lo que acabas de ver y no se lo cuentes a nadie por favor, podría perder el trabajo y la vida también porque ese hombre es muy malo y no sabes lo que es capaz de hacer

—Pero tu eres policía y puedes meterlo preso, ¿porque no lo haces?—Le pregunto aunque si por lo que vi y por lo que dijo ese hombre, Marcos trabaja para él, hizo mal un trabajo y ahora pagó las consecuencias, en el mundo hay muchos policías corruptos que se meten con la gente menos confiable, con esto que acaba de pasar confío mucho menos en él y estoy más segura en encontrar el momento en la cual tengo que desenmascararlo, aunque si antes quiero escuchar su versión de los hechos, porque siempre hay que escuchar las dos versiones y no quedarse con una, aunque si se pueden descubrir cosas muy poco agradables y nos podemos arrepentir

—Por favor, nada de preguntas, me metes en peligro—Me dice con un tono firme para que yo entienda bien que es mejor no meterme en ese asunto y seguir adelante como si nada hubiese pasado

Decido no preguntarle nada más, además no sé qué estoy haciendo ayudando a un hombre que supuestamente quiere matarme, después de haber visto la grabación en donde estaba tratando de ponerme algo en la botella no merece ser ayudado

Lo dejo que se arregle solo y él logra ponerse de pie y se va