Advertencia de Amor

CAPÍTULO 32: “¡PERDÓN!”

~Kaori~ 

Llego a mi casa me cambio de ropa, me coloco un polo tortura negra, una falda negra unos pantis negros junto con unos botines color negro y una polera tejida a mano grande que parece de abuelita tiene unos cocos grandes de color negro y gris, es muy abrigadora buena para esta época, salgo de casa tomó el bus, bajo y ingreso a la cafetería a comenzar a trabajar, voy a una mesa donde hay dos chicos les voy hacer el pedido cuando uno de ellos me comienza a coquetear así que decido defenderme pero ellos sigue molestarme así que respiro. 

–Si no van a consumir nada pueden irse, están incomodando a los otros clientes digo. 

–¡Mira preciosa! ¡Nosotros vamos a pedir, pero primero quiero que me des tu número! Me dice queriendo agarrar mi mano. 

–¡Si, no se van ahora! ¡Llamare a la policía! Les digo.  

–¡No te nos pongas así linda! Me dice queriendo agarrar mi cara cuando veo que lo impiden  siendo pateados cayendo así al suelo se paran. 

~Isaac~ 

Estuve toda la tarde pensando en ella, de nuevo pode ver que me sonrió hoy su sonrisa es tan bonita, me cambio de ropa un geans negros junto con una polera amarilla y unos zapatos negros, salgo de mi casa me dirijo a la cafetería donde trabaja Kaori quiero verla, bajo del auto cuando veo que unos idiotas la están faltando respeto mi da una rabia que me acercó, a ellos y pateo a uno de ellos que hago que se caiga, miro su rostro de Kaori que se asombra pero luego sonríe. 

–¡Maldito mocoso! ¡Lo vas a pagar!, se acerca uno para pegarme, estos idiotas ¿acaso creen que me van a pegar?

–¡No les han enseñado como tratar a una mujer! Les digo mientras le doy un puño en la cara del chico que le agarro su mano, luego viene el otro a golpearme lo esquivo mientras le doy un rodillazo haciendo lo caer al suelo los dos se paran y se van sin antes de mirar a Kaori y a mí. 

–¡Que de pasa! ¡No puedes ir repartiendo puñetazos! , ellos de hubieran pegado peor, eran dos y tu sólo uno, ¡tampoco vuelvas haces eso en mi trabajo! Me dice, no se si se preocupa por mí a que me pegaran o se preocupa por su trabajo. 

–¡Ellos de estaban faltando el respeto!  

–¡pero eso no de da derecho a pegarle!, pero igualmente gracias, yo también quería darle su merecido pero estoy en mi trabajo y no puedo darme ese lujo… ¿es enserio le pegaría a ellos? “esta chica su forma de agradecer es rara, pero igual lo aceptó” 

–Me gustas, pero se que yo a ti no....”no se por que lo dije” tal vez porque quería que ella lo supiera, “no lo se”, ella esta  helada no sabe que hacer o decir, así que me quedo en silencio, ella no dirá nada así que me voy, pero la veo cuando subo a mi auto ella sigue impactada “ni se moverá del lugar”, bueno… arrancó. 

~kaori~ 

Salgo de la cafetería camino  al paradero cuando lo veo parado a Stefano me mira y yo él me acerco a él, lo miro por un rato es como si estuvieras hablando sólo con las miradas me aclaro la garganta y me animo hablar. 

–¿T-Te.. Encuentras… Bien…?es lo único que puedo decir ya que se me hace un nudo en mi garganta. 

–¿Si... T-Tú?... Me dice mientras me mira… 

–¡Y-Yo!..... No se que decir, siendo que quiero llorar.. 

–Quiero… preguntarte...¿si aún esta en vigencia la promesa?...(Que  tomarías mi mano y no la soltarás, por mas peligro que haiga correrás junto a mi lado…) me dice mientras me mira tiene un rostro muy hermoso pero triste, yo por otro lado no dejo de mirarlo, siento que las lágrimas salen por más que intento no llorar, me salen mientras lo escuchó hablar. 

–N-No… le digo veo como su rostro cambia su expresión, no aguando mas que me acerco más él, lo abrazo mientras mis lágrimas salen mojando sus chalina pero no me importa, hasta que siento un brazo en mi cintura y la otra en mi espalda me abraza tan fuerte pero no me incómoda solo quiero estar así por un gran rato sin que se aleje de mi quiero seguir sintiendo su olor, hasta que se separa de mi me agarra mi mano me hace entrar en su auto, el también ingresa al auto, lo prende y comienza a manejar en silencio hasta que llegamos a mi casa bajamos del auto habló la puerta él entra conmigo me sienta en el sofá, el se sienta en el otro me jala, con sofá todo hacia él, coloca sus piernas, en cada esquina mientras mis piernas están adentró. Trato te moverme para salir de su agarre. 

–¿Es enserio? ¿Piensas que con esa fuerza de vas a liberar de mí?, me dice con una voz de engreído, mientras se ríe. 

–¿Por qué me has abrazado, si no vas a cumplir la promesa?, me dice, no se que decirle ni yo se por que lo hice. 

–¿tú también lo has hecho? 

–¿Cómo no hacerlo, si te quiero tanto?, ¿Bueno al menos uno de los dos estamos haciendo sincero…? 

–Yoo..¿has llorado?. 

–Valla…Kaori… si que eres buena evadiendo preguntas… 

–Sabias que los pingüinos se encuentran en peligro de excitación, por la contaminación, eso me pone triste… me dice mientras agarra su cabeza, este chico si que es raro ni siquiera sabe mentir.  

–mira quien habla de evadir preguntas… cuando ¡Tú mientes!.. Le digo mientras lo miro. 

–Bueno, ya que estamos hablando con la verdad ¡no te quiero ver cerca de Isaac!, también Quiero… que sea mas sincera contigo misma...  




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